Cap. 40 Clever House
Después que los niños abandonaron la habitación de Sam, Dan e Iván se acercaron a ella.
- Linda, conocemos a Giulian y sabemos que no regresará hasta que ese pedazo de roca que tiene por cabeza entienda su error, pero mientras tanto tienes que sobreponerte, porque los niños te necesitan -- le dijo Iván
- Pero te prometo una cosa hija, en cuanto ese cretino infeliz se deje ver, voy a destrozarle hasta el último de los huesos
Samantha los abrazó a ambos y se hizo el firme propósito de enterrar su dolor en beneficio de sus hijos. En ese momento entraron Diandra y Aderyn quienes junto con Elar y Amy habían estado ocupándose de los chicos.
- Sam, venimos a preguntarte si tienes inconveniente en que llevemos a los niños al parque, creemos que necesitan algo de distracción -- le dijo Aderyn
- ¿Desde cuándo necesitan pedir permiso ustedes? -- le preguntó ella
- Sé que no es el mejor momento, pero también quería recodarte que solo faltan un par de días para tu cumpleaños y el de las niñas, así que vamos a comprar algunas cosas para eso -- le dijo Diandra
Sam estaba a punto de contestarle que ella se haría cargo cuando Kobil apareció a su lado.
- Señorita, el señor McKenzie solicita verla -- le dijo le Nisser
- ¡Jonathan! -- exclamó Sam con una nota de ansiedad en la voz sabiendo que era uno de los que estaba avocado a la búsqueda de Giulian
- No señorita, es el otro joven McKenzie
Aderyn y Diandra se miraron por una fracción de segundo y ambas abandonaron la habitación a toda carrera. Aunque a la última persona que Sam habría deseado ver en aquel momento era a Kenny, sus buenos modales le impedían negarse, así que comenzó a caminar hacia la puerta seguida de Iván y de Dan.
- No tienes que hacerlo, linda -- le decía Iván mientras bajaban
- Él tampoco es responsable de lo sucedido Iván, así que no puedo…
Se cortó a mitad de frase cuando escucharon los enfurecidos gritos provenientes del salón y corrieron.
- ¿Qué demonios estás haciendo aquí, Kenneth McKenzie? -- estaba gritándole Diandra
Si había alguien de entre todos sus primos al que Di adoraba era a Kenny y siempre había sido así, pero ante la situación que estaban viviendo y dado el carácter de Diandra, era que estaba reaccionando de aquella manera.
- Necesito verla, Di
- ¡No, lo que necesitas es desaparecer de su vida! -- le gritó
Elar y a Amy que habían bajado con los demás miraban la discusión pensando que aquel pobre chico tenía casi tan mal aspecto como Samantha. Kenny miró a Sam por encima del hombro de su furiosa prima y sintió que el corazón se le hacía pedazos al ver sus ojos enrojecidos y las sombras oscuras que los rodeaban. Apartó a Diandra y a Aderyn sin ceremonias, se acercó a Sam y se arrodilló frente a ella.
- Samantha -- le dijo tomando sus manos entre las suyas -- Sé lo que ha sucedido y no sé cómo pedirte perdón por lo que ha hecho mi hija. No sabes cómo me duelen cada una de tus lágrimas, así que dime qué puedo hacer para ayudarte y haré lo que me pidas.
- Nada Kenny, nadie puede hacer nada -- le dijo con tristeza -- Ni siquiera quiso escucharme.
- Pues a mí tendrá que escucharme -- dijo con convicción -- No permitiré que te haga esto.
Se había puesto de pie y se estaba girando cuando Iván lo agarró por un brazo.
- No complique más las cosas -- le dijo -- Además, nadie sabe dónde está.
- Lo encontraré, no importa dónde se esté escondiendo ni lo que me cueste, lo voy a encontrar.
- Kenny no seas necio -- dijo Dan molesto -- No tengo idea de por qué estás vivo aún, porque conociendo a Giulian estaba seguro de que lo primero que haría al salir de aquí sería buscarte para matarte, y ya que no lo hizo no lo busques, porque si lo encuentras quizá no tengas tanta suerte.
- ¿Y crees que eso me importa? -- le gritó -- Si con eso consigo que vuelva, pues bien, que así sea y quizá nos haga un favor tanto a él como a mí.
- ¡Kenny! -- dijo Aderyn horrorizada
- No es un secreto para nadie que amo a Samantha y que lo haré el resto de mis días, pero si tengo que sacrificar mi vida por su felicidad, entonces lo haré sin pensarlo -- dijo con terquedad.
- Kenny deja de decir idioteces -- dijo Diandra -- Lo que tienes que hacer es hablar con tu hija para que deje de comportarse como una princesa malcriada.
Pero Kenny no le estaba prestando atención y se dirigía hacia el Dver con intenciones claras, así que Iván con pesar lo apuntó con su Athame haciéndolo perder el conocimiento.
- Aderyn, llévalo a casa de tus padres y asegúrate de que entiendan que por su propio bien, es mejor que no busque a Giulian
Aderyn obedeció y haciendo levitar el cuerpo de su hermano, se metió al Dver aferrándolo por un brazo. Dan estaba cercano al agotamiento, llevaban ya varios días en aquella angustia y corriendo de un lugar a otro sin resultados. Sam se disculpó y subió a su habitación dejando a sus padres afligidos y preocupados.
- Se va a enfermar -- dijo Amy
- Te juro que cuando lo encuentre le voy a partir el alma ¿Cómo puede ser tan estúpido?
- Dan, es Giulian ¿Cuándo ha sido razonable? Sabes cómo ama a Samantha y tiene que haber sido terrible para él escuchar aquello, debe haberse imaginado quién sabe qué barbaridades.