Tome a Theo en brazos lo desvestí dejándolo solo en ropa interior y lo lleve al baño. Lo coloque con cuidado en la bañera y abrí las canillas para entibiar el agua.
-¿Qué pasa?
-Theo, bebé, tranquilo. Estás con fiebre.
Él apenas mantenía los ojos abiertos y su frente estaba hirviendo. Cuando el agua le llegó a la cintura cerré las dos canillas, tome una toalla y la humedecí colocándola en su frente. Tenía que llevarlo al hospital, yo no era buena en estás situaciones y no quería llamar a mi madre, pero la desesperación se estaba apoderando de mi. Sentí mis ojos comenzar a sacar lágrimas antes de lograr detenerlas y me repetía una y otra vez que debía calmarme.
-¡Carter! ¡Él puede ayudarnos!
En ese momento era lo mejor que se me podía ocurrir para ayudar a Theo. Debía llevarlo al hospital, tenía que verlo un médico. Corrí hacia la cocina con Theo en brazos y tome el celular que lo había dejado sobre la mesada. Marque el número de Carter y sonó tres veces antes de que él me atendiera.
-¿Hola? Peyton ¿Eres tu?
-¡Carter!
-Oh, si eres tu. Debo reconocer que me sorprende que me llamaras tan pronto, pero no me disgusta…
-¡Carter! ¡Por favor necesito tu ayuda!
-¡Peyton! ¿Qué sucede?
-¡Necesito que vengas a mi casa es por Theo!
-¿La ventana de tu cuarto está abierta?
-Si. ¿Por qué?
-Espérame ahí, ya voy.
La llamada se cortó. Pude sentir la tención en la voz de Carter cuando escucho mi desesperación, pero es que no podía controlarme. Sentí un ruido en mi habitación y segundos después la puerta de mi cuarto se abrió y Carter apareció corriendo hacia nosotros.
-¿Cómo?
-Entre por tu ventana.
-¿Saltaste?
-Si.
-¿¡Saltaste de tu balcón al mío!?
-Si, tranquila. Después de todo, solo estamos a un callejón de distancia.
Theo se removió contra mi pecho y mojo aún más mi ropa, lo había envuelto en una toalla, pero no lo había secado.
-¿Qué le pasa?
La mirada de Carter era salvaje y desesperada tratando de ponerse al corriente de la situación.
-¡No losé! Fui a su habitación porque se la paso todo el día durmiendo y vi su cara demasiado roja así que lo tantee, estaba volando en fiebre y aún lo está. Necesito llevarlo al hospital y no quería molestar a mi madre, se fue hace 15 minutos a su cita con Marcus.
-Bien, Peyton. Toma un bolso con ropa seca para ti y el pequeño, baja con él y espérenme abajo.
Carter volvió a mi habitación dejando la puerta abierta, vi como saltaba desde mi balcón hasta el suyo. Fui al cuarto de Theo y tome una mochila con ropa suya y metí sus documentos dentro y corrí hacia la salida. Afortunadamente el ascensor estaba vacío y en minutos estábamos fuera del edificio esperando por Carter.
Un auto negro estacionó frente a nosotros. Del Camaro bajo Carter y me indico que entrara al auto.
-¿No sería más rápido ir en la moto?
-No pienso llevarte a ti y al niño en esa trampa mortal. Es mejor ir en el auto y de paso sale un poco, hace mucho lo huso.
No discutí con él, ni siquiera sabía que tenía un auto, pero era cierto que era mejor transporte que la moto.
-Tranquila, estaremos en el hospital en menos de 20 minutos.
Fiel a su palabra en tiempo record estábamos entrando por las puertas de emergencia al hospital. Descubrí que Carter era un excelente conductor en auto también.
Él fue abriendo paso entre la gente hasta que llegamos a la recepcionista del área de emergencias.
-¡Señorita, el niño necesita atención medica urgente!
-¡Joven! Coloque al niño en la camilla.
Una doctora de mediana edad y melena dorada fue quien nos facilito una camilla.
-Lo llevaré para revisarlo ¿Hace cuanto está así?
-No losé, hoy estuvo todo el día durmiendo y hace un rato descubrí su fiebre, no ha despertado desde que salimos de casa.
-Muy bien, iré a revisarlo mientras usted complete el formulario.
Observe como ella se llevaba a Theo y le daba indicaciones a una enfermera para que la acompañara. Cuando me voltee vi a Carter sonriéndome para decirme que todo estaría bien, entonces, el miedo regreso de nuevo, pero con más fuerza. Carter estaba a punto de descubrir mi secreto y temía por su reacción y el que pensaría de mi. Cuando la recepcionista nos dio la tablilla para completar nuestros datos, Carter fue el primero en completar mientras la enfermera anotaba mis datos en la computadora.
-Nombre completo.
-Peyton Parcker.
-Nombre del menor.
-Theo James Parcker.
-Edad del menor.
-Tiene 4 años.
-Edad suya.
-18 años.
-¿Tiene algún parentesco con el niño?
Trague nerviosamente y mire de reojo a Carter mientras tomaba aire, él me miró solo un segundo y fue suficiente para saber que era hora de que él supiera la verdad. Descubriría mi secreto.
-Si, soy… soy su madre. Él es mi hijo.
#11152 en Novela romántica
#1756 en Joven Adulto
amor miedos secretos, secretosfamiliares, acción drama romance
Editado: 29.06.2024