Apocalipsis: Misión Herencia

Versículo 22.- La Nueva Era.

15/07/2017 07:00 am

Punto De Vista Dan Cross:

El lugar era extraño oscuro y frio, pude reconocerlo de inmediato, era el mismo lugar donde había reclamado mi espada… espada que por cierto creo que me robaron... La diferencia es que parecía ser un lugar apagado, ninguna antorchar se encendía ante mi presencia… cosa que me pareció raro… pero justo me di cuenta de que estaba en un sueño de eso, de los cuales me muestras cosan extrañas.

— ¿Qué necesidad tiene mi presencia aquí? — me pregunte a mí mismo.

Camine por el pasillo de piedra pulida que parecía mucho más destruido y viejo de lo que recordaba, donde debía de estar la piedra donde guardaba la espada solo había un trono de piedra negra a medio destruir lleno de espadas rotas y un esqueleto humano con una corona de oro sin brillo y en donde están sus muñecas, solo había de grilletes y cadenas de acero de color negro.

Me mantuve expectante ante tal escena, me parecía más curioso que extraño, las cuencas del cráneo del rey muerto de alguna forma, quizás por la posición del cráneo, miraban expectante hacia arriba, como si hubiera algo esperado.  

Antes de que pudiera reaccionar, una llama roja, en sentido literal un fuego de puro color rojo comenzó a arder encima de la corona. No había nada sonido típico de cualquier llama cuando ardía, en cambio solo se escuchas tan leves susurros que no se entendías prácticamente nada.

La llama roja se elevó encima del trono y hasta que finalmente se alzó a una altura considerable, rápidamente cambio de color a uno blanco, y su forma se expandió y creció hasta tomar una forma peculiar, la de un dragón, me corrijo… era forma de aquella dragona que me había entregado el huevo. Más tarde de uno minutos volvió a cambiar de forma, esta vez se comprimió y emitió un color dorado, ahora era la forma de un dragón… más específicamente uno pequeño, como si fuera cachorro.

Me quede expectante ante la maravillosa escena, pese a la extraña que era, nuevamente cambio, se expandió y ahora tomo un color rojo y la forma de una espada que no reconocí y por último cambio a un color azul y se esparció por el especio de forma horizontal, despedazándose hasta tomar pequeñas formar y finalmente algo se formó un monto de letras en mi idioma, el español mientras ardía con rabia en el aire.

Bajo cielo estrellado y nombres olvidados, resuena entre poco tu renombre. Bajo la vigilancia pálida, con respecto y tristeza, con dolor y perdida ahora eres tú quien se levanta. Un sol dorado y un sol oscuro y con las almas salvaje, eres tú quien nos enseña. Impredecible entres bestias, impredecible entre dioses, a todo nos despertaste del mundo oprimido.

Leí completamente hipnotizado por aquellas palabras que ardían en el aire con paciencia, me resultaba interesante lo que decía y más me intrigaba que significaba. Las llamas temblaron nuevamente juntándose, luego se expandieron hasta optar nuevamente el color rojo y tomo una forma humana que no reconocí.

—…Curioso…— dije para mi

Aquel fuego con forma humana, de alguna formar sentí que movió su cabeza solo para mirarme, en el instante me calle y quede sorprendió, comenzó a descender hasta el nivel del suelo y poco a poco con cada torpe paso se acerba a mí, hasta que finalmente estuvo frente de mi… no tenía rostro, pero por alguna razón sentí que estaba dudoso. Alzo su mano y me mostro el numero 3 con sus dedos.

Abrí los ojos y encontré otra vez el hospital del techo, estaba sudado pese a todo el frio que hacía en el lugar, sentí que el calor en mi pecho ardía con más intensidad sin ser dañino, cosa que me extraño, aun no estaba acostumbrado a esa sensación y al poder espiritual. Instintivamente lleve mi mano al pecho.

“¿Estás bien? Abandonaste tu cuerpo momentáneamente”

— (¿qué quieres decir con eso?)— pregunte con la voz de mi mente.

“Básicamente tuviste a lo que se llamaría viaje astral, estuviste afuera un par de minutos”

No respondí… sabia lo básico del concepto del viaje astral… pero experimentarlo de primera mano era muy extraño. Note una presencia a mi derecha, en un asiento estaba mi equipo sentado.

Imagino que preocupados, desde la muerte de mi mamá… me dolió decir eso, me acompañaban procurando que cualquier cosa no me pasara, lo comprendo bastante teniendo en cuenta ahora que soy un criminal buscado en USA. Salude con las manos, parecía algo aburrido, ellos me correspondieron.

Me acosté en la cama nuevamente dejando descansar un poco el cuerpo, aún no había vuelto a refugio porque quieren analizarme, quieren saber cómo fue que les paso por alto la información genética de que soy un Nefilim. Por suerte ya no vestía una simple bata de hospital, tenía uno vaqueros negros y un abrigo de lana blanco

Ya había pasado una semana, después de todo lo acontecido, estaba dolido, extraño e incluso me sentía solo, ayer fue su funeral… apenas tenía ánimos para comer, me la pasaba acostado intentado ver a qué rumbo tomaría mi vida ahora que ya perdí a la única familia que tenía, todo lo que alguna vez fue mi vida mundana se perdió para siempre. Solo me quedaba analizar mi decisión y ver que rumbo tomaría mi vida.  

Escuches pasos cerca, imagino que alguien estaba llegando, no volví mi mirada, decidí perder mi mirada en la vista que me ofrecía la ciudad de Londres, aunque sea algo poco.



#6474 en Fantasía
#2491 en Personajes sobrenaturales
#7606 en Otros
#931 en Aventura

En el texto hay: misterio, mitologia, accion

Editado: 30.09.2023

Añadir a la biblioteca


Reportar




Uso de Cookies
Con el fin de proporcionar una mejor experiencia de usuario, recopilamos y utilizamos cookies. Si continúa navegando por nuestro sitio web, acepta la recopilación y el uso de cookies.