Capítulo 14. 2da Opción.

NamJoon sigilosamente siguió su trayectoria hacia la papelería. Desde su lugar en la camioneta observó al chico pelinegro de brackets salir de la misma con una carpeta bajo el brazo y una muchila colgando de su espalda. «Extraño» pensó NamJoon, «¿Por qué no metió los papeles en la mochila? ¿Prisa?».  Observó cómo el joven cruzaba la calle y venía exactamente en dirección a dónde su asunto estaba aparcado, NamJoon se colocó unos lentes y abrió la puerta del auto.

— ¿Yang Jeongin? —El chico alzó la vista encontrándose con el dueño de la voz y con el rostro de quien lo llamaba. — Soy el detective del NIS... —Mostró su placa—. Necesito hacerle unas preguntas.

Exactamente, no sabría cuando, pero de la nada ambos se encontraban sentados en una mesa de un jardín botánico. NamJoon sacó un par de cigarrillos junto a una caja de fósforos mientras el chico mantenía su vista clavada en sus manos que jugaban entre si encima de la mesa.

— Yo...

— ¿Eres amigo de Lee Know, no es así? Supongo que sabes que abrió un caso.

— Lo sé. —Respondió, NamJoon le dió un par de soplidos a la colilla que después dejó a un lado sin importancia.

— ¿Conociste a Han? —El niño volvió a asentir mientras sus manos se movían con más prisa. — ¿Cómo lo conociste?

— Fuimos compañeros de escuela en el último año. Después nos volvimos a encontrar en un grupo de gamers al que pertenecía. —Miró por un segundo al detective pero decidió continuar al ver que NamJoon aguardaba el resto de la historia—. Una semana después de mi llegada llegó Minho, ellos se volvieron muy unidos y nos hicimos amigos los tres.

— ¿Sabías que Lee Know y Han tenían una relación íntima? —Jeongin frunció el ceño. —Minho y Jisung eran pareja.

— Accidentalmente los escuché en una ocasión cuando hablaban de eso. Yo iba a ir de compras con Minho cuando los escuché hablar sobre su aniversario y de que se irían a vivir juntos.

— Supongo que te enojaste ya que por lo que sé te alejaste de Minho y Han por un tiempo. —El chico se tensó, ¿Como había dado en el clavo? — Dime algo. A ti... ¿Te gustaba Han? ¿Minho?

— ¿Qué? ¡No! ¡Por supuesto que no! Yo no sé nada, solo los escuché hablando de su aniversario, sentí que tal vez querían un tiempo a solas y que yo era un mal tercio por eso decidí alejarme un poco, no sé más nada, realmente no sé nada.

— Como sea. ¿Notaste algún comportamiento extraño en tu amigo?

— Solo aveces se ponía a hablar sobre un tal Jinwoo que era su amigo, y que tenía que cuidar de Zitlalli a pesar de que ella fuera mayor y lo odiara...

— ¿Sabes por qué no se llevaban bien si eran hermanos?

— No lo sé... El no contaba mucho. Realmente no sé nada.

NamJoon examinó a su sospechoso mientras respondía sus preguntas, durante todo el tiempo de la conversación sus manos no dejaron de moverse, pero sus palabras parecían ser convincentes, era notorio que ignoraba varias cosas, talvez falta de confianza por parte de la víctima y el mismo interponente de la demanda, Kim supo que su trabajo ahí estaba hecho.

« Hyung, SeokJin está aquí» —Escuchó a través de su audífono la voz de Jungkook.

— Bien, Yang, definitivamente nos volveremos a ver, por ahora, creo que puedes irte.

El chico asintió, hizo unas reverencias, se levantó a tropezones mientras hacía más reverencia y movió sus pies queriendo correr, pero las frases salientes de la boca del detective lo hicieron bararse.

— Solo Dios sabe lo que se esconde detrás de una cara que lo niega todo. —Y dicho eso, NamJoon se puso de pie dejando al niño en un pequeño transe.

Ya fuera de aquel pequeño conjunto de mesas, Kim sacó su pequeño bolígrafo para apagar su grabadora de sonido, no pudo evitar sonreír de lado ante tal acción suya, se sentía un poco aliviado y ahora se preguntaba cómo le había ido a su compañero primerizo.

A lo lejos, exactamente recargado en una de las yardas que rodeaban un árbol llorón junto a un estanque se encontraba SeokJin, el rubio chef sujetaba un pequeño abanico color negro con encajes blancos en la orilla, NamJoon se acercó a su Hyung y se dispusieron a hablar mientras partían hacia el auto.

— ¿Como te fue? —Seokjin formó una risita haciendo que NamJoon prestara atención con interés.

— Ese Seungmin, definitivamente no es el culpable. —Namjoon frunció el ceño descaradamente mientras veía a su Hyung abanicarse con tal objeto. —Contó todo con absoluto detalle y no dudó ni un instante en hablar.

El rubio negó varias veces con la cabeza, de pronto frenó el movimiento del abanico y se dedicó a perderse en sus pensamientos, NamJoon lo observó por unos segundos, hasta que su compañero reaccionó con una sonrisa burlona y siguió andando en dirección al carro.

— ¿Pasa algo?

— Nada, sólo pensaba que aveces las personas copian ciertos hábitos de sus padres. NamJoon, tú crees que... ¿Cada quien es diferente sin importar la educación que recibió?

El moreno lo dudó por unos segundos. Primero, no estaba tan seguro de eso, ¡No era un psicólogo! Y segundo, ¿A qué venía tal pregunta justo ahora? Decidió pues que lo mejor era contestar antes de que su Hyung desesperara y comenzara a buscar en el Internet cómo loco. Hizo una seña con la cabeza y ambos subieron al auto sin más.