Cuando te ví sonreí... Y tú?... Y tú sonreiste, y creí a ver visto un ángel. Era la primera vez que nos vimos, pero sentí la química entre los dos, ese instante definió todo para mí.
Y tú? Tú solo eras tú dejándote llevar por el momento. Sonreías de mis tonterías mientras te contaba todos esos malos chistes, te volviste mi cómplice y nos escapamos un par de veces por semana de la escuela...
Luego cantábamos juntos en la azotea... Lo recuerdas?, Yo siempre canté hermoso, pero tú... Me maravillaste con tú voz. Y a veces sentía envidia de ella. Más cuando te escuché cantando para el imbécil de Diego, solo fue una vez, y fueron las mañanitas... querías darle una sorpresa en la mañana, pero después de ese día, apesar de todo, de alguna forma lograste que él y yo fuéramos amigos.
Nos peleamos de vez en cuando y tú solo sonreías, suspirabas e ibas dispuesto a separarnos. Eso creíamos; terminabas por irte y nosotros corríamos detrás de ti...
Sí lo sé, siempre hemos sido muy infantiles.
Pero como no serlo?; No tenías que gritarnos, solo alejarte y era suficiente para que Diego y yo, terminarámos haciendo las pases, de cosas no tan graves... Te observaba un poco cuando te enojabas por eso, una vez te sorprendí detras de la puerta riendo, !Sí! Aveces hacías ese tipo de travesuras...
Tus hermanitos han querido acaparar todo tú tiempo yo me puse celoso en tantas ocasiones, que por eso termine jugando con ese par, con tal de estar en tú depa y verte todos los días...
Luego empeze a irme a quedar a tú casa, después Diego terminó de encimoso en las vacaciones y se fue a vivir a tú casa y cambiándose de escuela por no sé que tantos pretextos...
No quería que él estuviera contigo...
No quería que él y tú fueran tan amigos...
Y no quería que tú y él llegarán a ser algo más...
Por eso me interpuse entre ustedes, tomé desiciones drásticas y sin lugar a dudas. Me confesé ese día en el parque; Recuerdas? !Sí! En nuestra banca, ese hermoso día te llevé a la banca maldita, ha ha así es como tú la llamas, desde que casi nos agarra la policía por comer esos polvitos que tanto te gustan, no lo puedo creer. Si me preguntas porque elegí esa banca, es porque ahí siempre terminamos platicando de todo lo que amamos y de otras tantas cosas que nos duelen.
Pero como te decía, verás ese día...
Salí corriendo el domingo desde muy temprano y le pedí a un amigo que me ayudara, sí, ya sé que no tengo muchos. Pero no es muy relevante, me acompañó a preparar la sorpresa y más que nada a guardar todo... Compré unos hermosos globos transparentes que emiten luces de colores.
Con ayuda de los guardias de policía y su permiso, pude colocar algunos focos de luz atrás de la banca, los globos los coloque en toda la orilla de la jardinera para adornar el camino y le pedí a mi amigo que soltara fuegos artificiales. Discretamente unos 15 minutos después de que llegáramos, todo tenía que estar perfecto, para que tú me dieras un si...
En la mañana tú me reclamaste porque no me viste como siempre para ir a jugar básquet y te molestas porque no te dije que no podría ir... Pero sabés todo valió la pena... Disculpa si tomo tú mano y la aprieto un poco, es que el recordar lo hermoso que fue me pone nostálgico...
Toda la tarde estuviste tan molesto conmigo y más porque Julio de enojó contigo. Porque no le diste un chocolate que él quería. Ya sabes. De los que guardas en la alacena para que él no se los coma rápido y se ponga todo acelerado, me reí un poco de la sitúacion, pues saliste corriendo en el pasillo con él y Julio se burló de ti...
!Temo y Ari se gustan y se agarran sus manitas y se dan besos en sus bocas!
Yo iba bajando las escaleras y te sorprendiste al verme y darte cuenta que escuché lo que decía, sonreí un poco nervioso y continúe mi camino; quise decirte algo pero me trabé... No sabes cuánto me costó no decirte, que era verdad. Digo, que si nos besariamos y nos haríamos novios. Me viste te ruborizaste y te metiste a tú casa. Te veías nervioso... Y hermoso cabe decir.
En la noche te envié el mensaje que cambiaría nuestras vidas para siempre... Y así fué...
Te pedí que me acompañarás al parque, me vestí tratándome de ver algo sexy.
Una vez encontré un catálogo de ropa en tú cuarto y ví que colocaste una carita mía sobré un modelo de la revista... Así que me compre ese atuendo, la verdad ya hacía como un mes que juntaba dinero para este fin... Pero tenía que asegurarme ha ha y por fin... pude enseñartelo... Era esa camisa azul con diseños azules oscuros y me abrí la camisa un poco como el modelo... y unos pantalones algo ajustados.
De verdad quería impresionarte...
Luego te esperé afuera de tú casa, ya sabes... Hasta terminé pidiéndole permiso a Pancho para que nos dejara salir tan tarde, me apoyaste y sucediósucedio...
Sé que antes de ese día tú no estabas seguro de lo que yo sentía y yo... tampoco. Tardé en darme cuenta pero no fue mucho tiempo...
Cuando llegamos al parque lo primero que te pregunte fue si seguías molesto conmigo, por no haber ido contigo en la mañana. Pero no te importo, es más parecidas asustado. Y más cuando viste a dónde te llevaba, casi lloras. Pero te tomé de la muñeca y no dejé que te fueras.
Es la primera ves que sentí que si té soltaba tal vez no volveríamos a ser los mismos de siempre, así que... Te pedí que me escucharás y que no tuvieras miedo...
Entonces... apesar de lo que dije empezaste a llorar. Y murmuraste que yo ya no quería ser tútu amigo. Te jalaste un poco de , pero como decía... Decidí no soltarte nunca más y apesar de que mi esfuerzo por hacer que todo fuera perfecto. El verte llorar me partió el corazón..., más cuando me dijiste, que seguro lo que quería decirte era... Que no nos volviéramos a ver o hablar, estabas temblando y tú voz se escuchó entre cortada, no pudimos llegar a la banca y ahí mismo te envolví entre mis brazos y te bese...