Y sí...?

Capítulo 21 ✅

Mi padre y mi hermano me sonríen, intentando calmarme, pero ambos pueden ser unos jodidos cabrones cuando quieren, no en el mal sentido pero sé que pueden intentar burlarse de mi en la cena, mientras comemos con Gala. Me explico, papá sabe de todas las cosas vergonzosas que he hecho, y Lukas conoce algunas porque desde que mi padre se sincerara hace casi una semana, no han parado de hablar de mi infancia y de la de Ana, así que podríamos decir que Lukas ya conoce mucho de infancia como para avergonzarme.

- Relajate hijo, solo quereros conocer a la chica.

- Gala, papá, ella se llama Gala.

- Brandon, lo sé, el cerebro todavía me funciona correctamente.- se burla de mi nerviosismo.

Bufo mientras repaso por cuarta vez en quince minutos que todo esté perfecto, ni cuando fui a hablar con su abuela y hermana me puse tan nervioso, y es porque las personas mayores y los niños se me dan bastante bien, he tratado con ellos toda mi vida.

- Sino la presentabas hoy, todas las preguntas iban a ser hechas en la boda de Eleanor y eso no puede ser.

- No me recuerdes la boda ahora.- le reprocha mi hermano.- Todavía no me creo que tenga que compartir ser su padrino contigo.

- Soy su padre.- se queja mi padre.

- ¿Y? yo soy su hermano mayor.

- ¡Ya!

- Uy, nos gritó.- dice mi padre con el tono típico de mi hermana al enfadarse.

- Oh, ¡venga ya!- me quejo cuando el timbre de la casa suena.

- Y así te distraemos para que no nos marees, joder hijo te quiero pero es que no te estabas quieto, estabas peor que un garbanzo en la boca de un viejo.

- Aghh

Los dejo a los dos solos en la sala y voy a abrirle la puerta a Gala, insistí en ir a por ella pero prefirió que Gabi la trajese a mi casa.

Veo el hermoso vestido que se ha puesto, le doy un pequeño beso en los labios a modo de saludo y luego me despido de Gabi, esa chica va a acabar creando un club de fans con nuestra relación, aunque todavía me preocupa el dolor que siente Gala por su padre, creo que ella debería viajar a Londres y hablar con él, no por su padre sino por ella.

Agarrados de la mano entramos a mi casa, y avanzamos hasta la sala de estar donde dos hombres muy sonrientes, de metro ochenta nos observan, dan miedo no vamos a mentir, los dos sonriendo así dan miedo.

- Dejen de hacer eso.- les pido en voz baja.- Dan miedo.

- Aish, le quitas la diversión a la vida.- me regaña mi padre.- Encantado soy Ernesto O' Connor, el padre de este chico.

- Encantado señor O' Connor.

- Nada de señor, ese es mi padre.- se queja mientras le sonríe de forma amable, sin dar miedo esta vez.

- Encantada.- noto como va relajándose.

- Yo soy Lukas Hoffman.- vuelve a ser tan serio como siempre, ya me extrañaba a mi que sonriese tanto, simplemente a mi hermano no e gusta sonreír sino eres Eleanor, entonces sonríe siempre.

- ¿Hoffman?

- Si, utilizo el apellido de soltera de mi madre.- ella asiente en comprensión.

- Tengo hambre, ¿pasamos a la cocina?- todos asentimos.

Mi padre como es normal se siente en la punta, mi hermano a su derecha como solía hacerlo mi madre, yo a su izquierda como siempre he hecho y Gala a mi lado, donde las pocas veces que Eleanor comía con nosotros se sentaba.

- Gala.- la nombrada mira a mi padre.- ¿Qué estudias?

- Servicios sociales.- mi padre asiente.

Traen la comida antes de que alguno de ellos le haga alguna pregunta más a Gala, algo que no sé si agradecer o no.

- Tienes un acento peculiar.- le dice mi hermano.

- Tu también.- le responde de vuelta.- Europeo.

- Alemán.

- Ya decía yo.

- ¿Qué insinuás pequeña?

- Nada.- le sonríe.- Yo soy de Reino Unido

- Británica.- entre cierra los ojos.

- Si, ¿algún problema?

- Ninguno, ¿tu tienes algún problema con que sea alemán?

- Ninguno.

- Perfecto.

- Perfecto.- le replica Gala

La cena pasa tranquila, mi padre casi la caga preguntando por los padres de Gala pero ella sale rápido de ese asunto y no contesta, ella tiene todavía la espina clavada y yo tendría que haber sido más previsor y avisar de que no preguntasen por los padres de mi café explosivo.

Mi padre le cuenta algunas anécdotas de cuando Ana y yo éramos pequeños, como la vez que nos pusimos de acuerdo para que mi abuela nos comprase caramelos cuando mi madre nos lo había prohibido, él se enteró y fue quien nos los compró al final. Yo no recordaba eso pero ha sido bonito saberlo.

- Llevad cuidado.- dice mi padre cuando salimos de la casa, tengo que llevar Gala a su residencia.

- Tu familia es muy agradable aunque tu hermano es muy serio.

- Siempre es así, al menos hasta que se trata de su madre, Eleanor o Andrómeda.

- ¿Son muy importantes?

- No conocí personalmente a la madre de mis hermanos, pero ambos la aman con locura, algo que yo no puedo decir de la desquiciada de mi madre, que resulta ser la medio hermana mayor de la madre de mis hermanos.

- Es decir, sois primos y hermanos.

- Se podría decir así.- me encojo de hombros.- Ya hemos llegado.

- Tu familia es fantástica.- me da un beso en los labios antes de bajarse.

La veo como entra en el edificio y luego me voy de vuelta a mi casa, ha estado bien, más que bien y eso me deja más tranquila, por un momento creí que el enfrentamiento de nacionalidades acabaría mal, por suerte no fue así.




Reportar




Uso de Cookies
Con el fin de proporcionar una mejor experiencia de usuario, recopilamos y utilizamos cookies. Si continúa navegando por nuestro sitio web, acepta la recopilación y el uso de cookies.