El hombre de ojos rasgados

Capítulo 2

Uno de los países en cual habría una larga estadía sería Corea del Sur, al principio no estaba tan convencida, pero Elena la ayudó a decidirse, esta era una oportunidad que no podía desperdiciar. Carolina estaba emocionada, sería una gran oportunidad para despejar su mente, aunque sea por trabajo. Ella prefería ir a ese viaje a quedarse y seguir recordando a Alexander.

Así podría olvidar todos los momentos malos vividos y sentirse mejor consigo misma.

Ya lista partió al aeropuerto junto a su amiga Elena

-Es lo mejor, puedo hacerlo- dijo Carolina muy segura de si -te extrañaré mucho amiga mía- dijo Elena acompañándola a tomar el avión -Tranquila, prometo que siempre estaremos en comunicación- dicho esto Carolina abrazó muy fuerte a Elena para después subir al avión, dejar todo lo malo atrás y comenzar de nuevo….

En el avión...✈

 -Estoy bien, puedo estar bien- se dijo a sí misma, dándose alientos.

-Excuse me miss- dijo una voz masculina interrumpiendo sus pensamientos. Carolina levantó la vista encontrándose con un hombre de ojos rasgados. Este comenzó hablar en su idioma tratando de formular bien la siguiente frase en inglés. Carolina entendía este idioma, era muy inteligente y pudo aprenderlo ya que para su trabajo requería saber muchos idiomas.

-Puedo hablar tu idioma- dijo amablemente, sorprendiendo al de ojos rasgados -ese es mi asiento- agrego con nerviosismo😅

-¿Perdón?...- Carolina respondió confundida -El asiento en el que usted esta, es mío- señalo.

Carolina se sorprendió por el comentario, sin embargo, aseguraba que ese era su asiento -Imposible, vi bien mi boleto-

-miré- dijo para mostrarle  su boleto

-No puede ser, eso debe ser un error le mostraré mi boleto- dijo buscando su boleto.

-¿entonces, Me equivoqué?- pregunto este sonriendo

 Para sorpresa de Carolina, aquella persona estaba en lo cierto “me confundí que tonta” dijo en voz baja. El asiento de Carolina era al costado de este asiento.

 -¿puedo pasar?- pidió amablemente

 -Si esta bien- Carolina se levantó del asiento y se sentó en el que le correspondía “que vergüenza y todo por estar despistada” ese era su pensamiento.

Minutos después...

Todo marchaba bien, aquel hombre leía una revista para entretenerse cuando sintió un leve golpe en su hombro y al ver de qué se trataba, era Carolina quien dormía pero mantenía una expresión triste. Derramó una que otra lágrima mientras  sostenía su teléfono.

-estimados pasajeros les pedimos que aguarden en sus asientos que comenzaremos con el aterrizaje- anuncio el capitán.

Al aterrizar y salir del avión Carolina se encontraba contenta, era un nuevo lugar lejos de todos los recuerdos.

 -Por fin llegué- el destino de Carolina era Corea del Sur, sus otros compañeros fueron enviados a distintos países asiáticos. Ella tomó un taxi 🚕 para así llegar a su pequeño departamento temporal. Cansada por el agotador viaje de casi 24 horas se dispuso a dormir.

Al día siguiente se levantó con mucho ánimo, este día comenzaría con su trabajo en Corea. Caminar por aquellas calles de la capital, hacía que Carolina se emocionara aún más. Llegó a un edificio en el cual se desenvolvería.

Sin embargo a pesar de que ocuparía un cargo alto ella tendría que recibir órdenes de su superior. Todos los empleados daban la bienvenida a Carolina, curiosos ya que era la primera vez que tendrían que trabajar junto a una latina. Fue guiada hasta la oficina del Presidente de la empresa. Grande fue su sorpresa al darse cuenta de quién era.

-Buenos días- dijo para dar una leve reverencia.

-qué coincidencia- comentó

-¿Me conoce de algún lugar?- pregunto confundida por el comentario.

-Soy el chico del avión ✈ ¿no te acuerdas? -

-Es verdad, que casualidad trabajas ¿aquí? -

-Si…- respondió sin embargo fue interrumpido por uno de sus empleados.

-Ceo Soo Woon, ella es la nueva ejecutiva Carolina-

Carolina al escuchar de que este chico era el Ceo quedo asombrada ya que ella le estaba hablando informalmente a su ¡jefe!

-Gracias Yung puedes retirarte- comentó este.

-Así que tu eres la representante de Latinoamérica- añadió con una sonrisa.

Carolina sentía un poco de pena por la manera en la que se refirió con su ahora jefe.

-Mi nombre es Kang Soo Won y soy el Ceo de esta empresa, mucho gusto en conocerla señorita Carolina- dijo para estrechar la mano.

Con cierta timidez Carolina levanto su mano y la estrecho con la de Soo Woon.

“Qué vergüenza” ese era el pensamiento de Carolina en ese momento.