Amor Intocable

Capítulo 9

Llego al asilo registrando mi llegada, voy a dejar mis cosas para ir directo por los abuelos para llevarlos a desayunar, doy un pequeño brinco cuando escucho a todos gritar ¡Sorpresa! Observo toda la sala decorada con algunos globos, serpentinas y un pastel, mis labios forman una gran sonrisa por la sorpresa, mis ojos se llenan de lágrimas al ver lo que los abuelos hicieron por mí, me adentro a la sala y observo a todos mis compañeros, y algunos de mis abuelos a mí cargo.

- Queríamos despedirte cómo te mereces, porque te mereces esto y más por todo lo has hecho por nosotros- me dice la abuela Davies –estamos enteramente agradecidos por las atenciones que tienes con nosotros y por todo el amor que nos das.

- Sí nietecita, estamos agradecidos del amor que nos das a nosotros los abuelos que hemos sido abandonados aquí, y que el cariño y amor que no recibimos de nuestros hijos tu no lo das- el abuelo Robbie se acerca tomando mi mano dándole un apretón –eres un ángel brillante que a cualquier lugar al que vallas, con tu luz resplandecerás. Resplandeciste este asilo, resplandeciste nuestras vidas, y cuando nos vayamos al mundo de los muertos, tu luz nos guiara a esa luz en el camino.

Las lágrimas comienzan a deslizarse por mis ojos, abrazo al abuelo Robbie y le agradezco por sus palabras, aunque no me gusto lo último que dijo, no quiero pensar que un día me van a faltar, aun no asimilo que mi abuelo Hugo ya no está más.

- Bueno esta fiesta no es para ponernos a llorar- escucho decir a Ned –que comience la fiesta, porque este pastel no se comerá solo.

- Y antes de que comiences con lo de la azúcar y la sarta de palabrería médica, Rhonda se encargó de que este pastel no contenga mucho azúcar y no nos haga daño –escucho decir a la abuela Davies.

- Bueno en ese caso, que esperamos a ¡festejar!

Terminamos de comer y parece que ahora los abuelos junto con Ned ya habían planeado las actividades de hoy y ellos creyeron conveniente integrar a las actividades el Zumba, parece que la única clase que les di les agrado. El abuelo Robbie se auto proclamo como el encargado de dirigir a todos los abuelos, me pongo a lado de él por si llegaba a caer y toco madera para que eso no llegue a suceder.

- Enclenque prende ese cacharro y pon la música –le indico el abuelo moviendo sus manos, Ned solo negó con la cabeza, porque déjenme decirles que Ned no tiene nada de enclenque, es alto, fornido con unos ojos cafés oscuro, cabello castaño y tiene un tatuaje en el bíceps derecho, no puedo negar que Ned es guapo y atractivo. comienza a sonar los primeros acordes de ¿Pom poms de los Jonas Brothers? Observo a Ned y el levanta las manos.

- Yo no elegí esa canción, Robbie la eligió, yo le mostré las canciones que tengo en mi celular y el eligió esa, yo me hubiera ido por Sexy Back de Justin Timberlake –niego con una sonrisa en los labios, el abuelo Robbie comienza a indicar que movimiento hacer, escucho algunas articulaciones tronar, pero eso no impide que los abuelos bailen, puedo ver cómo se divierten intentado imitar los pasos del abuelo.

Después de que el abuelo Robbie terminara su clase de Zumba, creyeron conveniente jugar al bingo, diciendo que yo debería jugar con ellos, me senté junto a la abuela Knight, mientras Ned se puso al frente mientras le da vueltas a la tómbola de donde estaban los números del bingo, los abuelos comenzaron a poner sus pertenencias, billetes y dulces en la mesa de apuestas, y al pasar iban tomando una tarjeta del bingo, me acerco a dejar un billete y tomo una tarjeta, me siento a un lado de la abuela Knight donde es el único lugar disponible. Comienza el juego no llevábamos ni media hora, cuando escuchamos que la abuela Knight grita ¡BINGO! Los abuelos comienzan a gritar diciendo ha hecho trampa, mientras que la abuela Knight se niega, Ned se acerca para checar y en efecto la abuela Knight había ganado se levantó de la silla para tomar sus premios, todos volvieron a dejar algo en la mesa rezongando de que han perdido y volvemos a jugar. solo les diré que las tres veces que jugamos las tres veces que gano la abuela Knight.

- Oh, Olí, me has traído suerte, ¿Por qué nunca te sentaste conmigo? –me pregunta la abuela

- Porque no sabía que era de la suerte, pero ahora que lo sé, a la próxima me vuelvo a sentar con usted.

- De eso nada, a la próxima te sientas conmigo- escucho decir al abuelo Robbie, pero todos comenzaron a pelear sobre con quien me sentare la próxima vez que venga a jugar.

Yo solo rio diciéndoles que me sentare con todos, pero ellos prefieren ignorar mis palabras y seguir discutiendo.

(***)

El día se fue relativamente rápido, cuando menos me di cuenta los abuelos ya estaban en la sala del video, los deje al cuidado de Ned y me dirigí al área donde están los abuelos en la cama, deje al abuelo Tobías para el ultimo, comencé a poner las cosas necesarias para su baño en el carrito, puse las sabanas limpias, un cambio de ropa, y me fui directo a su cuarto, toque para avisar que entraba, cuando vio que traía conmigo el carrito puso los ojos en blanco.

- Te dije que yo te daría tú ultimo baño abuelo –le doy una enorme sonrisa

- Pensé que lo olvidarías y me harías muy feliz si no me lo dieras –se cubre la cabeza con la sabana, me acerco a él quitando la quito de su rostro. comienzo a acomodar la cama para que no ocurran accidentes –jamás olvidaría darte un baño, así que tú hazme feliz dejándome darte el baño.

Comienzo por lavarle su escaso cabello mientras el comienza a platicarme sobre su esposa, de cómo fue que se conocieron, me cuenta de sus tres hijos, y como le pone triste que de sus tres hijos solo uno venga a visitarlo. Ya bañado, cambiado pongo la ropa y sabanas sucias en el carrito. lo pongo en la esquina de su cuarto, me siento en la orilla de su cama.

- No quiero que comiences a chillar, sabes que no me gustan las despedidas, las odio.




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