Capitulo 9

Uno, dos, tres golpes insistentes en la puerta le hizo levantarse de aquella cama. Con una pereza se levanto cubriendo su cuerpo con la bata, había regresado de su encuentro con Alexis y ni tenía cabeza para nada así que después de un largo y relajante baño decidió descansar pero estaba claro que no estaban dispuesta a dejarla descansar  

—¡Voy! —grito al escuchar nuevamente los golpes para luego escuchar el timbre  

Al abrir se encontró con aquellos hombres, y solo pudo mostrar una mueca  

—¿Qué hacen aquí? —dijo dándose una media vuelta para ir a la cocina  

—Necesitamos hablar contigo  

Ella abrió el refrigerador para luego sacar la jarra de jugo mientras se servía ellos sacaban una carpeta y la ponían en la encimera  

—Tenemos un problema en la hacienda de Puerto Rico —ella saco el informe —, tenemos una plaga en los cultivos de café y caña. Mientras que la piña y la yuca fueron hurtados a media noche  

—¡¿Qué?! —grito viendo los informes —, ¿Y no han hecho nada?  

—Estamos tratando de parar la plaga —suspiraron —, y con lo del robo estamos tratando de averiguar quién fue 

—¿Qué hay del cultivo de uva? —los miro —, ¿Habido novedades? Tengo todavía la esperanza de que la uva pueda ser plantada hay para empezar a procesar en vino 

—Lo siento Alejandra —suspiro con aparente nostalgia para luego ser sustituida por una sonrisa —, pronto tendrás tu marca de vino. La uva está creciendo sin ningún problema solo hay que esperar  

—Excelente —sonrió —, entonces tengo que viajar mañana para Puerto Rico y checar de cera todos los problemas  

—Alejandra, no pudo ir hay muchas cosas que tengo que ver aquí —le comento Rubén —. En estos momentos me es difícil acompañarte

 —Pero Freddy puede acompañarme ¿Verdad Freddy?  

—Lo siento Alejandra, no puedo tengo trabajo, tengo que investigar donde una fraude  

—No queda otra que ir sola —dijo resignada  

—No, eso no Alejandra ¿No recuerdas la última vez? Casi te mueres por el exceso de trabajo, no puedes ir tu sola  

—¿Entonces que sugieres? No puedo dejar la hacienda a la deriva y menos ahora que por fin la uva está dando frutos 

 —No lo se, pero definitivamente no irás tu sola a Puerto Rico —decreto  

—Pues encuentra una solución antes de mañana, por que yo no pienso dejar mi hacienda a la deriva  

Afirmo con seguridad, sin dejarlo de mirarlo. Con esas palabras Rubén llegó hasta su oficina necesitaba checar unas facturaciones para que no hubiera problemas legales, pero conocía bien a Alejandra y era capaz de irse sola si no le conseguía alguien pero no era una decisión fácil por que tampoco podía dejarla con cualquiera aunque ella se hacia la fuerte no lo era, era claro que detrás de esa fachada estaba la persona que había conocido hace 7 años; la que aún sufría por el dolor que le causaron

  Frustrado soltó una suspiro antes de ver al principal enemigo de Alejandra entrar por la puerta  

—Lo siento —dijo aquel hombre —, pero he venido con los documentos que estaban en mi casa  

—Si, claro —extendió su mano para tomar la carpeta  

Rubén examinó cuidadosamente los documentos y asintió  

—Bien, parece que todo está en orden  

—Sr. Cáceres, el señor Cortez está aquí  

Escucho por el intercomunicador  

—En un momento lo atiendo Azucena, gracias  

Corto la  comunicación y vio la confusión de Alonso  

—¿Ha llamado al señor Cortez? Perdón por ser inoportuno —dijo rápidamente al ver su seño fruncido —, pero si en algo le puedo ayudar estoy a su servicio  

—Gracias, pero es algo relacionado con el campo y no creía que usted pueda ayudarme  

Se levanto acomodando su traje, no quería tener aquel hombre frente de él un minuto más  

—Claro que yo no sería de mucha ayuda, pero… conozco a alguien que es experto en esa materia si me lo permite —sonrió —, le puedo sugerir que venga hablar con usted y así usted decide  

—Bien, si así lo desea será bienvenido pero no le aseguro que sea lo que busco  

—Le a seguro que será lo que usted necesita —afirmó con una sonrisa