Cap. 3

Las horas pasaron, los días también, y sin darme cuenta, ya era mayo. Es increíble ver como en un abrir y cerrar de ojos los días pasan tan rápidos, que a veces deseamos que ya termine el año, sin darnos cuenta de que cuando eso sucede, nos enfrentamos a nuevas luchas, pero ese no es mi caso. 

Los días para son los mismos, mi rutina es la misma, mi comida pues no sabría decir si es la misma, pero, en fin. 

La necesidad de acabar con todo cada vez se hace más grande, es una necesidad que anhelo, y es que con los problemas que día a día tengo, no hacen más que quiera ya desaparecer, irme lejos de todo y todos, irme a un lugar donde no me conozcan, donde no sepan nada de mi familia, donde las inseguridades que aguardan en mi interior desaparezcan, que cada vez que me mire al espejo no sienta asco, y sienta  amor por mí misma, bien dicen que cuando creemos engañar a las personas no es ms que una mentira, pues en realidad aquí en engañamos es a nosotros mismos, hasta llegar al límite de ya no saber si lo que decimos es verdad, o es una mentira. 

Todavía deseo que seas tu… Decía Joji en una de sus canciones.

Cuando las cosas que más queremos nos hacen daño… pienso que deberíamos alejarnos de ellas entonces, pues en ninguna circunstancia debería de ser así.

¿Cuándo han visto a una persona quedarse con alguien que la daña? Hay casos en los que suele ser así, pero yo siento que cuando es así, esas personas lo hacen por no sentirse solas, y confunden agresión con amor, pues piensan que esa es su manera de decir un Te quiero.

El te quiero que por años jamás me falto, pero que por años añore que me demostraran como era querer.

Tengo una muy mala experiencia en esto de querer. ¿Por qué? Simple, cunado mi padre me decía te quiero, o me dice esa palabra, ya no se si creer o no. Pues las experiencias en mi caso hablan por sí mismas.

En cambio, con mi madre, cada vez que ella me dice te quiero, una sensación de calidez llega a mi pecho que me hace sentir en paz, una paz que solo en muy pocas personas he logrado encontrar.

Y con mis abuelitos (digo así porque que abuelos lo escucho muy raro) es otro tipo de emociones. A veces la forma con la que actúan me hace sentir querida, pero en ocasiones, me hacen sentir que solo buscan dañarme, pues no es fácil ver como en un abrir y cerrar de ojos, ellos están ahí, con las personas que mas daño te han causado, y que gracias a ellos también has recibido humillaciones.

Esto lo digo por porque así es en mi familia, cuando llegan los otros hijos ya sean de mi tío o mi padre, los tratan como si fueran la maravilla más hermosa que hay en el mundo, y es ahí donde todo se rompe.