Capítulo 8
Scarlett
Sábado 3:40 pm
Siempre fui un poco ansiosa con las salidas, mientras otras personas se arreglaban una hora antes yo buscaba mis cosas desde la mañana. Andrea ya se había ido a su casa y como yo estaba en mi cama pensado en cuan nerviosa estaba, decidí levantarme y empezar a prepararme.
No demore mucho, solo tomé la blusa blanca corta, era mi favorita, unos vaqueros altos, unos tenis blancos y me recogí el pelo en una coleta y a esperar, una espera que me pareció muy larga.
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Sábado 6:14 pm
Estaba sentada con mi hermana en los sofás de la sala frente a frente esperando a mi querida cita. Tocaron la puerta, mi hermana y yo nos miramos compitiendo con la mirada a quien le tocaba abrir
-Puedo hacer esto todo el día- le aclaré con triunfo, la conozco, sé que se levantará, siempre lo hace.
-Ash- musitó y se dirigió a abrir la puerta.
- ¿y tú eres...? - preguntó mi hermana, al escuchar eso volteé para verla sosteniendo la puerta, pero no veía quién estaba detrás de esta.
- Nathaniel Henderson-yo soy el...
- Ya voy- grité de inmediato interrumpiéndolo, me puse mis zapatos y salí corriendo hacia la puerta principal- es mi cita - dije para mi hermana, ella solo asintió confundida y cerró la puerta al verme salir.
- wow, nunca esperé no poder presentarme como tu prometido, ¿sabes? Siento que llevas esto algo escondido- dijo sarcástico.
-Esto será rápido, iremos, tendremos una cita, hablaremos y todo saldrá bien.
-te convences a ti misma de lo que pasará?
-No, me convenzo a mí misma que esto no será un desastre.
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Nos subimos a su auto y fuimos directo al cine, todo el camino fue silencio, el no habló, yo no hable y nada paso.
Al llegar al cine fuimos directo a ver las carteleras para elegir la película, llegó un momento en donde la cita se hizo tan aburrida y pues ninguno de los dos tomó la iniciativa como para mantener una conversación con el otro. Elegí una película de romance
No
No me gustaban, solo quería que el cancelara o reaccionara, pero no lo hizo.
Los únicos movimientos que obtuve de él fueron de incomodidad en su asiento al lado del mío, luego de un rato empecé a notar que moverse como si algo le estorbara era normal en él.
Perdí dos horas de mi vida en una película de romance.
Que desperdicio
- ¿Qué tal te pareció la película? - decidí al fin preguntar para romper el silencio
-Bien.
¿BIEN?
Solo respondió un "Bien"
OK, yo quería hablar y tratar de romper el silencio, pero él no ayudó.
Al salir de la sala y llegar a su auto para que me llevara ya a mi casa todo de nuevo fue silencio
Odio el silencio.
Saqué mi teléfono y revisé la hora, 10:46, note que una vez más él se removió en su lugar, pero lo ignoré.
Y ahí estaba, en su auto mirando al frente.
-está a sido la peor cita que he tenido en mi vida- suspiré y se supone que esto debió salir como un pensamiento, pero lo dije y él se empezó a reír y yo solo lo observaba, por primera vez en toda la noche lo miré directamente, llevaba una camisa blanca con las mangas recogidas y unos vaqueros que le quedaban muy bien y esa sonrisa....
Una sonrisa nos puede destruir, pero es hermosa así que la tomó, con miedo claro, pero la tomo
- Creo que desde la otra parte del cine sintieron tu incomodidad - dijo todavía con una sonrisa burlona.
- Es normal ir a una cita y no hablar ni una sola vez? -hablé yo divertida
-claro que no lo es, en realidad yo estoy muy incómodo- habló llevando su mano al cuello
-por qué? - me sentí en el deber de preguntar
-Me gusta observar cosas, y más que todo el comportamiento de las personas, no sé qué cosas te hayan pasado antes, no sé nada de eso y pues tampoco sé si algún día lo deba de saber...
- Al punto Bestia – dije un poco cansada del discurso barato.
- No estoy acostumbrado a moverme de forma tan lenta y predecible, pero contigo lo debo de hacer porque, de lo contrario te pones a la defensiva.
- ¿qué?, es enserio Bestia? - dije con una cara de no entender nada, pues no lo hacía
- Si, en enserio, me muevo rápido y tú no estás acostumbrada a eso, si lo hago tan rápido que tu cerebro no procese de la misma manera mis movimientos te pondrás a la defensiva.
- Mentira- negué
Y en menos de 5 segundos el asiento cayó hacia atrás y él estaba encima de mi
¿cómo?, tenía razón, era rápido, no lo procesé y mucho menos lo sentí
Su respiración estaba tan cerca de mi nariz que pude oler su perfume y me encantó
lo sabemos amiga, lo sabemos
- ¿Mentira? – preguntó encima de mí pero no se movía, simplemente está allí, quieto, tan quieto que si no me estuviera mirando con esos ojos verde grisáceos diría que murió
-S....si- dije tartamudeando.
-Entonces podrías alejar la punta del puñal de mi cuello?
Oh, por eso estaba tan quieto, sinceramente no me di cuenta como terminamos así
- Cuando te alejes de mi la bajaré- dije muy segura, me miró, sonrió y se alejó - Gracias -
Estaba a punto de bajarme ya de ese auto de locos cuando le puso seguro a la puerta
-Aún tenemos una cita ¿no?
-bueno, si -mire mi teléfono-ya son las 10. A dónde iremos? - pregunté con duda.
-Ya cumplí con tu prueba de no asustarme con esa película de romance, es mi turno de atemorizarte- y me dio una sonrisa un tanto macabra, sentí un corrientazo pasar por mi columna, pero lo ignoré.
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Editado: 05.01.2022