El origen: Primera Parte...

GENESIS.
 

Desde que nací hasta mis cinco años en lo único que pensaba era en que tenia todo lo que podría desear.

Tenia unos padres que me amaban, unos tíos que me querían muchísimos y los mejores abuelos del mundo.

Mi vida era como un sueño hecho realidad, pero al cumplir seis años mi sueño se volvió pesadilla.

Ella nació y mi vida se arruino.

De un día para el otro ya no era el centro de atención, mis padres no me demostraban como antes su amor, ya no me daban mi beso de buenas noches, ya no me miraban.

Deje de ser la favorita de mis tíos, ahora los regalos eran para la bebe, los juegos eran para la bebe, todo era para ella.

Mis abuelos venían a la casa y enseguida iban a ver a la bebe, los llamaba para que me vieran y solo me hacían callarme y alejarme de ellos.

Pasaba mañana, tardes, noches sola, completamente sola.

Ya no tenia amor, ni atención, ni nada.

Mi familia, era una familia de héroes.

Todos eran héroes que combatían a los villanos y acababan con el mal, siempre salvaban a la ciudad.

Mi hermana y yo éramos futuras heroínas.

Cuando cumplí siete años, me enceguecí por el odio que le tenia a mi familia.

Los odia por dejarme de lado cuando solo era una niña.

Estaba tan enojada que no medí las consecuencias de mis acciones.

Una noche mientras mis papas dormían conecte la plancha que mi mama usaba siempre en el pelo la cual decía que no toque porque se calentaba y podía quemarme.

Me acerque a la cuna de mi hermana menor y con la plancha en mi mano, agarre su manito y apoye la plancha en ella.

Empezó a llorar como loca y me aleje de ella.

Mis padres se despertaron por el llanto y al verme se dieron cuenta de lo que había pasado.

Esa noche me dijeron de todo por lo que había dicho, lo que decidieron era que no podían cuidar de mi hermana y de mi al mismo tiempo.

Me abandonaron en un orfanato.

Decían que era un peligro para su hija y que no querían que estuviera cerca de ella.

Los odie tanto por eso... los odio tanto.

En lo único que podía pensar desde ese día era en vengarme de ellos.

Los iba hacer pagar.

Mi familia eran héroes, pues yo seria su villana.

Pero no como los demás, yo iba a ser buena, iba a ser la mejor villana de la historia.

(...)

A mis ochos años me cambiaron de colegio los encargados del orfanato.

Era la nueva, la rara de la clase.

En este tiempo no sabia controlar mis poderes y las personas se aprovechaban de ello.

No hay nada peor que ir a una escuela donde nadie es huérfano y mucho menos que tengan poderes.

Me empujan haciendo que caiga de cara al suelo.

Me golpeo la barbilla con el piso y siento como me empieza a arder, pero no lloro.

- Si que debiste ser una mala hija para que tus padres siendo héroes te dieran en adopción. -Empieza a hablar uno de ellos.

- Tal vez la abandonaron por inútil, ni siquiera sabe usar sus poderes, terminaron desperdiciados por una inútil como ella. 

- Hasta su hermana con solo dos años ya los usa a la perfección.

Escuchar el nombre de mi hermana me enfureció y mas aun que me compararan con ella.

Mi cuerpo temblaba de la rabia.

El cielo empezó a nublarse y sentí como mis ojos se oscurecían a un gris mas intenso.

Un rayo cayo del cielo golpeando a los niños que estaban detrás mío riéndose de mi.

Los gritos de la maestra no se hicieron esperar al verlos a todos en el suelo inconsciente.

Como yo estaba perfecta no duraron un segundo en que eso había sido mi culpa.

Ni siquiera se pusieron a pensar porque había hecho eso.

Para todos yo era la mala, no importaba si hubiera empezado yo o no, para ellos siempre iba a ser mi culpa.

Si querían que fuera mala lo iba a ser, de eso yo no tenia ninguna duda.