Astartea el ángel del infierno

capítulo 46

Narra Acatriel

Cuando mi vista se aclaró, lo que observe fue tan impactante que mi concentración se perdió, frente a mí se encontraba Agramon, antes pensaba que se encontraría totalmente lastimado preso de Amazarac, pero no fue así Agramon está frente a mi dé pie sin ningún solo rasguño ni heridas de batalla ¿Qué está sucediendo?, ¿es acaso un truco de Amazarac?, esa debe ser la razón porque no hay otra explicación.

—¿sorprendido? — escuché la voz de Amazarac en mis espaldas — bien después de encargarnos de un pequeño inconveniente podrán hablar tranquilamente — sentí las manos de Amazarac en mis ojos

Las manos del enemigo me impedían la vista, pero ese no era su objetivo, sentí un gran calor como si me estuvieran quemando solamente esta parte, cuando termino no podía abrirlos, su intención era que definitivamente no pudiera usar mi poder especial para tomar ventaja.

—Bien ahora que no hay peligro, puedes hablarle a nuestro invitado sobre tu traición querido sobrino — escuche la voz de Amazarac mientras se alejaba

—¿de qué está hablando Agramon? — pregunte aun con una leve esperanza de que todo fuera un malentendido

—Lo que escuchaste Acatriel, todo esto fue planeado para capturarte y matarte, cuando terminemos con tu vida — sentí un objeto afilado rasgando mi piel — obtendremos las alas de Astartea

Su tono de voz sonaba realmente sin ningún truco, pero ¿Por qué?, ¿de verdad traicionara a Astartea? No sé sus intenciones, pero sea no verdad no permitiré que la toque aun si tengo que dar mi vida para ello, intente con todas mis fuerzas liberarme, pero era en vano.

—Aun si pudieras liberarte no puedes verme — dijo Agramon — eso te coloca en una situación de desventaja

—¿Por qué haces esto? — sentí otro corte — no quieres a tu hermana, ¿Por qué la traicionas?

—Mi hermana siempre fue un ser insignificante sin valor alguno, desde el día que llego a mi vida no la acepte, pero mi padre la quería bastante, por eso fingí que la aceptaba, pero todo esto es cansado

—¿en ese caso porque fingiste aun después de la muerte de Abaddon?

—No es obvio, ella se ganó el respeto de muchos, mi primer plan era usarla para crear mi territorio soñado, pero mientras más crecía esa estúpida mujer, también crecía el cariño de todos a su alrededor, al principio pensaba deshacerme de ella sin que nadie lo notara, pero ¿Cómo hacerlo? Si tenía tu protección, necesitaba otro plan hasta que Amazarac me dio la solución

—Lo que dices no tiene sentido, ¿haces esto por poder solamente?

—Así es, soy un demonio el poder es importante, hice un trato con mi tío, el me ayudaría a deshacerme de todo aquel que se interponga en mi camino, a cambio le ayudaría a tener las preciadas alas de esa mujer

Este no era el Agramon que conocía, su voz fría sin sentimiento alguno simplemente no podía creer lo que escuchaba. Seguía recibiendo algunos cortes de su parte, ya no sé cuánto tiempo llevo aquí, sufriendo heridas las cuales se recuperan rápidamente para luego ser abiertas nuevamente.

—Parece que Amazarac finalmente se fue — escuche decir a Agramon

—¿eso es importante? — pregunte indiferente — me impresiona que aún me hables como si te preocuparas por mi después de esta traición

—Siento que sea tan buen actor Acatriel — dijo de repente

—¿actor?, ¿de que hablas? — pensé un momento — ¿solamente fingías?

—Amazarac estaba vigilándome, no tenía otra opción, escucha Aquellos cuerpos que viste en el camino todos fueron asesinados por él, no tenía ninguna oportunidad ante el por eso concluí que lo mejor era fingir que lo seguía

—Ya no sé qué pensar de ti Agramon — conteste con desconfianza

—lo siento Acatriel, no soy un buen líder, esto es lo único que puedo hacer por ahora, escúchame el plan ha cambiado, fingiere que estoy de su lado por ahora buscare la forma de sacarte de esto

—yo no importo, solamente dime que las palabras que dijiste de tu hermana eran mentira

No pude saber su respuesta ya que Amazarac llego nuevamente, aunque esta vez se escuchaban otros pasos, tiempo después supe que se trataba de Andras quien no desaprovecho esta oportunidad para torturarme con su poder especial, al principio podía rechazarlo, pero con el tiempo se volvió más duro hasta que simplemente tuve que aceptar sufrir contantemente hasta tener que fingir que quede inconsciente. Cuando comencé a fingir Adran no lo creía, pero afortunadamente Agramon mintió afirmando que estaba completamente inconciente.

—Que aburrimiento, ya no es el de antes — escuche decir a Andras algo desilusionada

—Es normal esas cadenas hechas de mi energía no solo son para que no escape, además le roban su energía poco a poco pero no al punto de matarlo — ahora era la voz de Amazarac la que hablaba

—Ya veo, pero — el tono de voz de Andras sonaba molesto — ¿podemos confiar en él? — me imagino que habla de Agramon

—Mi querido sobrino demostró su lealtad por ahora, pero no te preocupes tendrá más pruebas las cuales enfrentar para asegurarme que no planea traicionarme — dijo Amazarac — por cierto ¿Cuándo tendremos mis maravillosas alas?

—No dijiste que necesitabas también el poder especial de Acatriel, ¿Cómo planeas tenerlas? Sé que perderás mucha fuerza cuando termines de quitarle su poder — contesto Agramon algo desafiante, ahora sabia la razón por la cual sigo con vida

—Por esa razón los tengo a ustedes dos — creo haber escuchado un sonido de disgusto de Agramon

—Astartea no es débil, ella puede tener un buen enfrentamiento sin problemas, más ahora que su poder aumento con sus alas — ¿aumento? Creo que Agramon trata de protegerla de ellos — nosotros dos no seremos capaces de detenerla, primeramente, conoce mucho de mí y segundo Andras es una incompetente ya que su poder no tiene efecto — escuche como Andras comenzaba a gritar furiosa por ese comentario




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