2. Los martes

Las gotas de sudor caen por los costados de mi cara y la banda elástica de color celeste que sostiene mi cabello esta impregnada de esas mismas gotas. Puedo sentir los pálpitos de mi pulso acelerado por todo mi cuerpo, en especial mis oídos. La música que se desprende de mi celular abarca el ritmo que llevo en la caminadora que está en el cuarto de ejercicios que mi madre instaló.

Van 15 minutos de trote sin parar, con esto finalizó mi rutina de ejercicios diarios. Mi cara probablemente esté roja y mi espalda húmeda por el salado líquido que desprende de mi, pauso la música escuchando la puerta central de la casa abrirse, supongo que es alguna de las chicas aunque ya esta algo tarde. Aprovechando que tomé mi celular reviso una notificación.

Online Friends
Caramelo206: Entonces... "chico oscuro" ¿aceptas mi propuesta o no?.

Sonrió ante el mensaje de la chica— o chico, aún no tiene identidad— de hace un rato. Luego de su extraño mensaje saludándome le pregunté quién era, pero se negaba hacerlo, así que opte por decirle que si no me decía quien era la—O lo, suponiendo que sea un chico— iba a eliminar.

La muy astuta — o astuto, aun no descarto que sea un chico— me dijo "lee los términos y condiciones" y pues aunque no se lo dije, lo hice. Según esta rara y poco segura aplicación no puedo eliminar a alguien a quien le envíe o le respondí un mensaje, lo se, loco, pero igual podía solo ignorarla.

Claro que eso no fue lo que hice, solo le dije que no era de mi interés hablar con ella— O el— y me propuso que nos conociéramos, que no perdíamos nada, yo no le daba mi nombre y ella el suyo— por que ahí me dijo que era una chica, pero puede que sea un chico que se haga pasar por chica, aunque eso podría pensar ella... O el, de mi, en fin— Su propuesta iba de ser amigos por esta peculiar aplicación sin decir nombres, ni nada muy personal. Mi respuesta le causó gracia pero dio a entender mi punto:

Dark_Boy69: Claro... por qué decir todo de mi sin decir mi nombre es menos peligroso que solo decir mi nombre y ya.

Se burló de mi, y para cuando menos me di cuenta entre en una conversación con ella— O el, aún no tengo pruebas de que no sea un "el"— sobre la confianza y el abrirse a nuevas experiencias. Su último mensaje decía que confiar era de inteligentes, a ese ultimo no conteste y luego estaba su pregunta de si yo aceptaba su loca propuesta o no. Me lo pienso, pero aun no se.

–¡Fran!— Escucho a mi mama llamarme, así que dejo el teléfono a un lado, por que su presencia me toma por sorpresa— ¿Hijo?, ¿estas en casa?

–En el cuarto E mama—Así le puso ella al cuarto de ejercicios que implemento en casa cuando cumplí 16, alegando que debía ejercitarme mas; ha tenido su parte positiva, estoy en forma y sano, pero ¿a dieta?, jamás.

–Hola hijo, te extrañamos mucho— Siento los brazos de mi madre rodearme desde su escaso metro con sesenta y cinco, se lo devuelvo no con el mismo entusiasmo tratando de no empaparla de sudor, cosa que a ella no parece afectarle.— ¿Cómo has estado? ¿Ayudaste a las chicas con su trabajo?

Me río por que a esta mujer no se le escapa ni una–Yo estoy muy bien Ma, las locas están esperando su resultado en el examen.— Ella me reprocha que no las llame así y papá entra en la habitación–Pero... ¿Ustedes no llegaban hasta mañana en la mañana?— Cuestiono luego de haber saludado a mi papá, el cual si evita el abrazo.

–Te dije que podíamos llegar tarde en la noche hoy, o mañana temprano, tu tío Larry nos consiguió un vuelo de emergencia o mas bien de último momento y aquí estamos.

Yo asiento y le ayudo a Dan— Mi padre — con las maletas, luego conversamos un poco acerca de su viaje a Múnich, un viaje por su aniversario número 22 de matrimonio, lo se, muchísimo tiempo, no sé como le hacen pero su amor se ve intacto. Luego de un rato me despido de ellos.

Mientras voy escaleras arriba mi celular vibra en mi mano indicándome que se apago. Llegando a mi habitación lo conecto y me meto a bañar.

15 minutos después estoy con mis pantalones de pijama y con el computador en mis piernas, entro a la plataforma oficial del instituto y reviso mis clases del lunes, siendo mañana sábado el trío de locas van a estar acá todo el día así que apago el computador y cierro las ventanas de mi cuarto. Paso el seguro de mi puerta y prendo el teléfono, tarda un momento así que me recargo sobre la cabecera de la cama. La vibración del teléfono por las notificaciones me hace abrir los ojos. Tengo 3 Mensajes de WhatsApp y uno de la dichosa aplicación, no me sorprende ver a la chica —O chico que por ahora va ser una chica hasta que se demuestre lo contrario— con otro mensaje.

Caramelo206: Vale, quizás me he puesto algo intensa con lo de ser amigos, si no quieres esta bien.

Sonrío mientras tecleo una respuesta.

Dark_Boy69: Bueno si, un poco molesta pero aun no te digo que no, ¡aun!. Y no había respondido por que se me apago el teléfono.

Me sorprende ver su pronta respuesta.

Caramelo206: No, pues yo decía que no pasaba nada si no querías ser mi amigo, bien puedes ser mi fan.

Se me escapa una carcajada por que la supuesta chica si que está loca.

Dark_Boy69: Huele a egocentrismo por aquí.

Caramelo206: Se le dice autoestima.

Dark_Boy69: Claro claro, autoestima.

Caramelo206: Cuando seamos amigos te enseño como tener de ese. Pero ahora contéstame ¿aceptas o no?.

Ay chica misteriosa, que voy hacer contigo...

***

29 de Septiembre de 2020

¿Han notado que mucha gente odia los lunes?, Bueno, yo no, yo amo los lunes, ese día todo me sale bien, el día anterior a ese, organizo todo y el lunes es el día ideal, inicio con mi clase de Español— que es, por mucho, mi clase favorita—, y el resto del día veo clases hermosas o algo bueno me pasa durante su transcurso. Es un día glorioso y lo amo. ¿Lo triste del caso?