Cuando no sabes qué es lo que quieres una botella de vodka es tu mejor compañía - tú sabes que esa te hará daño - no quería uno de sus discurso de doctora.
- Mira llevo bastante tiempo mirando a la gente bailar y creo que me dio ganas.
Me levanto lo más rápido posible y sus quejas se mezclan con la música, trato de estar lo más lejos posible de mi mesa, trato que mis pies sigan a la música y mi cuerpo se adapte a ella, cada brinco que doy es un trago a la botella; hoy fue mi tiempo libre y decidí venir a mi primer trabajo, el bar veraniego, los recuerdos me azotan que los desechos tan rápido como vinieron.
Hoy es un día importante, ¿sabes por qué?- todos estaban en silencio -porque hoy cumple 24 años así que vamos a cantarle - mientras la gente entonaba la música me tuve que parar en un silla para ver mejor quien era; sí, mi jodida estatura no me dejaba ver.
Bella, Bella - gritaba mi amiga y la deje de escuchar cuando sus ojos estaban fijos en mí, podía apostar que no reflejaba añoranza; si señores era Andrew y a su lado su amigo jack, nunca fue de mi agrado verlos a los dos. Sentía una manos en mis piernas y pude salir de mi burbuja.
Ellos volvieron ¿verdad?- grité tratando que me escuchara - si Bella, eso quería decirte pero como siempre te desapareces.
Tome de la botella un trago largo, sentía su mirada calarme hasta los huesos, baje de la silla y me revolví con la demás gente. Lisa me seguía el paso tomamos nuestras cosas y salimos lo más rápido
Señoritas ¿ A dónde van?- el guardia se atravesó en nuestro camino -esto le deja el señor Andrew -nos dio unas charola llena de vasos con ron
No gracias, todavía tengo la mía - alzo mi botella. Él nos dio el camino libre, seguimos hasta que tomamos un taxi y pude soltar todo el aire retenido miró a lisa y está que no se aguanta la risa, hasta que la suelta su cara se torna en color rojo sus cabello negro topa una parte de su cara, aunque no le hallo la gracia me uno a ella.
Tú sabias que iba a estar ahí - se quitó la chaqueta sentándose en el mueble
Si, lo sabia. Era su cumpleaños - alzó los hombros restandole importancia. Achique mis ojos, ¿Cómo no me di cuenta? - antes de que sueltes una idea estúpida, pensé que iba a estar en el otro club la sorpresa también me la lleve yo.
me senté a lado de ella mirando la televisión apagada, nos reflejábamos en ella; sentía que las cosas iban a cambiar - la pregunta del siglo... ¿Qué vas hacer bella, ante todo esto?
- Esa misma pregunta me hago, no sé donde nos lleve... porque el no vino a buscar ser amigos, tú viste la mirada que me dio, él sabia que iba a estar ahí y como cobarde me fui.
- Estás preparada para jugar al gato y el ratón - maldije por lo bajo.