CAPITULO 8

Luego de varios días de camino nuestros valientes guerreros se acercan a una tierra más plana con árboles grandes que se elevan hasta el cielo un gran territorio conocido hasta nuestros días como la sabana... una vez adentrados en este territorio aparentemente desolado y tupido una señal característica de la ranchería, un sonido como ave de rapiña atraviesa el bosque y llega hasta la planicie. Era el anuncio de la llegada del gran cacique mara, de inmediato es informado el gran jefe !Cinera! comandante de la región que se creía muerto en batalla al parecer si fue herido y el con un grupo numeroso de acólitos se asentaron en la región creando así un batallón para defender al resto del pueblo, un bastión cuyos recursos son indispensables para que el Cacique termine su viaje.

una vez dentro del fuerte el cacique casi como un prisionero fue presentado ante el Jefe Cinera, en ese momento estando en el patio de reunión se aproxima de la vivienda principal una sombra que parecía una especie de gigante la figura se asemejaba un ogro al acercarse aquel hombre de piel oscura cabello lacio negro azabache largo haciendo juego con la increíble ornamenta, que le atribuía al guerrero poderes místicos una cantidad increíble de huesos de animales y humanos incluso, modelados con gran precisión conformaba el traje y armadura a la vez de Cinera antiguo comandante de la región

-¿Quién te envió? pregunto Cinera con un tono superior que retumbo en el patio de reunión

-Soy el único y legitimo sucesor de mi padre el gran cacique octopeya baruk taa!.. El cacique sabio de quien se trataba este personaje, en las leyendas de su pueblo escucho de la voz quebrada de los ancianos del pueblo su historia, sabia la grandeza que representaba aquel personaje que estaba delante de él..

-AAhhhhahahahhaha grito exclamando aquel imponente indio levantando la mano derecha y ordenando de inmediato desatar a aquel joven 

-Cinera inmediatamente se acercó y abrazo a aquel joven y Dijo yooo, yo luche junto a tu padre para librar a la sierra del guasare por 30 años contra los enemigos de entonces y jure que lucharía a su lado por todas las generaciones que tenga que ver y hoy Maleiwa te ha traído para que yo cumpla mi promesa.