Asher
Esta mañana al llegar al hospital junto con mi hermana y Killian, vimos como Aura sonreía abiertamente mientras jugaba con Stella. Son una familia, algo que buscó Killian por años, desgraciadamente mi amigo siempre creyó que lo que su madre le decía sobre su hermano era cierto, y lo “confirmó” cuando Mason tuvo el accidente. Killian falló en confiar ciegamente en su madre, que creo odiaba a su hijo mayor por el parecido de este con su ex marido.
Aura saluda a mi hermana con una sonrisa, una que no me dedica a mí, solo me saluda y vuelve su mirada a Stella. No sé que hice mal, en qué me equivoqué o cuando la hice sentir mal. Sé que todo ha venido después de que se resbalase en el jacuzzi, pero no creo que todo el problema radique en ese pequeño incidente. La vergüenza la mayor parte de las veces es pasajera. Debe de haber algo más.
– Tita.- Aura mira a la niña.- Ayer todos mis compañeros le hicieron un regalo a su mamá.- veo como Aura inspira con fuerza.- Quería darte el regalo a ti.- ella le sonríe con ternura.- ¿Puedo dartelo aunque no seas mi mamá?
– Claro cariño.- Stella se baja de su regazo y va hasta su mochila.
La niña vuelve corriendo con una caja de madera y se la da a Aura que le da un pequeño beso en la mejilla, es tierno verlas interactuar. Se nota que Aura ama a Stella.
– Gracias Stella.- dice sacando de la caja un collar de macarrones y una carta con muchos colores y dibujos.- ¿La has hecho tú?- ella asiente sonriente.- Cuando llegue a casa la leo.
– ¿Ya te tienes que ir al médico?
– Pronto, cuando Marie llegue.- la niña asiente.- ¿Estás enfadada?
– No, solo que yo quiero llamar a Marie mamá pero no me dejáis.- Aura resopla.- Sé que a papá le gusta, y yo quiero que ella sea mi nueva mamá.- Aura la mira por largos segundos.
– Stella, Marie no puede ser tu mamá por el momento.- ella se cruza de brazos enfadada.- ¿Te acuerdas esa vez que estábamos en un parque y un niño, sin maldad, me dijo que seguro yo era un transformer?- ella asiente.
Los niños tienen mucha imaginación y supongo que le dijo eso a Aura por la silla de ruedas, sin embargo es un comentario muy desafortunado que de seguro le hizo daño a Aura, y la hizo sentir mal. De haber sido yo me hubiese sentido fatal.
– Si me acuerdo, ese niño estúpido te hizo llorar aunque no lo hizo apropósito.- dice ella.
– Bueno, pues algo parecido ocurre cuando insistes en llamar mamá a Marie.
– Le hago daño.- asiente.
– Dale tiempo a Marie, hasta que ella no te diga que puedes llamarle mamá, llamala Marie.
– Lo haré.- asiente efusivamente.
Aura le hace cosquillas para que deje de pensar en lo que le ha dicho y deje de estar triste. No sé lo que le pasó a Marie, pero parece ser una mujer muy fuerte, y decidida, también parece tener un instinto maternal con sus amigos y es más evidente con la niña pequeña que carece de una figura materna.
– Ya llegué.- dice Marie cansada.- Lo siento, había atasco.- sonríe con tranquilidad antes de saludar a Aura y a Stella.
– No pasa nada, lo importante es que has llegado.
– ¿No has pensado nunca sacarte el carnet de conducir para personas con tu condición física?
– No me saqué el normal y quieres que me saque ese.- niega ella divertida.- Bueno, vamos o llegaremos tarde.
– ¿Quién se queda con Stella?
Aura sonríe y señala a Killian. Marie resopla antes de asentir aunque no parece estar muy contenta con ello. Ambas se despiden de nosotros y la pequeña se pega a Killian. Parece haber perdido un poco de su energía pero parece que todavía tiene bastante.
– Tito Killian.- este la mira lleno de amor, como dije, siempre quiso una familia.- ¿Mi papá de joven tenía muchas novias?
Killian se queda callado, vivieron juntos hasta que sus padres se divorciaron cuando él tenia doce y Mason quince, así que no creo que Killian conozca la respuesta.
– No lo sé.
– Seguro que si, es muy guapo.- sonríe viendo a su padre.- ¿Y tú has tenido muchas novias?
– No, mi única novia ha sido ella.- señala a mi hermana.
– Es muy guapa.- le sonríe a Lea.
– Tú también lo eres.- le guiña ella un ojo.
– Lo sé, la tita Aura me lo dice mucho. Dice que de mayor papá va a tener muchos dolores de cabeza porque muchos chicos y chicas se van a fijar en mí.- se ríe tímida.
– Lo harán.- se acerca y le da un beso en la mejilla.
– Asher – es mi turno.- ¿Tú has tenido muchas novias?
– Muy pocas.
– ¿Quieres que mi tía Aura sea tu novia?- resoplo y asiento, hasta una niña de seis años es capaz de darse cuenta de que su tía me atrae.- A ella le gusta mucho la fotografía, los niños y los animales como a mí.- se ríe.
¿Me está dando ideas una niña? Si, y no voy a quejarme porque me niego a rendirme hasta saber la verdadera razón de su rechazo, sé que no es porque sea socio de su padre. De ser por eso Aura me hubiese apartado desde un principio. Si la razón es simplemente porque no le gusto, lo aceptaré y me alejaré de ella, o porque simplemente ahora no está preparada para tener una relación, intentaré tener una relación solo de trabajo con ella.
– Quiero que sea mi tito.- se ríe.
Mi teléfono suena antes de que pueda responder a Stella. Veo el apellido Trumman y me pongo nervioso, siempre que me llama Benjamin me pasa y no encuentro una razón lógica para que eso me ocurra.
– Hola Asher.
– Hola señor Trumman, ¿necesita algo?
– Si, quería pedirte un favor.- espero a que continúe hablando.- La semana que viene es el cumpleaños de mi sobrino, pero no puedo ir y acompañar a Aura, ¿podrías ir tú en mi lugar?
– Claro, no se preocupe, yo iré.
– Muchas gracias Asher, no te lo hubiese pedido si Mason estuviese despierto. - resoplo, parecen confiar mucho en él.- No quiero molestarte, es una fiesta infantil.