Agujeros Grises

Capítulo 3 En mi mente

Me despierto sintiendo un gran malestar en mis ojos, estúpido sol, siempre arruinando mi relación con mi cama, me levanto con un gran pesar, tome una ducha relajante al salir me coloque una camiseta grande y un pans ancho, y mientras me colocaba mis tenis, recordé que hoy era día de lavado, maldita sea, comencé  a echar mi ropa en un cesto como dios me dio entender, al salir al pasillo comienzo a correr como loca, espero que a la señora Mary no se lo ocurra cerrar la zona de lavado a tiempo, en el final del pasillo, choco con algo duro y alto, a levantar el rostro me encuentro con lo que se clasificaría un Dios griego, esos endemoniados ojos grises, el solo sonríe ante mi estado de trance en el cual reflexionó en que si este chico realmente es humano, entonces una varonil y sexy voz invade mis oídos.

- Creo que se te cayo esto- dice poniendo en mi campo de visión mi sujetador de ardillas y avellanas, o santa madre, porque la vida es un asco conmigo, rápidamente le arrebato el sujetador de la mano, me vuelvo a mirarlo y veo que esta sonriendo, maldita sea estoy cien por ciento segura de que mis mejillas están enrojecidas tanto como si le hubiesen puesto un sarten caliente encima, de mi boca intenta salir una palabra, pero no puedo salir de la escena que acaba de pasar no se cuanto dure en la luna pero un carraspeo me hizo volver a mirarlo.

- lo siento- dije tartamudeando, y otra vez esa ronca voz inundó mi oídos.

-Te más cuidado niñata- dijo con tono de asco, entonces un recuerdo se colo en mi mente.

Vaya miren la niñata a la cual su familia prefirió morir antes de convivir un día más con ella- dijo Cassandra, las palabras se atoraron en mi garganta. A lo que solo pude pararme y salir corriendo con la lagrimas a flor de piel. llegué al baño o y me mire al espejo mi reflejo me asusto vi una chica con una cara espantosa llena de cansancio y lágrimas, su cabello sucio y despeinado, un cuerpo muy delgado y con ropa sucia, me encerré en cubículo a llorar a liberar aquel nudo en mi garganta desde ese funeral.

Abrí los ojos, encontrándome con una luz blanca y la enfermería, lo primero que pasa por mi mente es que hago pero entonces una voz femenina invade mis oídos

- ¿Cómo se encuentra Señorita?- Al dirigir mi mirada hacia la persona noto que es una enfermera, solo puede contestar 3 palabra.

- ¿Que hago aquí?- ella sonríe al notar el tono de existencia en mi voz.

- Señorita Leire usted le dio una bajada de presión, lo cual pudo ser causado por no haberse alimentado bien o que estaba bajo mucho estrés- dijo la enfermera, la verdad es que me he alimentado bastante bien estos días, entonces recordé que el chica de los ojos grises me hizo viajar a una parte de mi memoria que yo creí extinta. voltee a ver a la enfermera que me atendió  y le solté.

- ¿Quien me trajo aquí- ella dirigió su mirada a mi  e hizo una mueca de molestia? - Un joven acompañado de sus guardias, creo que es el joven transferido  del edificio 3. 

-  Así que lo primero que cruza por mi mente si me trajo en sus brazo, borre ese pensamiento e hice la pregunta que me ha estado comiendo la cabeza estos días

- De casualidad sabrá su nombre- entonces la enfermera lo dijo - Creo que su nombre es Andrew-.

En ese momento es nombre sería grabado en mi cuerpo y alma, más yo no lo sabia.



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En el texto hay: asesino, amor, hospital psiquitrico

Editado: 21.03.2019

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