Capitulo 39

ATENEA

Dante estaba de visita en mi rincón sagrado de diseño. Se veía un poco distraído, algo le molesta y a mí me molesta su silenciosa visita a sí que me acerque a él, alguien debía terminar con la incertidumbre. Supongo que debía ser yo, las cosas en Rusia seguro que fue peor de lo que me puedo imaginar.

_No creo que vinieras a verme para permanecer callado o si – rompí el silencio - ¿Qué pasa?

_¿enserio estas con mi hermano? – no entendía por qué lo dudaba si ya nos había visto juntos y además sabe de mi embarazo, pero asentí - ¿Por qué él?

_¿Por qué no? – lo mire a los ojos – el amor viene de diferentes maneras, no siempre debe ser a primera vista, a veces el tiempo tiene mucho que ver y con Bastian fue así, termine enamorándome de él.

_Es que no lo entiendo, creí que me amabas – no pude evitar sentir cierta irritación en mi pecho – pensé que al volver te encontraría…

_Dije que no esperaría - respondo segura.

_Tu eras para mí, teníamos un futuro - no lo creo, él se fue sin mirar atrás ahí no había futuro.

_Lamento decepcionarte querido amigo, pero estoy segura que lo nuestro nunca fue amor – tome sus manos entre las mías – porque si fuera así tú no te hubieras ido sin pensarlo a Rusia y yo no me habría enamorado en poco tiempo de tu hermano.

_Entonces es por eso – quito sus manos de las mías poniéndose de pie – estas con él por mi culpa.

_No estoy con Bastian por despecho, lo amo.

_Puedes estar confundida.

_¡no! yo amo a Bastian y no lo dejaría nunca, no te expreses de él como si fuera un… no se – me cubrí el rostro con mis manos – ¿enserio viniste hasta aquí solo para decir esto? No estoy con el por despecho si eso es lo que piensas, simplemente me enamore y no hay mas explicación.

_Es que no entiendo ¿Por qué Bastian?

_La que no entiende soy yo, Dante – levante la voz perdiendo la paciencia – ¿Por qué te molesta mi relación con tu hermano? El es un hombre maravilloso, terco, controlador y amargado, pero conmigo es otro. Lo amo y eso es un hecho – toque mi vientre pequeño y lo acaricie.

_Porque… - se detuvo a mirarme y eso solo me altero más.

_Porque ¡que! Demonios, termina de hablar que no tengo todo el vendito dia, por si no te has dado cuenta tengo mucho trabajo.

_Porque no lo acepto, no quiero que estés con él. – esto debe de ser una broma. – yo ya estoy de vuelta ¿Por qué tenías que estar con él? Te pedí que me esperaras, yo iba a solucionarlo todo y volvería, pero tú no me esperaste y terminaste abriéndole las piernas a mi her… - no termino de hablar porque le cruce el rostro de una sonora cachetada.

Nadie me iba a humillar otra vez.

Que se ha creído este hombre que por ser mi amigo yo le iba a tolerar sus insultos.

_¡vete ¡ No voy a tolerar tus insultos de mierda.

_Atenea, yo…

_Largo

_Preciosa, por favor

_¡que te vayas ¡

_No quise decir eso…

_¡Fuera ¡

_Pequeña

_Pequeña y una mierda, tú te largaste a Rusia sin darle cuentas a nadie y yo no te lo reproche y mira que eso si fue estúpido – me mordí la lengua cuando vi su rostro contraerse. Fue un golpe bajo pero ahora mismo no controlo mi lengua. – vete Dante.

_Atenea por favor – suspire hondo.

_Ahora no Dante, otro dia tal vez podamos hablar sin herirnos con nuestras palabras, yo tengo claro mis sentimientos y no dudo de ellos. – le di la espalda.

_Yo también los tengo, aunque creo que ya es demasiado tarde – su voz sonaba triste.

_No vayas por ese camino Dante, quiero conservar nuestra amistad – realmente me entristecía la insistencia de Dante. Antes tal vez hubiera pasado algo entre nosotros, pero fue el mismo quien lo termino.