CAPITULO X
NOCHE DE CHICAS…
Retomar la rutina sería una tarea agobiante, ya que la pequeña Becka necesitaria de mi completa atención, más allá que la tormenta había pasado, mí pequeña Becka se recuperaba ya en casa, llena de mimos y arrumacos, el panorama se veía positivo, mí acosador no había dado señales por lo que estaba más tranquila. El regreso al trabajo no fue lo que esperaba, pensé que me encontraría con Aiden, pero había tenido que viajar de imprevisto. El sr Fergus como siempre se mantuvo al tanto de todos los casos pero era solo una excusa para estar al pendiente de mi.
La insistencia de Alessa para que tuviéramos una salida de chicas había tenido sus frutos y con mucho preparativo había pensado paso por paso lo que haríamos al salir de casa dejando a los niños en las benditas manos de Olivia.
Luego del trabajo, llegue a casa, jugué un momento con mis niños y me dispuse a ir a mí habitación para darme una ducha y comenzar a prepararme para esta noche. Ingresé a la lluvia que caía tibia sobre mí, deje volar mis pensamientos por un momento, Aiden vino sin demora a mí mente. Sus ojos turquesas me quitaban el sueño pero su cuerpo y masculinidad me dejaban sin aliento. Me relami los labios pensando en sus besos, y me sonroje cuando intente imaginarlo desnudo junto a mí. Cuando me di cuenta que eso jamás pasaría me maldije mentalmente y salí de la ducha para comenzar a vestirme, quien sabe y hoy podría conocer a ese hombre que me haría olvidar a mí jefe.
Saque del ropero un vestido que compre hace unos años, antes que toda mí vida diera un vuelco, quien sabe y aún podría quedarme ya que no había aumentado de peso. Me seque el cuerpo, el cabello y me coloque crema, cuando ya lo había hecho por todo mí cuerpo, me puse el vestido, era corto me quedaba un poco más abajo de mis glúteos, era bien pegado a mí silueta por lo que me quedaba a la perfección, enmarcaba cada curva bien delineada, la espalda era toda descubierta, por lo que la parte de adelante resaltaba mis pecho, era de color negro, pero tenía unos pequeños brillos plateados que le daban el toque de distinción, de un vestido de noche. Ondule mí cabello y me maquille sencilla como siempre, "porque aveces menos, es más" termine retocando con rimel y delineador. Tomé mí campera de cuero negra y salí del cuarto para ver si Alessa también estaba lista. _pero quien eres y que haz hecho con mí amiga!- la efusividad de Alessa hizo que me hechara a reír
_que ocurrencias dices- le dije con mis mejillas roja fuego.
_ te imaginas si fueras así vestida todos los días a la oficina… pobre Ludwing, no podría con semejante tentación.
_ jaja. Que graciosa- le dije con ironía
_bien!- dijo en rendición, ya que de buenas a primeras podía cambiar de opinión y adiós salida de chicas._ llega Olivia y nos vamos- asentí
_ y a donde piensas llevarme?- le pregunté con total intriga
_ uno de mis compañeros me recomendo este bar, allí puedes cenar, tomar algo o simplemente bailar en la pista, tienen un excelente DJ.
_ guau...y nosotras que haremos
_ nosotras? todo!!- dijo con entusiasmo _cenaremos luego tomaremos algunos tragos y cuando estemos completamente borrachas sacaremos chispas a esa pista de baile - Alessa comenzó a bailar dando círculos alrededor de mí
_ borrachas? No, ni lo sueñes
_ vamos, Bri!! Mañana no hay que ir a la oficina. - yo solo me cubrí el rostro en negación cuando el timbre salvo a Alessa de mí sermón.
Olivia se quedó con los niños esa noche, sin antes dejarle una cierta cantidad de directivas, no por Jackson ya que ella lo conocía muy bien, sino por mí acosador, no quería bajar la guardia, no quería dejarle motivos para que me atacará con la guardia baja.
Tomamos la avenida principal y se veía el movimiento nocturno, las personas iban y venían, se aglomeraban en distintos sitios, bares, resto y boliches. Me intrigaba saber a dónde me llevaba Alessa, pero conocía lo suficiente a mi amiga como para saber que no me contaría absolutamente nada. De pronto el taxi disminuyó el andar, las personas estaban agolpadas y al parecer todas querían ingresar al mismo sitio. _ que locura, mira la cantidad de personas- dije mirando por la ventanilla, sin saber que era allí donde nos dirigíamos.
Alessa le pidió al chófer que se detuviera por lo que las personas comenzaron a rodear el automóvil. _ vas a decirme que es aquí. - le pregunté en forma casi irónica ya que si ella imaginaba que podríamos entrar estaba delirando. Había luces por doquier, grandes reflectores iluminaban el cielo y la entrada del lugar con el gran cartel que decía "stravaganza"
_ tu, no te preocupes. Tengo todo arreglado.- Ambas nos bajamos y nos dirigimos hacia la entrada que estaba custodiada por dos hombres fortachones vestidos de negro. _ quédate detras de mi.- me indico por lo que solo le obedecí sin chistar. Alessa se arrimó a uno de los hombres y le hablo algo al oído, el hombre asintió y de forma casi inmediata nos dejó pasar.
Fue casi imposible no quedar boquiabierta, el sitio era majestuoso, lleno de lujos, contaba con dos grandes barras de bebidas, de mano derecha se encontraba un sector donde había mesas que pertenecían al resto, de mano izquierda había grandes sillones con mesitas ratoneras y en el centro del lugar se encontraba la pista de baile.
_ y que te parece?- pregunto Alessa acercando su cuerpo hacia mi para poder escuchar ya que la música resonaba por doquier.
_ esto es increíble. Jamás había estado en un lugar así- le contesté entusiasmada
_ vamos busquemos donde sentarnos.- la seguí como siempre, ya que ella sabía cómo manejarse en lugares como este. Ubicamos una mesa y nos dispusimos a ordenar algo ligero para cenar. La noche parecía prometedora, comenzamos con rabas y mariscos y luego la primer ronda de Martines comenzó hacer efecto en mi.
_ vamos a bailar- le dije y juntas salimos caminando al ritmo de la música. La pista estaba llena de personas y nosotras no queríamos ser menos.
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Editado: 06.12.2024