Al paso de los días, él quería estar hablandome diariamente. Ya me sentia acosada incluso me celaba con otros chavos que yo les hablaba con el que más lo hacía frecuentemente era con un chavo que se llamaba Josué a él ya lo había conocido en el colegio anterior cuando yo estaba en segundo año y el en tercero de secundaria, Josué había seguido esa misma carrera él ya llevaba segundo año y yo primero, pero así eran las cosas estuardo me celaba mucho.
Con Alex no sé ni cómo empezamos a tener comunicación, bueno si sé, yo como siempre de metida; Alex estaba con uno de sus mejores amigos bromeando cuando yo llegue a inrumpir yo a ese chavo solo lo conocía por su apellido que era Illescas, ellos bromeaban y yo toda confianzuda empeze a bromear con ellos.
Allí empezó mi amistad con ellos dos.
Bueno se imaginarán el tipo de chava que soy alocada, molestona y que a pesar de todo siempre le regala una sonrisa a la vida, aunque eso de alocada y bromista solo lo era en el colegio, porque con mi novio no podía ser yo misma ya que a él le gustaba de que yo fuera más formal, en pocas palabras aburrida.
Las chavas de mi aula empezaron a decir de que yo era una puta, porque básicamente solo me llevaba con hombres a pesar de tener novio; de cierta manera jamás me ha importado lo que digan o piensen las demás personas de mi; pues no como por ellas y mucho menos me mantienen.
En tan solo pocos meses tenía varios amigos eran tan diferentes pero eran únicos, me gustaba llevarme con los barones porque ellos no te envidian y no hablan mal de ti.
Después de todo eso sí me gustaba ir al colegio jeje,
Con el que amigo que más bromeaba y reía se llama Will, con él pasábamos molestando mucho y por eso nos llamaban la tensión los maestros.
Hubo una ocasión antes de que empezará la clase Will estaba diciendo cosas ilogicas que me daban mucha risa, cuando llegó la maestra controle un poco mi risa pero cuando me acordaba lo que Will había dicho me empezaba a reír nuevamente y de paso le contagiaba la risa a él, y allí fue cuando la maestra dijo.
-ustedes dos, los de la esquina silencio por favor; y allí se nos quedó viendo toda la clase, pero daba igual porque si eran únicos esos momentos.
Cuando me tocaba refaccionar diariamente lo hacía con Nathalie solo que con ella no era divertido estar porque ella empezaba a hablar de otras chavas o de personas que ni conocía yo. Pero en fin ese año en el colegio no me fue tan mal apesar de que era el primero.