Capítulo XIX

Denise sonríe y coge su teléfono, se da cuenta de las llamadas perdidas de Josh y se asusta. -¡Lo siento, pero me tengo que ir! Dice Denise mientras recoge su ropa para vestirse. Bend se levanta aún desnudo y le pide que se quede. -No puedo, tengo una emergencia, yo te llamo, está bien- le responde dándole un beso en la boca. Sale apurado del cuarto y corre a su auto. Se siente muy cansado y desgastado. Bend cierra la puerta y se dirige a la chimenea de la sala. Queda viendo y extiende su mano. -Incendia- dice viendo como se prendían las leñas y con una sonrisa en su rostro.

Por otro lado, Denise llega a su auto y llama a Josh. Se escucha que timbra pero no contestan. Vuelve a marcarle y al fin le responde.

-¡Hola! ¿Denise dónde estás y por qué no contestabas el teléfono?- Josh.

-¡Hola amor, discúlpame se me hizo tarde pero ya estoy yendo lo más rápido posible para la casa- le contesta Denise.

Josh calmó sus nervios al saber que su novio estaba bien. Ángela se ríe de lo que pasaba.

-No te burles Ángela. Aunque él sea muy poderoso, igual me voy a preocupar ya que no es inmortal- Josh.

-Lo sé, y eso es lindo, ver como se preocupan uno del otro me hace querer tener a alguien así- dice Ángela.

-Tranquila, ya llegará tu príncipe azul- lo dice Josh entre risas.

Ángela se ríe también y decide irse a su habitación en la universidad. Lo deja a Josh esperando a Denise, quien llega muy rápido.

-Josh, lo siento por demorarme y no haberte contestado tus llamadas- le dice mientras se bajaba del carro y viéndolo parado en la puerta. -entra- dice Josh.

Los dos entran a la casa y Josh cierra duro la puerta que un golpe fuerte se escucha. -¿En dónde estabas?- pregunta enojado.

-¡Calmate Josh, por favor! Yo te lo explico. Responde Denise. El joven se sienta a escuchar qué le tenía que decir su novio.

-Yo fui a la ciudad a ver qué había, me di cuenta que estaba la feria y me quedé viendo. Después de un rato caminando me sentí muy débil, como que ya me desmayaba. Entones me regresé al auto y sentía que me moría, me desmayé. Tuve un desgaste de poder- explica Denise.

-¿Qué, cómo que desgaste de poder? Si se supone que eso nunca se acaba- pregunta Josh.

-Amor, no es que nunca se acaba. Hay veces que se ocupa mucho poder y se agota. Se debe de esperar un tiempo para volver a tener magia- sigue explicando.

-¿Osea que estuviste peleando antes y agotaste tu magia?- vuelve a pregunta.

-¡Eh sí! No pude verle el rostro pero era un ser muy poderoso. Lo ataqué con todo lo que tenía que lo espanté, pero después me sentí débil y me desmayé- Denise le dice agarrándole las manos.

-¡Así que no tienes magia, compruébalo! Lo reta Josh.

-Ven vamos a la chimenea- lo levanta a Denise.

-¿Te acuerdas el truco del fuego que obedece? Pregunta Josh. -Sí- responde Denise.

-Quiero que lo hagas, yo tengo anotado ese hechizo, sólo debes de decirlo y la magia hará el resto.- dice Josh cuestionando a su novio.

Denise lee el hechizo -Incendia moved onus obedec- El fuego se prendía pero se apagaba de inmediato. Josh queda viendo y le pide que lo intente de nuevo. Denise accede, se da cuenta que su mentira era el 50% real. Sus poderes estaban agotados y no sabía el por qué.

-¡Ay amor, perdón! No sabía que estabas pasando por eso. Lo importante es que estás bien! Quiero que me disculpes- Josh le pide perdón y lo lleva al cuarto, lo besa y acuesta en la cama, pero Denise le dice que está muy cansado para tener sexo en ese momento.