Aprendemos a valorar las cosas simples cuando estas nos hacen falta.
Tantos problemas que yo con mis acciones había creado me agobiaban, todo me daba la espalda y mi único apoyo fuiste tú, Jason.
Con mi cabeza repleta de emociones entre la que más destacaba era la furia, tome todas mis pertenencias, las guarde en una gran funda tome un taxi y me fui, abandone el lugar en el que más protegida me sentía, mi hogar. El camino hacia tu casa normalmente era muy cerca, pero ese día fue realmente largo, con mis ojos llenos de lágrimas, lloraba sin parar mientras que aquel pobre conductor lleno de preocupación se arrepentía de haber laborado ese día.
Aquel sentimiento de furia que sentí al cruzar la puerta se convirtió en un temor muy grande, finalmente llegue a tu casa me seque las lágrimas y llamaba a tu puerta sin respuesta alguna, considere la idea de regresar pero sentí que era tarde, con ayuda de un amigo en común pude despertar del sueño profundo en el que estabas, tomaste mis cosas y las colocas sobre tu cama, me abrazabas y me decías que todo estaría bien cuando no era así. Hablamos por largas horas en compañía de tu madre la cual apoyaba toda esa locura.
Estaba tan acostumbrada a mis cuatro paredes, un ambiente familiar en el que mi alocada forma de ser llenaba de alegría aquella casa, y me sentí contenida al no poder actuar de esa manera en un lugar ajeno . Tus besos , abrazos y palabras hacían que me tranquilizara un poco , aun así sentíamos la presencia de varias personas que me buscaban mientras me ocultabas en tu cuarto , del cual no se veía nada desde afuera , tenía mucho miedo y solo quería volver a mi lugar seguro , pero ahora si ya era demasiado tarde.
Me había acoplado a tener todas mis cosas al fácil alcance de mis manos , allí no era así , siempre fui la princesa de mis padres , tenía todas mis cosas ¨necesarias¨, buen champo para no deteriorar mi cabello , acondicionador , varios tipos de cremas y perfumes , variedad de utensilios para verme bien , y en un lugar el cual no era mi espacio no encontré eso y tuve que acogerme a lo que había , lo hice tome un baño de agua fría , con cosas que no eran mías , me vestí y esperaba un lugar para dormir , realmente mi mente necesitaba descansar , me recosté a tu lado y aunque me abrazabas fuertemente no deje de arrepentirme , me había acostumbrado a que me defiendan y resuelvan las cosas por mí , esa noche si algo me pasaba nadie podría hacerlo , la princesa de mis padres estaba indefensa , por primera vez en su vida.