Al ritmo del humo.

Luisa hubiera declarado también pero lo haría en caso que fuera muy necesario, como vió que Jerry por fin estaba pagando entonces decidió que no se iba a meter.

Jeremy había sido quien planeó todo esto. Él odiaba a Jerry debido a que se le hacía un tipo bastante arrogante y sobre todo que muchas veces él se había metido con sus chicas. Jeremy convenció a Violeta del divorcio y demandar a Jerry por violento. Todo quedó bien, al final sus alcances sirvieron para dejar a Jerry tras las rejas y solo con ayuda de su Violeta y alguna de sus amantes prometiéndoles algunos beneficios económicos a cuenta de Jerry.

Luisa liberó una parte de su dolor, una parte que persiste a pesar que ya la había sanado. Ese día volvió a renacer y a dejar todo en el pasado excepto una cosa. Creía que Jerry tenía razón en pensar que nadie le haría caso siendo estéril. Más que nunca se cerró al amor en ese aspecto, eso también era motivo por el que últimamente tenía problemas con Logan. Él le dedicaba amor pero ella no era la misma, era fría y por más que él la amara, estaría dispuesto a luchar por ella, y tenía entendido que su ex estaba detrás de ella aunque no se había enterado aún que él ya no tendría otra oportunidad para estar con Luisa.

Nos adelantaremos a el futuro de Jerry. 

En la cárcel Jerry se encontraba en su celda, está vez estaba llorando debido a todo lo que le estaba pasando, lo hacía postrado en el suelo ya que limpiar su nombre ilegalmente no brindaba resultados. Un guardia ingresó y le dijo

-Te vienen a buscar.

-No quiero ver a nadie -El guardia no le tomó importancia y permitió que la chica lo viera. Era una mujer muy elegante y con una expresión siniestra.

Jerry en eso levantó la cabeza y se percató que quien lo había llegado a buscar fue la chica del restaurante, la que hace unos meses había humillado.

-¿Tú qué haces aquí? ¿Vienes a limpiar?-Dijo entre burlas.

-¿La vista se mira diferente estando abajo no?- Jerry decide pararse ya que él toda su vida miró desde arriba a las personas.

-¿Qué se te ofrece?

-Venía a visitar a algunas personas que me deben algo.

-Yo no te debo nada, hasta propina te dí, eres una malagradecida.

-No te hagas el listo, por tu culpa me despidieron, me humillaste aquel día, te importó poco mi necesidad. Tú eres el claro ejemplo de que si hay personas sin hacer nada malo, aún así se meten con ellas de la manera más estúpida.

-Te lo mereces, las gatas asquerosas como tú merecen ser tratadas de esa manera.

-Yo solo estaba haciendo mi trabajo-Karmen estaba agarrando las rejas y por tanta rabia logró separarlas un poco, haciendo uso de una fuerza y risa psicópata. Jerry se asustó y se alejó cada vez más de ella.

-¡Estás loca!, fuera de aquí, Guardias!!!-Gritó.

-No te van a escuchar, bueno.. no sin antes obtener algo a cambio de ti.

-¿Qué quieres?, no te puedo dar dinero, todo lo estoy empleando para poder salir de esta porquería de lugar.

-No vine a pedirte eso, mi objetivo no es sacarte dinero- De un segundo a otro puso un rostro serio.

-¿Entonces a qué viniste?

-A dejarte este pequeño y poderoso documento-Se saca de las bolsas de su saco un pequeño papel.

-No lo agarraré.

-Si no lo agarras diré que me ahorcaste.

-¿Quién te va a creer?

Karmen posicionó sus manos en su cuello, acto seguido empezó a apretarlo muy fuerte, y ella no parecía ahogarse, simplemente su piel se marcaba demasiado. Ella no era un ser como cualquier otro.

-Tienes mala fama, seré yo quien salga ganando, tú decides si deseas alargar tu condena por golpear a una indefensa y pobre mujer como lo soy yo, o si aceptas lo que te quiero dar.

-Que mierda, está bien, ¿qué es eso?

-Te venía a dejar tu factura-Extendió el papel hacia Jerry quien no estaba convencido en agarrarlo-Vamos, no te voy a morder-Responde Karmen, olfateando el miedo que hay dentro de él y sonriendo cada vez más ante eso.

Con mucho miedo Jerry agarró el papel muy rápido, Karmen le dió un susto pequeño el cual lo hizo gritar y Karmen al oírlo soltó una carcajada. Al tener ya entre sus manos el papel, lo vió pero no tenía total a pagar y tampoco tenía el artículo causante de generar dicha factura. 

-¿Para que me das basura? esto no tiene nada, sólo tiene tu maldita firma, ¿es esto una broma?-La tiró al suelo.

-No mi amor, no es ninguna broma, tú me pagarás lo que debes.

-¿Cómo? No estoy entendiendo nada.

Con susurros le dijo unas palabras, al terminar a Jerry le surgieron muchas dudas y quería seguir hablándole pero ella desaparecía cada vez más de ese lugar, con la mirada en alto, con la mirada que aterra a cualquier persona que tiene cola que le pisen.

-Vamos, ven acá, no te vayas. 

Karmen lo alcanzó a ver desde una puerta, le sonrió diciéndole.

-Te vendría a dejar el recibo pero supongo que para ese entonces ya no será importante, mira el lado positivo, ¡tenias razón!, no somos iguales -Segundos más tarde cerró la puerta.

Jerry se quedó solo otra vez, y unos policías lo llegaron a golpear ya que estándo en una cárcel obviamente no iba a recibir flores por cada una de las consecuencias de sus actos.

Karmen prendió un cigarro, la factura que le había dadó a Jerry desapareció al ritmo del humo, poco a poco, desvaneciendo algún rastro de dicho documento y dicha evidencia que alguna vez ella hubiera llegado a ese lugar. Las cámaras borraron el suceso de Karmen entrando, también haciéndo que el guardia que le permitió entrar no recordara nada, dejando está vez a Jerry como el loco de la historia. Tiempo después se dió a conocer que Jerry saldría de prisión dentro de muchísimo tiempo.