No se cuanto paso, sin embargo cada cierto tiempo nos alteraban, según lo que oiamos, éramos alguna clase de prueba, era mi turno, lo sabia cuando escuche el sonido del seguro abrirse...
-andando-dijo mirándome fijamente y fue hasta entonces que vi sus ojos, eran cafés, pero el contorno no era blanco, sino rojo, como si estuvieran sangrando, esta vez solo llevaba una playera sin mangas, y pude observar qué en su cuello se veían una especie de heridas, eran dos, dos líneas, sus brazos tenían una hilera de ¿espinas?-apresurate qué no tengo todo el día-dijo y avance.
Ingresamos a una habitación con camilla, había una asistente, quien me ato a ella...
-No te muevas-dijo Matt- no dolerá... Mucho y rio.
Sacaron de un contenedor una aguja, y la acercaron a mi brazo inmovilizado, pude notar como entraba a mi sistema una especie de líquido azul, de pronto mi sangre se empezó a sentir caliente, y de un momento a otro, esta sensación desapareció, siendo reemplazada por un cansancio qué no había sentido jamás...
Mientras caminaba de regreso, Matt iba dando indicaciones, y pude notar más de él, era muy atractivo, y demasiado varonil, me ingreso a una habitación diferente, la cual al deslizar la puerta se encendieron unas luces, pero lo único que cambiaba a la otra, era que tenía una mesa con juegos, no tenía ánimos de nada, así que solo me senté en el pequeño puente qué estaba...
-cualquier cambio o síntoma, debes informarlo, siempre hay alguien oyendo- dijo con una pequeña sonrisa y de la nada acarició mi mejilla.
Salió de la habitación dejándome con mis pensamientos, pues ese mínimo roce me había traído una sensación agradable, sin embargo era quien nos mantenía encerrados haciendo no se que con nuestros cuerpos...
De la nada desperté sintiendo mi cuerpo helado, al revisarme me di cuenta que estaba empapada en sudor, la piel de mis manos empezó a desprenderse y con ella mis uñas...
-Ayuda!!!-grite, pero nadie venía,-ayuda!!! Por favor-insistí - y entro Matt
-preparen el traslado!!!
Fue todo lo que escuche, cuando me sentí en la camilla iban a una velocidad qué asustaba, de un momento a otro, me trasladaban en una especie de nave ¿qué me habían hecho? Me preguntaba.
Mi cuerpo empezó a temblar y con el sentí los brazos de Matt, quien acarició mi cabello mientras decía - Perdón bonita, no sabía que serias tu...- decía mientras dejaba un tierno beso en mis labios.
No podía pronunciar palabra, pero sabía que no era normal, me dejaron en esta habitación, la cual esta rodeada de vidrios, pero se que desde el otro lado me observan, se que ya no soy la misma, mi piel se regenero, pero ahora se siente más áspera, ah pasado mucho tiempo desde que me encerraron y solo eh cedido ante todas sus peticiones, entrenamientos y pruebas, con el único fin de lograr salir y explotar todo esto que sé que tengo guardado, no se con que fin lo hicieron, pero dejaron claro que no sabían que era yo...