El regreso a casa fue más rápido, al llegar a casa fui directo a mi habitación para tomar lo que necesitaría para hoy, prefería dedicar tiempo a mejorar en mis estudios que ir a esa dichosa fiesta de compromiso hoy, no es para nada necesaria mi presencia, y cuánta menos relación tenga con las amigas de mi madre estaré mejor.
Mi madre aún no llegaba, así que antes que dieran las cuatro de la tarde salí, encontrándome con Min Ho en la cocina —¿Saldrá, señorita? —cuestionó poniéndose de pie.
—Sí, ahora no me puedo negar a que vaya conmigo, no quiero meterlo en problemas —me incomodaba el hecho de tener que ir con Min Ho a todas partes. Llama mucho la atención, llevar guardaespaldas, da indicios de pertenecer a una familia adinerada, pero es por seguridad. Por órdenes de mi madre y mi padre, quienes son muy dramáticos, tengo que estar vigilada.
Salimos de la casa en dirección al café que estaba a 10 minutos de casa, era bastante grande y visitado por los estudiantes entre semana, era bastante cómodo para pasar un rato o estudiar lo que haríamos Jungkook y yo hoy. Al entrar al establecimiento el olor a café llego a mí, no soy muy amante del café, pero el aroma era bastante bonito.
Min Ho se quedó un poco alejado, sabe que no es de mi total agrado llevar un guardaespaldas, así que yo elegí una de las mesas algo apartadas de donde había algo de gente, ningún conocido para mi suerte. A los pocos minutos llego Jungkook, justo a las cuatro de la tarde se sentó frente a mí, acto que no le pasó desapercibido a Min Ho, pero como pude le expliqué que él era la persona a quien estaba esperando.
—Hola, ¿tienes mucho esperando? —dejó sus cosas a un lado, yo negué.
—Hola. No, hace un par de minutos, llegué, ¿quieres algo de beber? —él asintió a modo de respuesta.
—Vamos a pedir algo —me levanté al igual que él y fuimos al mostrador, donde se presentaba el menú. No era difícil de elegir, ya tenía en mente que podía beber, ya que no me gusta el café. —¿Qué te gustaría beber? —cuestionó mirando la gran cantidad de bebidas que tenía como opciones.
—Un té helado —dije a la persona que estaba al otro lado del mostrador.
—Yo, un café moka frío —la chica que estaba al otro lado tomó nuestro pedido dándonos la cuenta. Aunque yo trate de pagar, Jungkook, no me dejó hacerlo.
Regresamos a la mesa en espera de lo que habíamos pedido y también empezar a estudiar, que bastante falta me hace —¿Qué es lo que ahora se te complica?
—Mmm creo que memorizar o entender mejor la teoría, no me quedan muy claros ciertos puntos —le mostré mis apuntes señalando lo que tenía en comparación a lo que tenía él.
Después de un rato, mi teléfono comenzó a sonar, era mi madre, tal vez ya había llegado a casa —Lo siento, tengo que contestar.
—Está bien —dijo con una sonrisa Jungkook.
—¿Dónde estás? —La voz de mi madre tan inconfundible resonó al otro lado. —Sabías perfectamente que hoy iríamos a la fiesta de compromiso —me levanté y salí del lugar, bajo la mirada de Min Ho, a quien le indiqué discretamente que solo contestaría la llamada.
—Hay cosas más importantes para mí que otra de esas fiestas, además sabes que no me gusta ese tipo de eventos —presione el puente de mi nariz a modo de tratar de controlarme, no servía de mucho, pero lograba distraerme en ocasiones.
—Siempre dándome dolores de cabeza. Pensaría que estás celosa, ya que no tenías pareja, pero ese novio tuyo me hace pensar diferente, todavía no sé cómo es que son novios.
—Si mamá, las cosas son diferentes, nos vemos más tarde, tengo que irme —colgué la llamada sin esperar respuesta, comenzaría a discutir y de eso ya estoy bastante cansada, solté un largo suspiro antes de volver a entrar al café.
—¿Seguimos? —pregunto cuando me senté frente a él, tenía esa sonrisa otra vez, se me hacía raro, ya que por lo general era bastante serio, a lo mejor solo lo veía en esos momentos, pero al parecer sonríe mucho, se ve muy lindo cuando lo hace.
—Sí —sonreí también.
Después de casi dos horas había comprendido unas cuantas cosas, pero no me quedaba todo claro, algo que Jungkook había tomado con calma, era bastante bueno explicando, pero no me puedo concentrar por completo —Creo que lo que tienes es dificultad para concentrarte, casi lo comprendes todo. Será mejor trabajar en tu concentración antes de seguir.
—Bien, haré eso.
—Sí, ¿nos vemos mañana? O prefieres dedicar tiempo a hacer las tareas pendientes —comenzó a guardar sus cosas y yo imité su acción.
—Podemos vernos un rato, así me puedes ayudar un poco con lo de la concentración, no creo que pueda hacerlo sola.
—Me parece bien, ¿Nos vemos aquí?
—Sí, aunque sería mejor vernos más temprano.
Después de ponernos de acuerdo en vernos por la mañana, salimos del café. Le dije a Min Ho que nos iríamos caminando, a lo que él accedió, pero no se alejó. A pesar de que Jungkook no lo notó, pude ver a unas cuadras el auto; no era muy discreto, que digamos.
—¿Desde cuándo se conocen Taehyung y tú? —buen tema de conversación, apneas que había olvidado lo que había pasado en las últimas 24 horas.
—Desde la preparatoria, nos conocemos hace bastante tiempo —era algo incómodo para mí hablar de Taehyung, estar pensando en él solo me ha traído problemas. Lo malo de los sentimientos es que no los puedes manipular a tu antojo y conveniencia.
—Creí que se habían conocido en la universidad, son muy unidos.
—Es uno de mis mejores amigos, hemos pasado por muchas cosas similares, así que tal vez nos llevamos bien por eso ¿ustedes se conocieron antes de entrar a la universidad también?
—Sí, compartimos un par de cursos juntos en preparatoria, pero fue para el último año. ¿Sabes? Todo el tiempo se la pasaba hablando de ti —dijo con una sonrisa —. No sabía que eras tú hasta que entramos a la universidad; qué casualidad, hemos elegido la misma carrera.