El sabor de una despedida y de un corazón roto.

Deje de prestar atención a lo que pasaba a mi alrededor, el sonido de las maquinas era cada vez más lejano. De algo estaba más que seguro, no quería despedirme, esto es amargo y doloroso, como dagas atravesando la piel. El dolor de tener que separarme de ella en este momento era tan doloroso, ¿Qué sería de ella cuando despertara?, ¿Cómo tomaría todo esto?

Era más de medio día, pero no lo sentía de esa manera, las nubes grises estaban presente haciendo todo más doloroso, la lluvia repiqueteando contra las ventanas me hacía volver a escuchar su voz, aunque no estuviese a mi lado. Cosas tan pequeñas me hacen recordarla, el olor de la lluvia, las canciones de Michael Bublé o Frank Sinatra en la radio, el olor de la lluvia, su aroma impregnando en la almohada a mi lado.

—Jungkook, no debes quedarte ahí —Lai entro a la habitación haciendo que limpiara las lágrimas que habían salido —ven, acompáñanos, debes comer algo. No puedes pasarte los días ahí encerrado.

—¿Has sabido algo de T/N? —pregunte con la esperanza de que hubiese una mejora en ella.

—Muy poco, todo sigue casi igual desde la última vez que la vimos, acompáñanos. Ya han pasado tres días y no has comido nada, y te quejabas de T/N —negó saliendo de la habitación. Me quede sentado al borde de la cama un instante, debatiendo sobre si debiese ir o quedarme aquí hasta que pasara otro día.

—Al fin sales —hablo Chiara haciendo que Taehyung y Lai dirigieran la mirada en mi dirección.

—A T/N no le gustaría saber que estuve en esa situación —. El solo hecho de imaginármelo me partía el corazón, saber esto solo la pondría triste.

Me acerque a la mesa, donde antes de que llegara se encontraban conversando—. El medico dijo que T/N presenta actividad cerebral, pero que no hay muchas probabilidades de que despierte, la actividad es muy baja, dice que tal vez ella no quiere despertar —mi mirada se centró en Lai, quien miraba su comida para no vernos a nosotros.

—Yo creo que no debieron alejarte de ella —dijo Chiara —no entiendo que ganan con todo esto, solo le están haciendo daño, de no ser por eso ella estaría bien, si tan solo hubiera sabido que era lo que planeaba mi madre no dudando en impedir que viniera o si tan solo hubiese podido avisarles, esto no estaría así.

—No debes culparte por esto, sabíamos parte de las consecuencias de esto, solo que no sabíamos que todo iba a verse de esta manera exactamente —dije en un intento por reconfortarla, aunque no fue de mucha ayuda.

—Ella va a estar bien Chiara, no tienes la culpa de nada —dijo Lai levantándose y abrazándola, Taehyung solo se mantuvo en silencio observando.

Mientras pasaba el tiempo, más me alejaba de la posibilidad de verle, sentía las noches tristes abrumándome y la necesidad latente de pasar por alto lo que me habían dicho sus padres, quería ir a verla sin importar lo que dijeran, pero no podía seguir permitiendo que la lastimaran, no me quedaba más que quedarme aquí.

Ignorando la razón, salí del departamento a mitad de la noche, por suerte solo era una noche fría sin lluvia. Llegue hasta el hospital, enfermeras de un lado a otro era lo que podía ver desde donde estaba, conforme me acercaba a la recepcionista sentía los nervios florecer—. Buenas noches, señorita, ¿cree que pueda pasar a ver a mi novia?

—Lo siento, pero el horario de visitas termino hace ya bastante rato —dijo señalando el reloj que marcaba más de la una de la mañana.

—Solo por esta vez, no he podido verla desde hace casi una semana.

Después de unas cuantas suplicas, me encontraba caminando por el pasillo del hospital en busca de la habitación de T/N. Abrí la puerta despacio encontrándome por suerte con una habitación sin nadie más que ella. Las luces estaban bajas, solo se escuchaba el sonido de las maquinas a las que se encontraba conectada —Hola —acerque una silla a su lado —te extrañe mucho estos días —sujete su mano entre las mías, estaba algo fría—. No sabía si venir o no, pero no he podido controlarme y aquí me tienes —dije tratando de sonreír, pero no podía, sentía un nudo en la garganta—. Todo es extraño, debes despertar, Chiara esta triste al igual que Lai, Tae y yo. Hace rato me han convencido de comer, creo que sentí un poco de cómo te llegabas a sentir cuando yo te decía eso.

—Joven, no puede quedarse mucho tiempo —entro una enfermera haciendo que me asustara pensando que eran los padres de T/N —solo 5 minutos —asentí y ella salió de la habitación.

—Ya escuchaste, debo irme pronto —no pude evitar pasar una mano por su rostro, había cambiado bastante desde el día que la conocí, se preocupaba por su salud, por sus estudios, estaba cumpliendo sus metas poco a poco y ahora estaba en una habitación triste—. ¿Sabes? Liam y Maren me han preguntado por ti, se han preocupado, no sé si han venido a verte, dijeron que lo harían, les pareció extraño que no fueras a clases. Además, mi madre está preocupada por ti, no sabes cómo se puso cuando le conté, dijo que quería venir a verte, pero no era lo mejor. Creo que no debí decirle, ha estado muy preocupada, no para de preguntar como estas, deberías mejorar pronto. Escuche de Lai que eres tú quien no quiere despertar, no deberías hacer eso, tienes que ver lo hermoso que se ve Londres en esta época, creo que te arrepentirás si no lo haces, deberás esperar todo un año para volver a verlo —a este punto mi voz se había quebrado y mi vista se había nublado —tienes que despertar, todo va a estar bien, Chiara está aquí, también Lai y tus padres, es una buena oportunidad para visitar unos cuantos lugares en el lugar que tanto ansiabas conocer.