Delivery Love | 02

"Maldita sea, ¿por qué las calles son así?"

Esta era la quinta vez que pasaba por la misma calle y, sin embargo, la encontraba cada vez más diferente. ¿Cuánto tiempo ha estado perdido? ¿Una hora? Quizás más.

Daba lo mismo. Lo único que quería Eunwoo en ese momento, era encontrar ese maldito restaurant coreano del que recomendaban en la oficina. Que es bueno, que es muy rica la comida...

"Que es muy fácil de perderse."

Llevaba ya varios años en Corea, ¡y no encontraba el camino al maldito restaurant! En estos momentos a Eunwoo le daban ganas de pegarse contra el volante y luego mirar al cielo del auto, quizás allí encontraría la respuesta.

— En fin... ya no lo encontré —dijo girando en U, devolviéndose a su casa. Ese camino sí que lo sabía.

Era primavera. Las flores estaban por todos lados, las parejas caminaban felices por los parques, los niños jugaban y luego sus madres los retaban. Y él en Corea, sin su familia. Bueno, no era que los extrañara mucho, pero a veces sentía que todo su dinero no le servía para nada. Andar en un auto que era cinco veces más caro que aquel departamento que estaba mirando.

Que su apartamento fuera lo suficientemente grande como para traer a toda China, le hacía sentir completamente vacío. ¿Y?, solo tenía que poner una cara seria y todo aparentemente se arreglaba, lástima que aquello solo era por fuera. Y momentáneo.

Su porte bastante considerable y su apariencia no le hacía pasar inadvertido. A veces quería un abrazo, un beso en la mejilla, inclusive un regaño.

Pero simplemente no podía.

No quería expresar sus sentimientos. Durante años había construido una barrera entorno a él. La soledad le pasaba bastante la cuenta y sabía que era demasiado tarde para...

— Que mier.... —frenó en seco el auto, haciendo que las llantas rechinaran sobre el pavimento horriblemente. Pero era demasiado tarde, había chocado con algo.

¿Pero cómo?... abrió la puerta rápidamente, yendo hacia el frente de su auto, mirando cómo la gente se iba juntando poco a poco en torno a éste. Pudo ver a un chico en el suelo, y una pequeña moto tirada a un lado.

Y su coche levemente destrozado en la parte delantera.

— Mi auto.