-Hola Skyler. -Fue un mensaje de texto que Rick me envió.
Algunas personas inician un problema con solo pensarlo. Otros lo dan con un simple e indefenso saludo, ojalá me lo hubiera advertido la Sky del futuro.
-Hola, ¿quién eres? -Contesté mientras que me invadía una sensación de nerviosismo.
-Soy Rick. -Ohh demonios. Ya me había asustado. Me calmé, aunque enseguida me preocupé ya que ahora tendría un nuevo medio por donde molestarme.
- ¿Quién te dio mi número?
-También fue un gusto para mi saludarte. -Me escribió con sarcasmo.
-Eso no fue lo que te pregunté.
-Pero fue lo que te respondí.
-Está bien, supongo que tus amigos fueron quienes te dieron mi número.
-Adivinaste.
Tal y como lo había pensado. -Quién más se lo pudo haber dado.
- ¿Cómo estás? -Me preguntó.
✔✔ Dejado en visto de mi parte.
Después de 1 hora continuó.
-Perdón si te ofendo. No es para que me dejes en visto. - Acompañó con una carita enojada tanto que sentía que su furia sobrepasaba el teléfono.
Si quiere hablar conmigo entonces que me ruegue. No creo que llegue al punto de seguir rogándome a pesar que lo deje en visto varias veces. Pensamiento erróneo.
Me volvió a hablar luego de otros minutos. Fue un error pensar que no estaba interesado en mí.
-Por favor, contéstame. -Ese mensaje sonó de la manera en que necesitaba. Quería que me rogara y lo conseguí, pero como soy una perra entonces lo haré sufrir las veces que se me antojen.
De pronto me vinieron las ganas por espiar el perfil de Adrián. Dejé a un lado a Rick y me centré en ver lo que tanto detestaba, y vaya que Adrián se mira muy angustiado por mí, tanto que subió varias fotos acompañado del amor de su vida.
Por un momento me imaginé a mí misma acompañada de él en las fotos, le daría todo mi amor, y aunque me cueste admitirlo debo de aceptar que me frustra demasiado pensar que no fui capaz de enamorarlo, lo suficiente como para que encima de la más bonita me escogiera a mí.
Más tarde Rick me volvió a hablar otra vez, no fue para mensajearme sino para llamarme, gracias al sonido me paré asustando porque estaba muy sumergida pensando a Adrián, no sabía lo que estaba haciendo por lo que le contesté sin pensar una vez en lo que estaba haciendo.
-Skyler, ¿estás ahí?
-Si…
-Y aun así no contestas mis mensajes. -Alzó su tono de voz.
-Disculpa, tengo muchas cosas que hacer, no tengo tanto tiempo para…
-Te estás haciendo la difícil. -Reclamó.
-Oye, no te permito que digas eso de mí. Además, no eres alguien tan importante como para que te conteste al segundo. Bye!
*Enseguida colgué porque me agarró en un mal momento y como consecuencia estallé con una cosa tan mínima. A la vez sentía tanta vergüenza porque no estaba manejando bien mis emociones últimamente así que me digné a cambiar el horario de gimnasio ya que necesitaba distraerme con algo.
Cuando tu autoestima sube y baja radicalmente y se está así por mucho tiempo, empieza a tratar ese asunto.
Al pensar en Adrián mi autoestima bajaba, pero si estaba cerca de alguno que otro chico y este me hacía sentir la más linda, ya sentía que era la última coca cola en el desierto. En vez de alimentar mi autoestima, alimentaba mi ego, pero era tan cobarde como para aceptarlo.
Llegó el día en que me animé ir al gimnasio después de tanto tiempo, me acostumbré a que ya no vería más a Adrián y fue cuando más me animé a ir todos los días sin parar como antes.
Un día mientras me dirigía al gimnasio siento constantemente que me vienen siguiendo, cada que escucho unos pasos detrás de mí, o hago alguna que otra cosa y siento la presencia de alguien, se siente Incómodo ya que he sentido a veces que no puedo hacer algunas cosas como quitarme la ropa en algún sitio privado del gimnasio como antes, o estar en algún lugar sola, siento como si la mirada de alguien me tocara, y tengo miedo de que sea un pervertido. Siento a un acosador detrás de mí, pero no lo puedo ver.
Hoy como de costumbre me sentía un poquito ansiosa, así que me arreglé para ir, aunque sea algunos minutos, yo daría la clase por la instructora de baile, quien me pidió favor de hacerla ya que ella había asistido a un acto de su hijo en la escuela.
Y acepté con gusto ya que me sabía la coreografía que ella daría hoy, y también he mejorado en cuanto al baile. Decidí ir en pantaloneta (no muy corta), unos tenis bastante lindos, y un crop top, dejando al descubierto mi abdomen, copiando un poquito el estilo a mi maestra de danza, le comenté eso y ella no se mostró enojada, al contrario, le pareció una buena idea.
Yo no pienso que haya ido muy provocativa pero las miradas de todos me dieron a entender muchas cosas, no pensé que alguien me fuera a decir que estaba muy bien, no esperé buenos comentarios, simplemente esperaba verme así para mí. los ignoro ya que algunos me miran mal y otros no pueden ocultar su mirada detallada hacia mí.
Les comento la situación a todos los de la clase de danza y procedo a colocar la música, intento hacer primero el baile completo para que se vayan familiarizando con los pasos.
Suena "I need to know, Doja cat" y cuando empiezo a bailar me meto en mi papel de stripper. Me miro en el espejo y veo mis pasos, he mejorado, comienza el ritmo, sin duda lo hago mejor que otras veces, siento la pasión por el baile en mi cuerpo, los demás desaparecen de mi vista, o bueno, mi vista simula que ellos no están ahí me miro solo a mí, estoy nerviosa, pero a la vez me siento atraída por mí, y no es narcisismo.
La música termina, y todos se quedan en shock, cuando hago la señal que ya terminé, reaccionan y me aplauden.
Les había encantado el baile de Sky, no era baile erótico, pero sin duda se había robado muchas miradas, incluso de las personas que estaban haciendo otro ejercicio, lo había hecho tan bien que por un momento el mundo giró alrededor de ella, todos viéndola mientras se mira que siente el ritmo de la música.