LUKE HOWLAND
SEPTIEMBRE 2015
De todo lo que pasó en mi vida, no todo fue tan mal, de hecho, mentiría si negara que haber tenido
algún tipo de relación de amistad con Zev había sido la peor decisión que tuve, porque no era así.
Aquello creó algún tipo de amistad con su mejor amigo, Neisan Collingwood. En lo poco que
habíamos convivido ambos, pude saber que él no era el tipo de personas que juzgaban a los demás
por lo que otros hablaban de ellos, Neisan era fiel partidario de que las apariencias no decían la
historia de alguien, sino que, era un gran impulso para poder meterse debajo de la piel de cada uno.
Él nunca fue de hacer las cosas a medias, mucho menos abandonar la partida cuando veía que las
cosas ya no iban a funcionar, veía su vida como el rugby, él era el número 7 y quizá importa una
mierda, pero le gustaba relacionar algunas cosas con ello, Neisan siempre tuvo pleno conocimiento
de que si su mejor amigo se enteraba de que nos llevábamos, las cosas podrían haber salido
demasiado mal.
La primera vez que nos hablamos fue porque Zev nos presents. Me cayo bien en ese momento,
Neisan era tan diferente, no el típico engreído por ser sub capitán del equipo, de hecho, Nguyen
tampoco era así.
En los últimos meses, aún me seguía hablado con él, más que antes y ambos sabíamos la razón, Zev
se había alejado demasiado de él una vez que comenzó a llevarse con Michael, y por alguna extraña
razón, Neisan acompañaba a Weigel.
Al inicio creía que él tenía un pequeño enamoramiento por la chica, aunque al final terminaba
apaciguando mis dudas cuando hablaba acerca de una chica que formaba parte del equipo de
natación.
Esto me hacía recordar cuando todos pensaban que Hasley y Zev estaban en algún tipo de relación,
pero yo tenía conocimiento sobre ellos, desde años ambos eran muy buenos amigos, tanto que casi
nunca los veía separados y, sobretodo, porque Zev estaba locamente enamorada de mi prima, Jane.
El suspiro agotador de Neisan me sacó de mi pequeña huida de la realidad, ocasionando que toda mi
atención se centrara en él.
—Ahora, ¿en qué te ayudo?— inquirió, tirándose sobre el sofá.
Nos encontrábamos en la casa de André, siendo sinceros; necesitaba nuevamente su ayuda. El
moreno le brindó una cerveza a lo que él negó soltando una disculpa.
—Es jugador— mencioné con burla —. Cero hábitos malos para la salud.
—Creo que soy el único que cumple ese requisito— rió —. Todo el equipo fuma y bebe, luego
están tirados en el suelo porque se cansan rápido cuando el entrenador ordena que demos seis
vueltas al campo.
—¿Eres el conductor asignado en cada borrachera?— André se burló y él asentí encogiéndose de
hombros—. Uy, yo quiero uno, siempre tengo que traer a una chica a casa conmigo para que me
guíe. Sacrificios de la vida.
—¡Vaya que es un gran sacrificio para ti!— exclamé, tomando el comentario de mi amigo con
morbo —. No le creas, es un gran hijo de puta que le gusta traer diferentes chicas a su cama para
tener coito.
—¿Coito? Oh, esplendido hombre, pero que peculiares palabras usa usted— Neisan dijo, tomando
un tono fino y una postura presentable.
—Todo un caballero francés— André se unió.
—Váyanse a la mierda — mascullé hacia ambos.
—Y hasta ahí llegó el esplendido hombre — mencionó el castaño riendo.
—Y caballero francés— completó el moreno.
Rodé los ojos y saqué mi celular para mirar el mensaje de texto. Yo preferiría hablar miles de veces
frente a la persona que por medio de una pantalla, me gustaba ver el gesto que hacían o la forma en
que tartamudeaban, descifrar cuando mentían y cuando se avergonzaban de decir la verdad. 13
Neisan realmente fue alguien quien quiso ver bien a Hasley Weigel.
He de confesar que todo ese tiempo en el que estuve con ella, él me había ayudado. Neisan fue quien me dijo que Michael tenía la foto en donde Weigel y yo nos estábamos besando. Neisan me había dicho mucho antes que en ese partido él le pediría que fueran novios, que aquella noche de la fiesta, Michael la había invitado para poder liarse con ella; Neisan me había llamado por celular para decirme que ambos estaban a solas en la casa de Hasley.
[...]
NEISAN COLLINGWOOD
SEPTIEMBRE 2015
Luke tecleaba rápidamente sobre la pantalla táctil, André y yo intercambiamos miradas y
comenzamos a tener una conversación sobre las posibilidades de que la razón por la que él estuviera
tan entretenido fuera por una chica. Hasley.
Por Dios, ambos sabíamos que Luke odiaba los celulares, tenía una opinión algo amarga y hostil
hacia los pequeño aparatos, él decía que servían como una fuente de comunicación, pero que con el
mal uso volvían inútiles a los humanos. Vaya, sonaba como un completo anciano, casi como el
profesor que me daba ética.
Luke siempre había tenidos diferentes pensamientos acerca de muchas cosas que en día los
adolescentes disfrutaban como un completo postre delicioso, sin embargo, casi siempre tenía razón,
los valores, la moral, la dignidad y la vergüenza ya no eran parte del hombre. Él podría ser un gran consejero, pero cuando sabías como estaba su vida te preguntabas, ¿cómo es que no era capaz de
manejarla?
Sin embargo, no era tan cerrado como antes. Había dado un cambio muy notable, estaba más
estable con sus emociones y eso era magnifico porque él necesitaba paz después de todo lo que
vivió -y actualmente vivía-.
André y yo sabíamos que todo esto se debía a Hasley. Estaba haciendo algunos cambios en su vida,
pero había un problema. Ella tenía novio. El nuevo amigo de Zev que salió de la nada fijándose en
la chica, estaba consciente de que casi todo el instituto la conocía por ser la mejor amiga del capitán
de fútbol americano y muchos la confundían como su novia, pero eso no quitaba el hecho de que
Michael se hubiese fijado en ella de la noche a la mañana, digo, Hasley no era fea, para nada, era
una chica muy guapa, pero Michael Jones tenía a muchas chicas detrás de él, Ginni Sandberg fue su
ex novia, ella era el prototipo de la chica perfecta... y él la engañó cinco veces. Casi nadie lo sabía
porque la chica era tan benévola que prefirió no hacer escándalo, pero alguien que es amigo del
grupo de amigos de Michael se le es fácil enterarse de los chismes.
Yo tenía en mente que él no quería nada serio, sólo le gustaba dar una imagen ante las personas para
quedar bien ante ellos, pero Michael Jones era un completo maestro de caretas, aunque no podía
decir nada al respecto porque Zev confiaba en él y su amistad había crecido en tan poco tiempo, me
preguntaba qué esencia tenía el pelirrojo para enredar a las personas como quería.
—Dirás que sólo te utilizo — Luke habló causando que fijara mi atención en él—, y posiblemente
así sea.
—No te sientas mal, siempre lo hace conmigo. En todo momento— André intervino poniéndose de
pie—. Iré por otra, necesito más combustible.
Yo reí y negué lentamente. Me volví hacia el rubio y fruncí mis labios.
—¿Qué ocurre, R.H.? — pregunté.
—¿Sabes si hay rumores sobre...? — dejó la pregunta en el aire y entendí.
—Uhm— murmuré—, sí. De hecho, Zev ya sospecha, Hasley se preocupa mucho por ti y cuando
no está con Michael ni con él, todas sus teorías caen en ti— rodé los ojos y me quedé pensando un
rato antes de proseguir—. ¿Sabes? Michael casi nunca pregunta por Hasley, es muy desinteresado
sobre la relación que tienen hasta que Zev le pregunta algo al respecto.
—Es un hijo de puta— afirmó—. No sé porqué sigue con ella cuando no quiere nada serio, pero lo
peor es que no entiendo a Weigel, es patética. Su relación es estúpida.
—No tiene pies ni cabeza, es absurdo— le doy la razón—, ¿siempre la fuiste a visitar?
Recuerdo que hace dos días le había dicho que Michael estaría con Hasley, ella me había
comentado que iría a la casa de él después de clases y luego comerían en la suya, ¿lo malo? Su
madre no estaría. Yo sólo le pasé la información a Luke.
—Súper. Se fue hecho una furia porque Hasley decidió hablar conmigo— dio una carcajada.
—Eres malo— comenté y André regresó con nosotros a la sala tomando asiento.
—Algo— hizo una mueca—. Creo que voy a suspender historia.