Capítulo 15 Que misión la tuya de investigar a la gente..

Leon :

Me despido de Dária frente a su casa y me marcho a la mía.  Aunque solo han pasado unos minutos ya la extraño, es difícil no echarla de menos, por dios estoy enamorado, ¿quién lo iba a decir?, esta vez si que lo estoy. Nunca había sentido algo tan fuerte por alguien y esta vez voy a luchar con todo para estar a su lado.

—¡ no puede ser !.

—ja, ja, ja te gané otra vez.

Escucho al entrar a casa la voz de Alonso y Juan.

—Ya veo que no tengo que presentarlos —ambos me miran al mismo tiempo con los controles de un juego en las manos.

—Me quedé en casa esperando a que llegaras, literal me morí esperando hasta que vine a ver qué te pasaba y valga tu hermano para no morir esperándote también aquí. —me dice Juan con tono de reproche desde el sofá junto a mi hermano, este último me dice con una risita —a que tu demora tuvo que ver con pelos morados 

—No le digas así —reclamo lo mas serio que puedo pero mi felicidad no aguanta y estallo en una sonrisa —vale sí, estaba con ella.

Entonces pregunta Juan —¿y?.

—Volvimos y estamos mejor que nunca, por dios estoy feliz. Fuimos a un lugar especial y nos declaramos en voz alta para que no hubiera nada por decir. Fue genial todo de verdad.

Mi hermano pone los ojos en blanco y hace una mueca —madre mía ya empezó con las cursilerías de enamorado, me voy o voy a vomitar arco iris y corazones dorados. —se levanta y empieza a caminar con pasos estilo zombie pero se voltea de un solo golpe y le dice a Juan —oye, pronto quiero la revancha y esta vez te ganaré. 

A lo que Juan  responde riendo mientras se acomoda las gafas al estilo frike. —eso lo veremos.

cuando por fin se marcha a su cuarto le digo a mi amigo tomando su lugar en el sofá. —tú lo vez ahí riendo, en realidad está muy triste, hace poco le rompieron el corazón, literal.

—Pobre lo malo que es eso. —Juan se queda unos segundos en silencio y reacciona de inmediato —¿por fin para qué me querías ver?

—Te cuento la idea, quiero tener un detalle con Dária, algo que la sorprenda y no lo olvide jamás. Algo que haga que todos en la escuela sepan que la amo y sobre todo que sea algo moderno.

Él se pone la mano derecha en la mandíbula como si estuviera pensando y al final me dice —ya te voy entendiendo y creeme tengo varias ideas que la van a sorprender.

—Sabía que me ibas a ayudar.

—Que conste esto lo estoy haciendo para que ganen el premio a la mejor pareja del año y con esta idea que tengo creeme van a ganar.

El premio no me importa, esa es la verdad pero no quiero desilusionar a mi amigo, en realidad solo quiero demostrarle todo mi amor a Dária de una forma que nunca lo olvide y quiero dejar claro en la escuela de una vez por todas que ella no está sola y que ahora tiene alguien que la defienda.

Daria :

Hoy tuve la impresión otra vez de que me estaban observando, a lo mejor eran los guardias que mi madre contrató hace un tiempo pero esta vez fue distinto. Tuve un mal presentimiento cuando llegué con León a mi casa, al despedirnos sentí eso, una mirada puesta en mí pero no vi nada. Igual eso no me va a amargar el día porque estoy muy feliz, por fin regresé con León y estoy que no aguanto las ganas de contarle a alguien.

Estoy en mi habitación y empiezo a escribirle a Lusiana por el ordenador.

Yo —hola  luuu .

Ella —hola —me responde ella de inmediato y me quedo unos segundos esperando a que haga la pregunta que tanto deseo hasta que la hace.

Ella —¿Cómo estas?. 

Yo —muy, muy feliz, estoy que estallo.

Ella —¿y eso por qué?.

Yo —te conté que llegó un chico nuevo a clases, al principio no nos llevábamos muy bien que digamos pero luego si, y ahora estamos saliendo, somos novios. —a los dos segundos manda tres stikers con caras felices y corazones brotando de flores.

Ella —me alegro por ti, te lo mereces, esto y mucho mas.

Yo —¿ya era hora no?, ya necesitaba unas vacaciones fuera del mundo de tristeza y melancolía jajaja.

Ella —si mucho tardaste.

Yo —¿y tú qué me cuentas?.

En ese momento llega luisma, estaba debajo de mi cama y se sube a mis piernas agitando la cola. Empiezo a jugar con él hasta que Lusiana responde.

Ella —en mí, todo bien como siempre.

Ese es uno de los aspectos que me molestan de Lusiana nunca le ocurre nada interesante y si le sucede no me lo cuenta, para ella siempre todo esta igual y eso es extraño, creo.

Ella —¿sabes?,puede que en un mes o dos te haga la visita y por fin me veas en persona.

Ese es otro punto clave, puede que crean que estoy loca por confiar en alguien que nunca me ha mostrado fotos suyas pero qué más da, yo tampoco le he mostrado a ella y no tengo nada que perder, no es un pervertido ni nada porque nunca me ha pedido fotos íntimas ni dirección particular, ella solo sabe el lugar donde vivo pero no mi dirección exacta y siempre me ha dicho que es mejor mantener el anonimato para no crear una imagen errónea de las otras personas y de esa forma conocernos de verdad. Aunque la verdad no entiendo muy bien su concepto lo acepto.

Yo —whao, ¿de verdad?.

Ella —si, ya lo hablé con mis padres y me van a dejar ir. 

Yo —al fin te conoceré en persona no puedo creerlo.

Ella —ni yo, ni yo.
Después de despedirnos me doy una ducha  y salgo a la hora de cenar. Al bajar veo a mi mamá que ya esta sentada en la mesa y hago lo mismo, me siento sin decir una palabra y ella se me queda viendo.

—¿Qué? —le pregunto.

—Qué, te digo yo a ti, ¿y esa cara?.

Tomo mi celular, me miro en la cámara y al ver que todo está bien en mí le pregunto.

—¿Qué tengo?.

—Esa cara de felicidad. —por un momento lo había olvidado, mi madre, los guardias, estoy segura que me siguieron cuando salimos de clases.