Sonreí al ver lo que traía Tanner en sus manos.
— Mi helado favorito —dije sonriente y el me extendió el conito.
— Te conozco —el me guiño el ojo y se sentó a mi lado.
— Yo quisiera que mi hermano me tratase asi —comento Marcus que lamia su helado de chocolate— el cabron lo único que dice ¡Quítate marica! ¡Marica! ¡No me mires se me puede pegar tu peste!
Mire a Tanner y el entrecerró los ojos, y me sonrió de manera cómplice.
<< Si tan solo supieras Marcus >>
— ¿Te trata como si fueras a contagiarle… ser homosexual? —dije levantando una ceja.
— Ese tipo muestra sus inseguridades quizás también es gay —dijo Tanner agarrando con la cucharita algo de helado.
— ¿Tú crees? —Marcus se quedó pensativo.
— Si —afirmo mi hermano.
— Masculinidad frágil —dije riéndome de la situación.
Hice silencio recordando a Hazel y las veces que nos reíamos de los tipos que se creían muy hombres y tenían fobia a los gays.
— Hazel se arrepentirá ya lo veras —dijo Tanner como si supiera en lo que estaba pensando.
— La soledad le servirá para darse cuenta —continuo Marcus— además quizás el imbécil de Dustin le hizo algo es muy drogadicto.
— Lo van a meter en un centro de rehabilitación —comento mi hermano.
Hazel debía estar con el corazón roto era obvio que necesitaba a su amiga.
Terminamos nuestros helados, llevamos a Marcus a su casa y luego regresamos camino a nuestra casa.
— Iré a ver a Hazel —dije después de bajarme del auto.
— Vamos te acompañare —dijo el para luego caminar a mi lado.
Sonreí y lo miré unas cuantas veces, Tanner era perfecto o eso creía. Pero eso aparentaba y conmigo era alguien tan dulce.
Nos detuvimos en frente de la casa de Hazel, me acerque para llamar a la puerta y solo estaba Gaby la empleada.
— Hola Gaby —dije saludando con una sonrisa.
— Muchachita hace tiempo no la veo por aquí… pasa la niña esta arriba —dijo ella sonriente.
— Adiós… te llamare —dije sacándole las palabras de la boca.
El asintió y me hizo un gesto de despedida, llevaba su mano al pecho y con sus dedos señalaba dando dos golpecitos en su corazón.
<< Te amare siempre, hasta que deje de latir >>
Subí las escaleras y me dirigí al cuarto de Hazel, abrí la puerta y solo vi a Hazel en el suelo llorando desconsoladamente.
— ¡Hazel! —dije al verla abrazando sus piernas.
No dude un momento en abrazarla, ella levanto su cabeza y me abrazo.
— Lo siento fui una estúpida —dijo mientras sollozaba en mi hombro.
— Todos nos equivocamos Hazel —dije sin dejar de abrazarla.
— Tenias razón y yo no te creí… —nos separamos un poco y ella tenía sus ojos hinchados de tanto llorar— no tenía… no tenía la suficiente fuerza para mirarte a la cara perdóname.
Negue con mi cabeza aguantando las ganas de llorar.
— Te quiero eres mi mejor amiga y siempre lo serás —ella volvió a abrazarme— te extrañe muchísimo.
Las dos nos quedamos por un largo rato hablando y tratando de distraer a Hazel.
Hasta que cayó la noche, las dos nos recostamos en su cama mirando al techo.
— Extrañaba reírme contigo —dijo ella.
— Yo también extrañaba esto… Marcus es demasiado dramático pero es un buen amigo —dije recordando las palabras de Marcus.
— Te quiere mucho porque días atrás vino a decirme que era una perra porque tu si eras mi amiga y estaba prefiriendo a un tipo que a mi amiga —mire a Hazel que tenía una sonrisa— y que no quería verte mal. Por mi ceguera y negación.
Me reí imaginando esas palabras saliendo de la boca de Marcus.
Mi teléfono que estaba sobre la mesita de noche vibro.
Tantan
Esta todo bien?
Te quedaras con Hazel? O quieres que vaya por ti?
Rissi
Todo bien :)
Si me quedare con ella.
Tantan
Cuídate
Te amo mi hermosa :3
Si necesitas llámame a la hora que sea.
Rissi
Te amo y descansa
Sueña bonito
O sea sueña conmigo.
Me sentía tonta mi mirada de enamorada a mi teléfono, pero Tanner me hacía sentir feliz.
— ¿Y esa carita? —pregunto Hazel apoyándose sobre mi hombro.
Hice silencio y la mire con una sonrisa pero solo deje mi teléfono a un lado. No podía decirle aun no podía decirle algo asi.
— ¿No me dirás quién te saca esa sonrisa de boba? —ella movía sus cejas de arriba abajo.
— No imagines cosas… es solo Tanner —dije a lo que ella dejo de mover sus cejas.
— Ese tonto te saco una sonrisa? —cruce mis piernas sentándonos enfrente— aunque a decir verdad el es el único en tu familia que es así de atento o por lo menos se interesa por ti.
No dije nada y solo asentí, no podía darle detalles de lo que ocurría.
— Mi hermana vive en otro país y nunca me manda un maldito mensaje… —se tiro hacia atrás— ni siquiera se preocupa por mi.
— No digas eso mi hermana desde que se fue a vivir sola casi ni habla con nosotros —me reí para luego recostarme a su lado.
Al menos estábamos juntas y eso era lo que más me importaba.
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Editado: 16.08.2022