Ángel Ciego 9. Memorias

Star Wars. Un héroe de otro Universo

Mientras en el Templo Sagrado ya casi era la hora del almuerzo, Mr. Popó preparaba la comida para todos, Chewie andaba aburrido por el lugar hasta que su olfato lo guía a la cocina.

— Grrr...

Mr. Popó lo miró sin inmutarse, fue a buscar un condimento, el tarro estaba muy alto, el wookiee se acercó para ayudarlo, pero el otro se le adelantó, saltó sin esfuerzo, tomó la especie y siguió cocinando. Chewie se quedó dónde estaba hasta que el cocinero lo miró, le apuntó una lata, el gigante la tomó y se la pasó.

Al atardecer, Luck y Han se prepararon para volver al Templo.

— ¿Nos vemos mañana, dama? — sugirió Han.

— Sí, quiero ver que rastros dejó en su nave el atravesar el agujero negro — aceptó Bulma.

— Llevarás a Trunks contigo — ordenó Vegeta que justo pasó por el lugar.

— No seas celoso — dijo melosa su esposa.

— ¿Celoso yo...? — el príncipe de los sayayin miró para otro lado, con los brazos cruzados — pasas poco tiempo con el mocoso desde que ayudas a... estas personas.

— Está bien, como diga mi Príncipe — sonrió la mujer.

— Los paso a buscar entonces — se ofreció el pirata espacial.

— Trunks puede ir volando, Iz ¿Me puedes llevar tú? Así aprovechas de ir a ver a tu... "amigo" — terminó la científica con sonrisa maliciosa.

— No bromees — rebatió molesta Izbet — es mi amigo nada más ¿Verdad Luck?

— Exacto... solo amigos — respondió sonrojado.

— Sí, seguro — insistió la dueña de casa — Han, nos vemos mañana.

Izbet se fue molesta, le incómodaba cuando Bulma se las daba de casamentera.

"La otra vez fue con Yamcha, ahora con este jovencito. Sé que soy mayor, gorda y ciega, nadie jamás podría enamorarse de mí — pensó en Piccolo — ¿Dónde diablos se metió? Quería explicarle exactamente lo que estoy haciendo para que no piense lo que no es — luego de meditar un momento — que estúpida soy, a él no le importó en ese sentido, solo somos amigos, siempre me lo dice".

Luego que todos se fueron, y el lugar quedó tranquilo, una figura se retiró del jardín lo más sigilosa que pudo.

Al otro día en la mañana temprano llegaron las mujeres y el niño al Templo.

— Hola Han ¿Y Chewie? — a Trunks le gustaba tomarse de los brazos del wookie y que dieran vueltas.

— Como siempre está con Mr. Popó, le ayuda a preparar el desayuno para todos.

— Voy con ellos — el niño corrió a la cocina.

— Hoy quiero llevarte a un lugar muy lindo en esta época del año, que es muy especial para mí — explicó Izbet al aprendiz de jedi.

Bajaron en el avión, luego fueron en auto a su cabaña, pero en el camino se encontraron en el momento justo que se produjo un choque entre un auto y una camioneta, los del vehículo mayor salieron sin problema, pero la mujer del auto quedó atrapada.

— ¿Qué pasa? — preguntó la mujer ciega.

— Hubo un choque, me parece que hay una persona que no puede salir — explicó el joven.

— Llévame por favor... ¡Luck! — él fue al lugar del accidente solo.

El jedi llegó al vehículo cuando éste ya estaba en llamas, nadie más se acercó por miedo a la explosión que podría producirse. La mujer ciega trató de ir a ayudar también, pero por el terreno su bastón no le permitió ir rápido. El joven logró soltar el cinturón que estaba trabado y sacó a la persona que estaba inconsciente, cuando se alejó unos pocos pasos la explosión se produjo.

— ¡¡¡Llluuuccckkk!!! — gritó la medio demonio al escuchar el fuerte ruido.

Pero el aprendiz uso la Fuerza para formar un escudo y desvió el fuego, llegó la ambulancia, la mujer solo tenía heridas menores, le agradeció mucho el haberla salvado. Los periodistas que llegaron a la emergencia lo rodearon.

— ¿Por qué arriesgó su vida de esa manera? — preguntó un periodista.

— No quería que la señora muriera, eso fue todo — contestó nervioso el rubio por todos los micrófonos y grabadoras que lo acosaban.

— Con su permiso... — dijo la ciega apartando a las personas — ¿Estás bien?

— Srta. Izbet ¿Es su amigo? — preguntó otro reportero.

— Sí.

— ¿También es alumno de Mr. Satán? — le consultaron.

— No, es un amigo mío de lejos.

— ¿Podemos consultar...?

— Disculpen, estamos atrasados para una reunión, si nos disculpan — muy bajo a su amigo — vamos o no nos dejarán en paz.

Debido a eso llegaron un poco más tarde de lo proyectado a la cabaña, al lado del lago.

— Tenías razón, es precioso este lugar — el joven admiró el paisaje.



#7088 en Fanfic

En el texto hay: sexo, aventura, sexo amor desamor

Editado: 06.03.2020

Añadir a la biblioteca


Reportar




Uso de Cookies
Con el fin de proporcionar una mejor experiencia de usuario, recopilamos y utilizamos cookies. Si continúa navegando por nuestro sitio web, acepta la recopilación y el uso de cookies.