_Después de que ella saliera por esa puerta sentí muchas emociones que me costaban expresar en palabras. Pero la que mas destacaba y una con la que ya conocía de antemano. Soledad, después de que mis padres murieron quede muy solo y, la verdad es que extrañaba la compañía de otra persona y, sinceramente quiero volver a verla, me quede un buen rato parado tras la puerta con la mano derecha sujetando mi brazo izquierdo, me invadió un rostro de tristeza que me era difícil cambiar. Quede muy pensativo. Y cuando volví en mí no podía recordar lo que estaba pensando exactamente pero, lo poco que recuerdo es que Kate estaba en aquellos vagos pensamientos. Al regresar a la cocina me sobresalté al escuchar la alarma del reloj que sonaba siempre a las 2:30 pm, porque salía a comprar justo a esa hora pero, ya no tenía más dinero... Creo. Subí hacia mi habitación, tomé el pequeño bolso que contenía el dinero y lo conté. Tenía muy poco pero como no me alcanza para comprar varios víveres decidí gastarlo en algo pequeño para mí y que no costara tanto. Supongo que es la excusa mas vaga que tengo para salir de casa, así que me prepare para salir, me cambie, cerré la puerta y tome vuelo. Inconscientemente miraba a los alrededores para lograr ver a Kate. Caminando hacía el colegio en alguna avenida plaza o callejón, pero como era de esperarse no la encontré. Así que seguí mi ruta hacia el centro comercial y entré por la azotea como siempre lo hacía.
Baje por las escaleras en forma de espiral con toda normalidad. Sin apuros ni preocupaciones, lo hice sin pensar en nada más. Hacia mucho tiempo que mi mente no estaba completamente en blanco, no sabía que hacer exactamente. Decidí no pensar en nada, divagar un poco. Al llegar al restaurante Sakura-Hatory y dar el primer paso dentro del establecimiento me recibió una muchacha bien parecida y amable que me atendió puntual y rápidamente, la chica era un poco más baja que yo con un cabello rubio amarrado con una cinta de color azul marino creando una bola de pelo acomodada detrás de su cabeza, sus ojos eran de un color azul llamativo y color de piel pálida muy parecida a la mia. Llevaba puesto el uniforme del restaurante. Un chaleco rosa, una camiseta blanca, una falda marrón claro. Que no eran ni tan corta pero ni tan larga y casi al final de la falda una delgada doble línea de color verde que rodeaba toda la falda, asemejando a un árbol de sakura (eso creo). La chica no me dijo su nombre solo me guío hasta una mesa. (Pero creo que se llama Vanesa por lo del carnet que llevan todos los empleados los cuales dicen su nombre), pero antes de eso la detuve y le dije.
-Disculpa ¿pero me puede atender Donovan?
-Ehh. El señor Donovan creo que está allá atrás en su descanso.
-Bueno creo que-
-¡Heeyy Cross!
Antes de decir una palabra más, escuche una voz muy familiar que provenía del fondo del restaurante. Era Donovan que trataba de llamar mi atención y... Era muy difícil no notar su presencia. Siempre que llamaba a alguien saltaba y hacía muchas señas de que era EL quien te estaba llamando y a veces... Daba pena ajena. Y por supuesto le devolví el saludo levantando el brazo, un poco apenado. Empezó a acercarse trotando, me era muy raro ya que la última vez que lo visite traía puesto su uniforme esta vez no lo traía puesto. Ahora traía un traje formal. Al llegar hasta mi tuve que subir un poco la mirada para poder mirarlo a la cara, creció mucho últimamente. La última vez que lo vi era de mi mismo tamaño, ¿¡creció tan rápido, debe medir como dos metros si yo mido 1.83!?
¿¡Ehh Cross como estas. Mucho tiempo sin verte, como te ha tratado la vida!?
Dijo esto dándome un gran y fuerte abrazo mientras elevaba la voz.
-I-igualmente Donovan ¿cómo has estado? -dije con voz entre cortada. Su abrazo es muy fuerte.
-Bien, muy bien de hecho. Pero no hablemos aquí. Ven sentémonos en nuestra mesa. -como siempre haciendo un gran escándalo.
Dejo de abrazarme, le hizo señas con la cabeza junto con una sonrisa a la chica que previamente me atendió. Se sonrojó y obedeció, esta fue al fondo del restaurante. La cual era la parte de la cocina, y nos dirigimos a nuestra mesa. La cual era la parte de la cocina, y nos dirigimos a la mesa de siempre para hablar por un momento y poder ordenar nuestra comida.
-Y bueno Cross ¿qué te trae por aquí? De hecho hace un tiempo que no vienes.
"Hace un tiempo que no vienes" ¿¡como que un tiempo, si vine hace tres días!?
-Bueno lo que pasa es que me quede sin dinero y lo que me queda es muy poco. Así que decidí comprar algo aquí, por cierto ¿por qué no traes tu uniforme? Llevas algo muy formal y eso es raro de ti porque no te gustan los trajes.
-Ah cierto, *ejem ejem*. Me ascendieron a gerente yo superviso todo aquí ¿no es genial?
-¡Whoa ¿enserio? Es una gran noticia. Te felicito la verdad te lo mereces siempre trabajas muy duro!
-Jeje bueno que puedo decir, si es cierto que trabajo muy duro y fielmente. Me encanta este restaurante, el único defecto es este traje incomodo.
-Seguro que te acostumbras, siempre lo haces ¿y por qué? Solo es un restaurante.
-Bueno, aquí es donde he tenido mis mejores momentos. Además, conocí aquí a mi mejor amigo.
-¿Enserio, y quién es?
En ese momento se apoyo la barbilla con la palma de la mano izquierda y con la mano derecha me apunto. Tenía una mirada picara.
-Tu.
-¿Yo?
-Sip. Como sabes soy huérfano de padres al igual que tu. Pero la diferencia es que no conocí a mis padres. Y era un poco tímido, no me gusta la compañía humana por lo que no me llevo bien con las otras personas. Soy muy parecido a ti. Por eso somos mejores amigos, y eso es por lo que nos llevamos tan bien ¿no?
Editado: 06.01.2024