Sin previo aviso, la alarma sonó. Miró la hora y ya era seis en punto. Lucia se levantó de la cama sin ánimos, solo dejo que su madre se preocupara de todo mientras ella se dedicaba a lo suyo. Miro al espejo, no supo por que se veía fatal. Sus ojos se notaban cansados y hasta le aparecieron las ojeras.
—Que horrible...¡Y así iré al colegio! Que pesadilla...y será volver al lugar donde se me parte la cabeza. Ahora debo prepararme para...—dice Lucia al mirarse en el espejo. La detuvo la voz de su madre.
—Lucia...¡Vamos apresúrate! —dijo Elizabeth. Esta vez no subió. Algo habrá pasado para ella no atinase apresurarse como siempre lo hace.
—¡OK!—contestó Lucia aunque sin saber si lo había escuchado.
Cuando Lucia bajo, ya lista, su madre la limitaba como si trataba de una despedida.
—Y pensar que vas creciendo. Que cada día te irás convirtiendo un una mujercita...mi niña.
—Má...¿Está bien?.
—No te preocupes, ella esta bien es solo que deberá afrontar la vida. Que te vaya bien Lucia— intervino su padre al abrazar a Elizabeth, haciéndole un guiño para retirarse antes de que empeorase la situación.
—Adiós— dice Lucia al abrir la puerta y solo dejando a su madre y padre solos.
Cuando por fin llegó al colegio. Sintió que no quería estar allí, por que la pasaría sola por todo el día. Y aún más con las que se hacían llamar amigas. Todo por que estuvo una semana con un chico que era diferente.
Cuando visualiza su salón, entró y se dirigía a las últimas filas. Donde todo es tranquilo sin que nadie empezará a molestar.
Mientras el profesor daba las gracias por ir de vacaciones al campamento, que se había inaugurado con el propósito de que otras escuelas socializaran. Para evitar las peleas que siempre se hacen en el parque del lugar. Lucia ni siquiera se había "hablado con otras personas" sino que se había hablado con una sola y única persona que no verá. Jake Williams.
En cuanto a su mundo real lo único que depara es el estudio y acceder a la facultad. Que todavía faltaba para que ella finalice el colegio. Cuando mantenía su mirada en el libro que siempre se lleva consigo, pudo notar que las últimas hojas habían sido arrancadas del lugar. Dejando en sí un disgusto para que lo leyera. Sobresaltada lo dejó bajo la mesa. Solo especulo que la persona debió ser, fue alguien cercano a ella.
Y esa persona podría ser la que se acercaba hacia Lucia.
—¿Lucia podemos hablar? —dijo Isabell al sentarse a su lado.
— Bueno...pero sé clara , no como en el colectivo, donde me ignorante todo el tiempo—replicó Lucia al mirarle con odio.
—La otra vez fue un malentendido. Sé que estas enojada y no te culpo. Es que debo explicarte seriamente algo que es preocupante. Y espero que atiendas bien por qué la persona con el que tú misma estuviste cerca, en aquella vez, en el campamento. Será duro, pero no es que te quiero arruinar "la relación que tuviste con él". No es recomendable estar con él . Por que el es...—se detuvo al oír el timbre, que indicaba que ya era hora de ir a los salones— Mira, te lo explicaré mejor adentro. Y quiero que me escuches.
En el salón, retornó el mismo camino, y esta vez a Isabell cerca suyo.
—Ok , esta vez sin interrupción alguna. Jake Williams no es la persona quien insinúa ser. El proviene de otro sitio— dijo Isabell al prestar atención al profesor.
—Si él me dijo.
—¿Te dijo lo que realmente es? —dijo Isabell alterada.
—El...mismo dijo que es lejano . Pero no me dijo exactamente. ¿Por?
—El solo te persuade , hasta llegar el momento en que te use—inclino su cabeza a su libreta y luego arrancó de ella una hoja. La cual empezó a escribir algo que ella no pudo notar —Mira bien, léelo en voz baja .
Lo entregó doblado en dos. Lo que leyó hizo que quedará impactada.
<El es un Demonio, que mata a seres como nosotros>
—¿Qué?
—El proviene del infierno, solo te utiliza para comerte, eso hacen— dijo Isabell en voz baja.
—No entiendo.
—Pues, deberás. Él no es un chico inocente. Y me alegro que no vaya a este colegio. Por que de ser así, debería tomar medidas drásticas.
—Y esto es lo que me querían decir "Un chico vendrá a comerte por que eres un chica".
—No necesariamente se "coma chicas". Si es joven, mucho mejor para un demonio— dice al mirar de nuevo al profesor .
—Entonces podría asesinar hasta jóvenes, pequeños. ¿No?—dice Lucia al tragar saliva.
—Si son bebés, a ellos les da igual.
Ella lo decía como si tuviese experiencia. Lucia la conoce hace mucho, y sin embargo ella trata con estas cosas. Hace que piense mejor con quién debe tratar. Hasta que recordó el libro y las páginas arrancadas.
—¿Sabes quién podría hacerme esto?—le dice Lucia al mostrarle el libro con las páginas arrancadas.
—¿Qué le paso?...
—Es lo que yo me preguntó. ¿Quién me tiene rabia para hacerme esto?
—Lo siento pero no se que le paso. ¿Y que decía las últimas páginas?.
—Era sobre un chica que vio algo más que la muerte. Si no que vio a Dios. Y tenía que ser justo esas—dice angustiada.
—Ya, de que seguro habrá otro libro al que puedas leer. Total si te gustan tanto podrías comprar en la librería, del que se puede ver que tiene ese tipo de libros.—dice Isabell al querer consolarle.
—Está bien. Espero que lo tenga.
—Entonces...¿Me perdonas?.
—Si le dices a Brithany que también me deje de ignorar.
—OK, pero no pienses mal. Se va arreglar.—dice Isabell al levantarse.
Pero cuando justo ella lo hace, toca el otro timbre. El que indicaba que deberían partir.
De lejos noto que discutían. Parecían una pareja de novios que lo hacían de manera sencilla pero feroz.
Lucia sintió que lo que le habían dicho eran algo irreal. «¿Jake Williams, un demonio, me habrá engañado realmente?» Su mente se sentía muy inestable, iba a explotar de miedo si esas palabras fueran ciertas. Pero por otra parte debería afrontarlo ella misma.
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Editado: 19.06.2022