Capitulo 1:"un giro de 180 grados"

Andrea siempre solía ser una chica que se deba tiempo para muchas aficiones sin descuidar sus estudios. Vivía en una casa grande de 3 pisos, con un patio muy amplio en el que se quedaba su perro Bailey, un san Bernardo muy cariñoso y leal a su ama, a veces ella lo dejaba dormir en su cuarto en un lugar especial que le tenía a un lado de su cama.

Un dia después de haber almorzado, ella bajo a una biblioteca subterránea, por la cual veía a sus padres entrar por allí en las noches, cuando prendió la linterna de su teléfono para observar el interior de aquel lugar, se percató que habían libros con un dialecto antiguo que ella podía entender, incluso bolsas llenas de un polvo misterioso, además de objetos como varitas y demás, pero había un objeto en particular que llamo su atención, ese fue un collar que llevaba un símbolo de una media luna que contenía dentro una estrella un poco peculiar. Por un momento la invadió la curiosidad y la tomo, aquel símbolo se había transformado en una báculo mágico grande, el cual cambio también su vestimenta, color de ojos, color y largo de su cabello.

Ella al verse en el espejo como cambio su aspecto quedo muy sorprendida y comenzaron a invadirla dudas sobre si misma y su pasado.

Pensamiento de Andrea:( ¿Quién soy? ¿Por qué me ocultaron esto mis padres? ¿Realmente soy humana? ¿Quiénes son realmente mis padres?)

Reviso su reloj, dándose cuenta de que ya era la hora de que llegaran sus padres a casa, los espero con el collar puesto y sentada en la escalera que daba a las habitaciones.

Ellos al verla quedaron sorprendidos y trataron a toda costa de tranquilizarla, ya que el collar reaccionaba a sus emociones, solo fueron capaces de abrazarla entendiendo su angustia y su desesperación al saber la verdad de ella misma.

Siéntate aquí –le decía el padre mientras la sentaba en la mesa familiar y su madre le daba una taza de té caliente- te explicaremos todo.

Lo que tienes en tu cuello es parte de un descubrimiento de nosotros, viene del mundo mágico en el que vivíamos juntos-le dice su madre mientras se sentaba al lado de su padre- no quería que llegara este momento, porque aún no sabíamos si contártelo o no.

¿Por qué no contarme? –Decía ella mientras alzaba la voz muy desesperada- tengo todo el derecho de saber de dónde vengo.

Porque no sabíamos cómo reaccionarias ante un hallazgo de este tipo –decía la madre tratando de tranquilizarla –por favor entiéndenos Andrea.

Vamos niña, no reclames tanto y se respetuosa con tus padres –decía un oso volador que salía de su collar mientras ella se lo sacaba asustada- se agradecida de lo mucho que te protegieron.

¿Protegerme? ¿A mí? ¿De qué? -decía ella mientras miraba al oso sorprendida de que hablara y tratando de hallar respuestas-me protegieron de…

Unos seres mágicos, los cuales deberás enfrentar algún día, cariño –decía la madre mientras tomaba el collar y se lo pasaba en sus manos- es tu deber como heredera de la realeza.

Nosotros te ayudaremos, pero deberás tomar una importante decisión que será dejar atrás tu vida que has tenido hasta ahora o renunciar al hallazgo en tus manos y borrare tu memoria –decía el oso mientras la miraba seriamente- la última decisión es tuya.

Esa misma noche su madre le contó la historia de sus orígenes y cómo fue que huyeron de Lyas, Andrea quedo muy sorprendida y sintió una carga muy fuerte sobre ella, de la que no sabía tan solo hace unos segundos, finalmente acepto tomar el riesgo de cumplir el deber que le correspondía y salvar Lyas de aquellas personas que la dominaban actualmente.

Obviamente sería muy incómodo para ella convivir con un oso volador mágico al cual no sabía si otras personas podrían verlo como ella y decidió guardarlo de vuelta en el collar el cual llevaría desde ahora puesto siempre.

Desde luego su misión no sería nada fácil y para empezar ella debería aprender hechizos cortos como hacer polvos mágicos, los cuales vendía su madre en su tienda.

Para empezar con tu entrenamiento, iniciaras haciendo hechizos de ilusión –decía el oso volador saliendo del collar y mostrándole los ingredientes, además de la forma de como mezclarlos-estos hechizos a pesar de ser muy básicos para una niña como tú, pueden provocar un efecto de alucinación masiva en una persona.

Debes tener cuidado con lo que usas y a quien se lo das –decía la madre mientras recogía un frasco para vendérselo a una persona que estaba fuera de la tienda.

Madre ¿Cómo es que la gente que viene a comprar tus productos y no sospecha de nosotros? –Preguntaba Andrea mientras la miraba fijamente- Es extraño que vengan a comprar aquí.

Porque no solo hay personas humanas merodeando por aquí, también hay gente de otras dimensiones y otros mundos como nosotros –decía su madre mostrándole un holograma de la tierra – mi tienda no la puede ver gente humana común y corriente.

Igual debes tener cuidado, porque tus enemigos pueden estar más cerca de lo que crees –decía el oso volador mientras la observaba con mucha atención como lograba hacer en el primer intento el hechizo que le enseño- oh que sorprendente