Parte Dos de: Encadenada a tu Hilo Negro
Entre las sombras de Mercurio
escucho resonar, tu voz diciendo mi nombre.
entre la flama que moldea tus ensoñaciones,
Siento las caricias de tu ser
pidiéndome un pedacito de cielo o de locura
Llevándome a un camino a oscuras
donde la inocencia y el pecado, se unen en un solo ser.
La soledad, me susurra sus últimas palabras:
«Eres suya, estas atrapada en sus hilos dorados
de fantasías para hacerte renacer».
Veo tus emociones
reflejados en el cristal de tus deseos,
La noche me acobija con su manto
mientras me arrastra hacia ti.
Curiosamente, me miras profundamente durante mis sueños.