Me desperté y me encontraba sola en una cama que no era la mía. Me senté mirando a todos lados tratando de recordar.
La habitación de Tanner estaba perfectamente acomodada.
De repente la puerta del cuarto de baño se abrió y mi hermano salió con la toalla atada a la cintura.
— Oh Ris… buenos días —dijo metiéndose en su closet.
Volví a mirar el despertador y era más temprano de lo normal.
— ¿Por qué te despiertas tan temprano? —dije mirando el sol que recién aparecía.
— Me gusta hacer algo de ejercicio —dijo acercándose a una cómoda.
Hasta que a mi mente vino lo que había sucedido en la noche. Volví a recostarme y taparme de nuevo con las sabanas.
— Vamos Ris levántate hoy es un bonito día —sentí como me quitaron las sabanas
Mire a Tanner con el ceño fruncido, su pelo estaba mojado aun y me miraba con una sonrisa.
¿Por qué se veía tan atractivo?
Tape mis ojos con ambas manos y sentí como clavaba sus dedos en mis costillas provocando que comenzara a reírme.
— ¡Ya! ¡Está bien! —exclame tratando de recuperar el aire.
Me puse de pie y Sali de su cuarto no sin antes darle una última mirada fulminante.
Entre a mi cuarto y mire hacia la ventana, no quería acercarme asi que me bañe y me vestí metiendo mi ropa para entrenar en un bolso.
Baje las escaleras encontrándome con Nora en la cocina el lugar donde siempre estaba.
— Buenos días Ris —dijo ella sonriente con un plato con tostadas y mantequilla de maní.
Al ver lo que había en el plato mire con desagrado todo eso eran puras calorías que no debía comer.
— Buen día Nora —Tanner también apareció sentándose a mi lado.
— ¿Descansaron bien? ¿Cómo les fue anoche? —pregunto Nora— Ris ¿Están bien las tostadas?
Ella y mi hermano me miraron, yo asentí.
— Si no tengo demasiado hambre… —dije alejando un poco el plato.
Tanner me miraba fijamente y con seriedad.
— Debes desayunar Ris —dijo el señalando el plato.
— No tengo apetito —el levanto una ceja.
— ¿No te gusta? ¿O piensas que engorda? —volví a mirarlo al darme cuenta que me estaba conociendo mas de lo que esperaba.
Nora se acercó para tomar el plato pero el la detuvo.
— Come las tostadas Ris —dijo el señalando nuevamente el plato.
Suspire y miré a Nora que miraba con una sonrisa. Me puse de pie y tome mi bolso.
— Dije que no tengo hambre —dije para luego salir de la cocina.
— ¡Ris! —exclamo el desde la cocina.
No me volví y Sali de casa rumbo a la de Hazel. Llame a la puerta y una mujer de cabellos negros y demasiado alta estaba enfrente mío.
— ¡Rissie! Que bueno que estas aquí —exclamo ella haciendo una seña de que pasara— ¡Hazel apúrate cariño! ¡Ris esta aquí!
A los segundos mi amiga bajo las escaleras con una sonrisa y sus nuevos anteojos.
— Wow Haz te quedan preciosos —dije mirando sus nuevos lentes.
— Lo se ¿Qué sucedió? ¿No iras con tus hermanos? —dijo ella al verme allí presente.
Negue con mi cabeza y las dos salimos de la casa, y caminamos rumbo a la preparatoria.
Hazel era demasiado habladora a comparación de mi, yo solía ser mas callada que ella.
— ¿Me dirás que fue lo que ocurrió anoche? —preguntó de repente.
Dude por unos segundos si contarle o no, mi teléfono vibro y vi que tenia un mensaje.
Tan
Espero que comas algo en el camino
Ve con cuidado
Tan fuera
Me reí al ver su mensaje a pesar de que había veces que no podía caer en la cuenta que el había sido el sujeto con el apodo de RexArbol.
Ris
Lo se, no soy una niña >:(
Iré con Hazel no te preocupes
Ris fuera
Volví a mirar a Hazel que caminaba con la mirada hacia el frente.
— Nunca me dijiste que fue lo que paso con ese chico de Anonim —dijo ella y se detuvo— ¡Oh vamos Ris! ¿Ya no confías en mi?
Ella puso cara triste entonces no podía resistirme a su drama.
— No es la primera vez que siento que me persiguen —dije mirando hacia todos lados.
— ¿A qué te refieres? —pregunto levantando una ceja.
— Alguien me esta siguiendo yo… no lo se —hice una pausa y la mire a los ojos— pienso que podría ser Paul.
Ella frunció el ceño y poso ss manos en mis hombros.
— ¿Estas segura de eso Ris?... ese patán es capaz —las dos continuamos el camino— ese tipo esta demente. ¡Oh Ris! Tengo miedo por ti.
Las dos apuramos el paso hasta llegar al instituto.
— Por favor no se lo digas a nadie —ella asintió— ¡Ni a Dustin! No quiero que se preocupen por mi…
Hazel apretó sus labios y me miro pensativa.
— Evita quedarte sola hoy tengo practicas con el grupo de música y termina justo después del entrenamiento… podemos regresar juntas —dijo ella con una sonrisa a lo que yo asentí.
Las primeras horas de la mañana pasaron al igual que la hora del almuerzo que compartíamos con los chicos ya que Hazel parecía no querer separarse de Dustin.
Me dirigí hacia el campus, me cambie de ropa y Sali. A lo lejos vi al equipo de porristas estaba reunido.
— Hola Ris ¿Cómo estas? —pregunto apareciendo de la nada Gared.
Me quede sorprendida por su repentino interés en saber sobre mi.
— Bien… eso creo —dije algo dudosa.
— ¿Qué te pareces si uno de estos días me aceptas una salida? —dijo a lo que yo me quede en shock.
— ¡Gared! —exclamaron a sus espaldas.
Entre los chicos vi a mi hermano que miraba con el ceño fruncido.
— Hablamos luego pero piénsalo ¿Si? —dijo el para luego salir corriendo.
¿Acaso había sido real aquello que había pasado?
— Ris necesitare tu ayuda en esta semana debemos tomarnos unos minutos extras para planificar habrá una competencia de porristas de todas las preparatorias y estaba pensando en la posibilidad de inscribirnos —dijo Sophie con toda la emoción.
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Editado: 16.08.2022