Aquí te espero certeza mía
y de todos lo corazones,
antes temía, pero hoy tu adversaria
me ha dado muchos sinsabores.
Dicen que es ella la que nos calma
y en donde reina la alegría,
pero eso es falso, pues yo la observo
y simplemente la veo vacía.
Solía aferrarme al igual que todos
a ese engaño que llaman vida,
soñando con poder de algún modo
atarla por siempre a esta alma perdida.
Más ahora veo su cruel engaño
ese que todos negar querían
ella es tristeza, dolor profundo,
y tú en cambio eres la salida.
Aquí te espero mirando el tiempo
que pasa y pasa dejando heridas
no veo la hora de que me encuentres
y realizar por fin la partida.