Iván y Giulian se reunieron con Jonathan que los condujo a toda prisa a dónde esperaban los chicos mientras Eowaz se quedó con los Douglas. Amy guardó obstinado silencio en tanto que Dan se interesó por algunos de sus antiguos compañeros, pero Eowaz dudaba que estuviese prestándole verdadera atención, porque para él fue claramente perceptible el nerviosismo del hombre ante la expectativa de ver a sus hijos ya crecidos.
En el despacho de Eowaz los chicos ya estaban recelosos por el tiempo que llevaban allí. Danny y Gail caminaban de un lado a otro mientras que Sam estaba sentada muy rígida y Mael intentaba tranquilizarla. Ella había hecho todo cuanto había podido por captar algo, y en un momento tuvo la sensación de que todo aquello tenía que ver con Elijah, porque creyó percibir vibraciones familiares. En ese momento Mael tuvo que hacer un enorme esfuerzo por desviar su atención, ya que él sabía perfectamente lo que ella estaba captando.
Danny había intentado abandonar el despacho, porque le costaba permanecer tanto tiempo en un mismo lugar y sin hacer nada, pero los krigers que estaban en la puerta le impidieron salir. Aquello no había contribuido en nada a mejorar los ánimos, pero no les quedó más remedio que obedecer.
Los arzhaelíes no pudieron evitar sonreír al escucharlo, porque se había expresado casi del mismo modo que su madre un momento antes. Aquel asomo de sonrisa hizo que Sam se tranquilizase un poco y obedeció.
Si les hubiesen dicho que Bastian había vuelto a la vida, no habrían causado un impacto tan enorme como el que acababan de causar. La sangre parecía haber huido del rostro de Danny, Gail de por sí pálido, parecía transparente, y el corazón de Sam se detuvo por unos breves segundos. No obstante, y al igual que Daniel, Danny no era de la clase que podía callar por mucho tiempo.
En este punto Giulian no pudo evitar sonreír de nuevo, porque aquel chico definitivamente era una copia muy fiel de sus progenitores, en físico, reacciones, palabras y todo lo demás.
Gail que contra su costumbre había permanecido en silencio, en ese momento recuperó su capacidad para hablar y como siempre fue directo al grano.
Los arzhaelíes comprendieron que no podían retrasarlo más, el resto de las explicaciones tendrían que esperar, porque si Amy era decidida, Samantha lo era mucho más, algo que quedó demostrado en el breve lapso de tiempo que le tomó llegar a la puerta y apartar sin ceremonia alguna a los krigers que de forma automática le cerraron el paso. Giulian se movió más de prisa y los demás tras ellos, pero Sam corría con verdadera rapidez.
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Editado: 19.10.2022