―¿Estás seguro esto Joy? ―le preguntó Aidan una semana después del baile. Estos se encontraban en el aéreo puerto.
Los dos estaban de pie en la sala de espera, los padres de Joy habían ido por un café y este solo tenía un pequeño equipaje de mano.
―Sí―fue su única respuesta.
Aidan lo miró―podrías arrepentirte. Por lo que me dijiste, Azula sólo
Malinterpretó las cosas, si le hubieses dicho que...
―Es mejor así―lo interrumpió Joy
Aidan carraspeó―Maldición, no es mejor así. Escucha, yo...
*Pasajeros con destino a Múnich, Alemania por favor pasar a la puerta de embarque número trece―Escucharon a la operadora del vuelo.
―Tengo que irme―le dijo Joy
―Espero que no te vayas a arrepentir de esto Joy
Este lo miró―Despídeme del señor Derkins y diles a mis padres que me comunicaré con ellos en cuanto llegue
―¿¿no te vas a despedir de ellos?
―no tengo tiempo―le dijo Joy―Aidan...
―¿Sí?
―Gracias por todo
Aidan sonrió―En realidad no fue nada.
―Aidan...
―¿Sí?
―Eres el único amigo que tengo
Aidan le sonrió―Tú eres mi mejor amigo
Ambos se dieron un fuerte abraso―Visítame alguna vez―le pidió Joy
―claro que lo haré
La operadora hizo el segundo llamado.
―Debo irme
―Buena suerte amigo
Joy se perdió entre la multitud de pasajeros.
―Este chico...―murmuró Aidan―ya no es el mismo de antes
***
―Y... listo―Azula cerró la maleta―A ver... ¿Qué me hace falta?
En ese instante se abrió la puerta de su habitación y entró su padre.
―¿Cómo vas preciosa?
―Creo que ya está todo Derkins
―Ya veo. Al principio estaba feliz porque pensé que irías a estudiar en Londres
―Sí, pero tía Lucy tiene razón. Italia es el mejor lugar para hacer una maestría en Simbología del arte
―Hija he tomado la decisión de instalarme en nuestra casa en Londres, para poder asistir tiempo completo a la Real Sociedad y poder visitarte
Azula lo miró―es una gran idea
―¿Averiguaste si la Universidad La Sapienza tiene programas en inglés?
―sí tiene, pero al llegar allí haré un curso intensivo de italiano y obviamente practicaré con tía Lucy. Sé hablar latín así que se me hará fácil
Su padre la miró con la boca abierta―¿Hablas latín?
―Utique si Pater
―¿Desde cuándo?
Azula lo miró irritada―aprendí en la universidad
Este se sentó en la cama anonadado.
―perdóname hija, fui tan mal padre para ti... es mi culpa todo esto. Yo no sé nada de ti, no sabía que hablabas latín, yo...
Azula se puso en cuclillas frente a él―papá yo ya te perdoné y todo este tiempo que ha pasado entendí que para ser un padre no existe un maldito manual. Tú tenían dieciocho años, poco más que un niño
―yo pensaba que dándote todo y dejándote con tutores era lo mejor, que yo...
―Papá tampoco tuviste un modelo a seguir, puesto que mis abuelos hicieron eso mismo contigo. El chiste del asunto es que tú y mi tío Rey se tenían el uno al otro
―y tú no tuviste a nadie
―pero todo eso ahora hace parte de mi maldito pasado papá, ahora quiero construir mi futuro. Quisiera que me ayudaras
―por supuesto que sí preciosa, te amo con todo mi corazón―le confesó mientras la abrasaba.
―Yo también papá
―bueno démonos prisa, ya ordene que tuviera la Citation lista. No iba a permitir que te fueras en ningún maldito vuelo
Azula sonrió―Está bién
Dos criados vinieron por las maletas y Azula junto con Ray se subieron en el auto directo al aéreo puerto.
Ray pagaba una buena suma de dinero para que le guardaran y cuidaran de sus dos jets privados.
Azula vio Derkins House a través de la ventana del auto <<Voy a extrañar todo esto>> pensó al dejarla atrás.
Se dijo así misma que tenía que empezar una nueva vida, llena de oportunidades y sueños por cumplir. Una forma de vida totalmente nueva, una en donde no esté Joy.
Al llegar al aéreo puerto, un criado bajó las maletas y ambos entraron. En la sala de espera visualizaron a Aidan.
―¡Aidan! ―lo llamó Ray y este se dirigió a ellos―¿Qué haces aquí?
Aidan miró a Azula pero no dijo nada.
―¿y bién? ―insistió Ray
―no sabía que te ibas hoy Azula―le dijo Aidan―¿mi madre lo sabe?
―le avisé ayer en la noche―respondió ésta
―¿y por qué tan de repente?
―porque me dio la gana
Aidan asintió y miró a su tío―Joy acabó de irse a Múnich―Al decir esto se hizo un incómodo silencio
<<¿Qué?...>> pensó Azula <<Joy... Joy se fue>>
―¿ni siquiera se despidió? ―le preguntó Ray a Aidan
―te mando a decir que gracias por todo lo que hiciste por él―le informó Aidan
Azula se marchó de allí, tratando que las lágrimas no brotaran de sus ojos <<Yo tenía que irme primero, no tú>> pensó mientras caminaba de prisa.
―¡Azula! ―la llamó su padre
Sintió una mano fuerte sobre su brazo que la hizo volver.
―¡Déjame! ―exclamó y Aidan la abrasó―¡Tú lo quieres más a él que a mí!
―¡eso no es verdad! ―le gritó Aidan mientras la abrasaba―por Dios Azula, te quiero más a ti que a Susie―Azula lloró en su hombro―intenté detenerlo, que no se fuera así... fue en vano. Estoy orgulloso de ti porque dejaste las drogas y el cigarrillo y quieres seguir estudiando. Quizás todo esto que pasó fue un escalón más para que cambiaras ese estilo de vida que llevabas... ¿no crees cariño?
―así es princesa―añadió su padre―estoy seguro que tú larga estadía en Italia te ayudará a reconfortarte
Azula se separó de Aidan y los miró―Me quiero ir ya.