- La chica del metro -

-Curiosa manera de conocer cuál es tu nombre-le digo para romper el silencio.

-Ah? Sjsjs-se ríe avergonzado.

  Después de salir de coordinación, nos fuimos por el pasillo sin decir una palabra. Yo, porque no lo quería incomodar con lo que había pasado, aunque quería saber por qué lo citaron, y él, supongo que por lo incomodo que estaba. Ese pequeño gesto de impresión que se formó en su rostro cuando me vió en el metro no abandonaba su rostro. 

Nos sentamos en la banca en la que habíamos quedado antes para hablar y estaba súper nerviosa por lo que se pudiera decir después y por la razón de que Sabiel estaba súper interesado.

-Sabiel Gener-hago énfasis en el apellido a ver que decía.

-Bueno lo mismo digo del tuyo, estábamos tan apurados en el metro que no nos dijimos nuestros nombres señorita Shannon Garbade…

-Ah ya, también sabes el mío, dime Shannon-le hablo esta vez como una persona normal sin el prejuicio de mujer de 30-¿y que querías hablar?

-¡Ah sí!, bueno, primero te quiero agradecer y también pedirte una disculpa enorme, por la situación que te hice pasar, de esperarme y ponerte a resolver mis problemas a base de mentiras, de verdad disculpa. Es que, es una historia muy larga muy muy larga, pero para no entrar en detalles, si entré a la materia, súper tarde. Pero me tuve que salir para ir a mi casa porque no podía concentrarme, tenía tu rostro rondándome en la mente, y lo que hablamos, necesitaba respuestas. Así que fui a mi casa, a buscar algo que es lo que va a hacer que todo se aclare y por eso te llamé, después de buscar eso me regresé a la secundaria a ver la materia siguiente, pero mis compañeros le habían sapeado a la directora que me fui y me citaron a coordinación.

-No te preocupes, ya todo pasó-le respondo.

-No, si me preocupo, no es posible que apenas te conozco y esa es la impresión que te doy y te hago pasar por estas cosas, de verdad perdón, que vergüenza-Se veía muy desesperado por disculparse. Hace una pausa y ve al suelo-Pero no tenía opción cuando llegué a la secundaria fue que te llamé y justo después me citaron obligatoriamente o sino iban a llamar a mi papá y de verdad ya tengo suficientes problemas con él como para darle más problemas. Cuando entré a coordinación, después de darme dos horas de regaño, la directora me dijo que tenía llamar a mis papá igualmente. Prácticamente me engañó porque entré a coordinación para que no lo llamara e igual lo iba a llamar. Le pregunté si podría llamar a un representante si mis papá no podía y dijo que si, busqué en mis contactos y no tenía a nadie que me pudiera guardar el secreto y no contarles a mi papá, y luego te ví a ti en los contactos y por muy loca que era la idea, me arriesgué... Y creo que me arriesgué con la persona indicada.

-Tranquilo ya te dije que no hay problema, lo bueno fue que tuve la posibilidad de ayudarte y no te quedaste estancado allí. Pero ¿Por qué no quieres decirle a tu papá? Si no sueno muy intrépida preguntando.

-No, no, descuida. Es que esta no es la primera vez que citan a mi papá, con esta sería la tercera, bueno, la tercera en que viene alguien, porque si cuento todas son como unas 8 o 9. Entonces ya no quiero estar aguantando los regaños de mi papá, ni hacerlo pasar vergüenzas de venir a cada rato, con lo que ya está pasando es suficiente…

-Entiendo y ¿cómo me guardaste en tus contactos?-pregunté para liberar tensión.

-Bueno, ve tu misma-me muestra el teléfono.

-¿Chica del metro?-leí en el teléfono-¿Cuántos años crees que tengo?

-No lo sé ¿23?

-Nooo sjajajjs, tengo 33-le respondo riendo.

-¿33? no parece sjsjs, te ves más joven…

-Vale, vale, me lo dicen mucho oye pero ahora sí, de lo que íbamos a hablar.

-Ah sí, sí, bueno, sé que va a sonar raro, pero a pesar de que nos conocemos de esta mañana, yo ya te conocía o eso creo, no sé si se le pueda decir conocer. Por eso me sorprendió al verte, si lo notaste. Y me acerqué a ti para presentarnos, aunque hubiese sido inútil, ya que solo tu nombre no me servía ni me habría sacado de dudas, ya que sé que te llamas Shannon y aun no entiendo nada.

-Aja, ¿pero cómo es eso de que me conocías?, se mas específico.

Mete la mano en su bolso y saca su teléfono.

-Esto es por lo que me devolví a la casa y lo que te quería mostrar...