Faltan solo 5 meses para navidad, aun no entiendo por qué mi madre está obsesionada con organizar la cena familiar en la casa.
—¿De verdad crees que todos vengan? —pregunto mientras me siento aun lado de ella.
En la mesa se pueden observar demasiados de papeles con nombres de proveedores de banquetes, servicio de meseros, al igual diferentes estilos de menú, así como muchas fotos de mesas decoradas e infinidad de cosas más que de solo mirar me duele la cabeza.
—Dime —gira su menudo cuerpo a mi —¿A caso dudas que alguien se pierda una cena organizada por mí? —pregunta un poco molesta mirándome fijamente.
—Bueno madre, ya sabes que por cuestiones de covid-19 muchas personas no quieren exponerse.
Suelta una risa burlesca haciendo una mueca de lado —Como si eso impidiera que este año si celebramos la navidad. —bufa mientras se levanta del sillón y me deja sola espectando todo su revolvería de cosas para la navidad.
Mi madre es una persona obsesionada con la perfección, no me sorprende que se anticipe demasiado para obtener una velada perfecta, pero —¿si hago algo diferente este año? —esa pregunta invade mi cabeza por los siguientes meses.