CAPITULO XVI " AUNQUE TU NO LO SEPAS…"
Los días pasaron, el otoño comenzaba a despedirse, las gotas de lluvia se volvian copos de nieve, todo el mundo comenzaba a palpitar las vacaciones de invierno. Pero para mí eran días grises, no sucedía nada de otro mundo, trabajo, casa, niños, hogar.
Tomás pese a su insistencia solo había logrado invitarme dos veces a almorzar y yo siempre lo mantuve a distancia, pero sabía que el no se daría por vencido con facilidad, el era un hombre que recibia un no por respuesta. Y yo pese a que lo único que hacía era llorar por las noches por un hombre que no lo valía, solo rogaba en no caer en los brazos de alguien que ya me había lastimado mucho, por lo menos me había lastimado lo suficiente para no querer volver a enamorarme. Y con Aiden me había arriesgado y vuelto a equivocarme.
_ hola hermosa- ingreso Tomás a mí oficina
_ hola- contesté sin a apartar mí mirada de mí laptop
_ vamos ya deja ese expediente que si no descansas no podrás resolverlo con claridad
_ aún no logro descifrar el móvil del sr Stuart
_ muchas veces una persona solo mata por matar
_ yo no lo creo, para mí una persona siempre tiene un porque de su actuar y accionar - me saque mis lentes para refregar mis ojos
_ vamos te invito a cenar - dijo apoyándose sobre el escritorio
_ Tomás…tu no te das por vencido
_ contigo jamás…- sonreí, era lindo que pese a todas mis negativas el no se diera por vencido conmigo
_ solo amigos- aclaré
_ si, si. Por ahora- retrucó por lo que yo me puse a reír
_ está bien, vamos a cenar
_ perfecto, 10 minutos que busco mis cosas y salimos
_ bien- dije y salió de la oficina con la mirada iluminada
Desde un minuto a otro la puerta de mí oficina se abrió con brusquedad, pensé por un minuto que Tomás ya había regresado
_ dijiste 10 minutos aún no he terminado- cuando termine de decir esa frase que al mirar hacía el frente me topé con sus enormes ojos mirándome, mí sonrisa desapareció, un terrible escalofrío me recorrió el cuerpo haciendo que se me erizara la piel, algo que solo el podía ocasionar en mí más allá de todo. _ que haces aqui- dije con frialdad
_ no sabía que te encontraría aquí, está era la oficina de Tomás- camino serio por el lugar
_ si, lo era- contesté observándolo de costado
_ no sabía que trabajabas aquí- dijo acercándose
_ no deberías
_ te estuve buscando- dijo cabizbajo
_ a si? No entiendo porque. Me dejaste las cosas muy claras la última vez que nos vimos
_ necesito hablar contigo
_ lo que necesites hablar no me interesa. El se acercó tanto a mí que tomo mí brazo, cuando la puerta se abrió ingreso Tomás que miró con desprecio a Aiden que me tomaba del brazo
_esa no es forma de tratar a Brianna, suelta su brazo- dijo, pero al notar que Aiden no lo hizo se acercó y saco el mismo la mano de Aiden de mí brazo, para luego colocarse a mí lado _ a que se debe tu visita, me dijo mí secretaria que estabas buscándome- se dirigió a Aiden sin sacar su mirada de el
_ el sr Ludwing ya se iba- fue lo primero que se me ocurrió decir, intentando que estas dos potencias no se enfrentarán frente a mí
_ no es así.- dijo tajante _vine para hablar con Tomás
_ y en que podemos ayudarte.- dijo Tomás tomándome de la cintura sin dejar de incomodarme, pero no lo rechacé, el me sonrió como si de alguna manera intentará protegerme, por lo que asentí _ no creo estar informado de ningún caso que podamos compartir información, o si? - me preguntó mirándome para luego volver a mirar a Aiden que se encontraba muy serio
_ pues, aún tenemos un caso que compartimos
_ cual? - pregunté por no saber a que se refería
_preferiria hablar de esto a solas contigo Tomás
_ Brianna es mí mano derecha, asi que si se trata de algún caso ella tiene que escuchar
_ así que es tu mano derecha…- dijo entre dientes Aiden reflejando enojo en sus ojos
_ si, lo oíste bien. Puedes hablar con libertad frente de ella. Aiden camino pasando su mano por su cabello, quizás pensando en las palabras que diría
_ pensar que una vez también fue mí mano derecha- dijo en voz baja, pero Tomás y yo lo escuchamos con claridad
_ tendrías que haberla cuidado mejor- contesto Tomás mirándome _ se a lo que me refiero. - acarició mí rostro, refiriéndose a que el tampoco me había sabido cuidar en su momento
_ señores, creo que deberían dejar la lucha de egos para otra ocasión - dije colocándome entre ellos, Aiden me miró con esos turquesas que eran mí debilidad, inhale profundo intentando reunir fuerzas para no caer en la tentación, pero todo se esfumó al oler su perfume con extracto de madera y chocolate, cerré fuerte mis ojos para volver a mirarlo y me aleje
_ si, tienes razon- contesto Tomás viendo que nuevamente estaba destruida _ de que se trata- dijo está vez mirando a Aiden que no había apartado su mirada de mí en ningún momento
_ del caso de Brianna- gire para volver a mirarlo
_ como? - pregunté intrigada
_ si, el detective se comunicó conmigo,pensó que aun estabas trabajando para nuestro bufete
_ y que sucede- está vez tanto Tomás como la mirada de Aiden reflejaba preocupación
_Ethan fue visto merodeando tu domicilio
_ entiendo- dije mirando un punto ciego
_no te preocupes, hablare con la policía, haré todo lo que esté a mí alcance para su seguridad- Tomás se oía preocupado
_ yo solo quería decirte que puedes contar conmigo para lo que necesites- me miró con tristeza y angustia en sus ojos
_ no es necesario Aiden. Ella no está sola- dijo Tomás haciendo que Aiden asintiera y saliera de la oficina
Fuimos a cenar con Tomás, intento a su manera de darme tranquilidad, no podía negar que sentía miedo, pero me sentía destruida por otra razón, ver a Aiden Ludwing había destruido lo poco que había logrado reconstruir. Necesitaba una dosis de cariño, necesitaba regresar a casa y abrazar a mis niños.
#5051 en Novela romántica
#1415 en Chick lit
romance drama, dolor amor, leyes sociedad amistad sexo matrimonio
Editado: 06.12.2024