★ Bajo tus estrellas ★
★ Capítulo 75 ★
Charlotte
Como personas, hay muchas cosas que nos definen pero solo dos se mantienen sin importar la situación: "Tu paciencia cuando no tienes nada y tu actitud cuando lo tienes todo".
Hablando desde mi punto de vista, no se que sería "tenerlo todo". Porque jamás estoy conformada con nada, siempre quiero un detalle más... pero no siempre lo tengo todo.
Nadie tiene todo lo que quiere.
Nadie tiene a quién quiere... a menos que no sea a quien realmente sea a quien quieres contigo.
Y es curioso, porque es en eso que estoy pensando después de que mi mente despertó.
Es decir, saben quien soy, me siguieron al Instituto, me durmieron inyectándome quién sabe qué, y al despertar pienso en todo lo anterior.
En fin, supongo que es cierto: "no hay ciencia exacta para la mente".
—Iré a ver si ya despertó. —Escucho decir a una voz, que no se me es difícil reconocer.
—Joshua —Dije mientras me sentaba sobre la cama—, no se que decir.
He estado tantas veces en la habitación de Joshua, de manera inocente, cuando éramos niños. Ahora es distinto, porque no solo la habitación cambió... nosotros también.
—¿Cómo te sientes? —Dice apoyado sobre la puerta, con las manos en sus bolsillos. Cualquiera pensaría todo, pero la preocupación reflejada en su rostro me lo dice todo— ¿Quieres comer algo? Cocinaron sopa, para que te sientas mejor.
—He estado mejor. —Dije—, y estoy bien. Aún no tengo apetito.
—Bien. —Dice, con la vista en el suelo. Noto como está moviendo uno de sus pies, en manera circular.
Silencio, en su primera etapa.
Aún sigo esperando que diga algo más, porque no creo que haya venido solo a eso.
Incómodo silencio.
¡No lo soporto!
—¿Por qué estoy aquí? —Finalmente pregunte. Suelo ser una persona directa.
—Estabas de manera involuntaria, en la calle de Los Cuchillos y bueno el creyó que sería mejor que estuvieras cerca de tus padres sin estar con ellos. —Dijo, acercándose a su cama para finalmente terminar sentado en una de las esquinas de esta.
—¿El? —Pregunte, sin entender.
—Alex —Dice cortante—.
—Ya veo.
—Escucha —comenzó a decir—, ¿has visto tu teléfono?
Es una extraña pregunta. Pienso.
—No, aún no. ¿Por qué? ¿Algo en especial, que deba ver? —Pregunté esperando a que me dijera lo más tierno o más bonito.
Soy cursi, si, pero cuando estas con una persona y después de un tiempo están cerca de cumplir 6 meses juntos merecemos recibir gestos o detalles de la otra.
No se cuando sea el día en el que me canse de esperar eso, o el día en el que le dé "una oportunidad más" y termine siendo un adiós.
Porque yo, soy el tipo de persona que después de un adiós se va para siempre.
—Cuando me dijeron lo que te pasó, y que vienen hacia acá —se rasca su nuca—, entre en pánico de saber que lo único que me quedaría de ti serían recuerdos de nosotros. No tenía en quién desahogarme, o quién me escuchara y entendiera de qué trata el temor de perder a la chica que más amo así que, hice lo más tonto que he hecho.
"El temor de perder a la chica que más amo"... mi corazón se acelera.
¿Cómo alguien puede ser idiota, y luego "tierno"?
—¿Y eso fue? ¿Qué hiciste? —Pregunté curiosa.
—No es para tanto, solo —se levanta un poco de la cama y saca de su bolsillo su celular, un rostro de éxito se refleja en su rostro, creo que encontró lo que él buscaba—, solo entré en pánico y esperaba que no lo escucharás, pero es mejor que lo hagas.
Me da su celular, con la pantalla de un audio de voz listo para reproducirse.
Y me sorprende que lo tonto que él hizo fue grabar un audio de su voz, un audio que termino teniendo 5:54 de duración.
—Cuando quería hablar para corroborar si era cierto lo que me dijeron, tu celular estaba apagado y me llevó al buzón —se acerca un poco más, pero yo no me alejo— y te envié este mensaje de voz. Creía que era mejor que no lo escucharas, pero si no lo escuchabas sabía que me arrepentiría por no decírtelo.
Estira su brazo para abrir la gaveta de la mesa de noche que está junto a la cama, y de esta saca sus audífonos.
—¿Quieres que lo escuche con audifonos? —Pregunto, antes que se los pusiera a su celular.
—Si tu quieres. —Contesta.
—Entonces, no. Lo escucharé sin audífonos —Dije, mientras tomaba su celular—, y quiero que lo escuches conmigo.
Mire la pantalla y sonrió al ver "5:54" de duración.
¿5 minutos? Casi 6.
Sin duda, cuando sentimos algo perdido es cuando más lo necesitamos.
En este caso, Joshua tuvo que decir mucho para hacer 5:54 solo porque sintió que me perdería. Antes no se le había ocurrido.
Presione Reproducir, y mi mirada estaba en Joshua. Quería ver cuál era su reacción, en el momento en el que él viera la mía.
*toma aire* Escucha princesa —mi cerebro se detiene, "princesa" era como él me llamaba y aún lo hace—, no se si llegues a escuchar esto pero en serio espero que si. Hay muchas cosas de las que quiero hablarte, cosas que te las quiero decir a ti en presencia y no por celular pero justo ahora —escucho una breve pausa mientras sigue tomando aire—, justo ahora no quiero aceptar que existe la posibilidad de que ya no te vuelva a ver. Simplemente no lo tolero. —Observó a Joshua, quien me está observando vuelvo mi vista a la pantalla esperando a que el mensaje de voz continúe — Te amo Charlotte, te amo desde la primera vez que te vi corriendo y jugando con los pétalos y hojas caídos del árbol en tu jardín.
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Editado: 27.03.2022