Capítulo 1

     Siempre me pregunté cómo sería el final de mi vida, sé que es raro pensar esto, pero mi vida siempre estuvo llena de estereotipos, ¡y cómo no!, siendo la hija de una familia de prestigio es lo que siempre se espera, que seas perfecta, seas la mejor en todo, el que seas feliz con cosas materiales, pues este es mi caso, nunca pude tener una infancia como la de los demás niños, la mía era llena de clases para ser "perfecta", pero sobre todo era dolorosa, no por todo lo que yo no quería hacer y debía hacer, sino porque tengo una enfermedad que se considera terminal, me detectaron Leucemia Linfoide Crónica cuando tenía un año de vida, mis papás siempre hicieron lo posible porque yo siguiera con vida, y los tratamientos ayudaron pero yo los odiaba, me quemaban y dolían horrible, me dañaba más que el cáncer, pero gracias a eso pude tener una vida más prolongada, como dicen por ahí, "solo me alargaban la vida", les contaré como ha sido mi vida, soy Lana Nicole Moretti, nací en Estados Unidos, pero me crie en Puerto Rico, viví un tiempo en Cuba por lo de mi enfermedad, finalmente mi familia consiguió construir un hospital de especialidades, donde la principal enfermedad atendida es el cáncer, así que vivo desde entonces en Puerto Rico, esta historia se va un poco atrás, cuando yo tenía catorce años, justamente cuando entré al noveno grado, obviamente en un colegio de prestigio, LIKE, por sus siglas en inglés Life Institute of Knowledge and Evolution, este era un internado de 4 años, el colegio es mixto, en este mismo instituto estudió mi hermano, él es 4 años mayor que yo, siempre me trato bien, al igual que mi familia, no puedo decir que me faltó amor, ya que a pesar de todo, mis padres estuvieron con nosotros siempre, además siempre estuve rodeada de gente que me quería, pero en esta etapa de mi vida es cuando empieza mi historia, todo se remonta al primer día de clases, cuando ingresé a LIKE.

     —¡Nicki, Nicki, Nicole! —me llamaba mi padre, yo no lo escuchaba ya que traía audífonos y miraba por la ventana

     —¡Naiki! —me dijo Nico, mi hermano mientras me quitaba un audífono

     —¡Umm! —dije mientras veía a mi hermano

     —¡Mis papás te están hablando, ya llegamos a LIKE! —dijo Nico

     —¡Cierto! —dije algo triste e hice una mueca

     —¡Mi amor, tú tranquila, te irá muy bien, recuerda que eres la mejor! —me dijo mi papá y me regaló una sonrisa

     —¡Sí, tu papá tiene razón, además nos verás todos los fines de semana! —me dijo mi mamá

     —Y tú y yo haremos videollamada todos los días— dijo Nico, yo sonreí—¿Ves?, no voy a dejar que nada te pase— me abrazó

     —¡Gracias! —me separé del abrazo—está bien—suspiré—hagamos esto

     —¡Esa es mi princesa! —dijo mi papá y todos bajaron del auto excepto yo, estaba metida en mis pensamientos cuando alguien tocó la ventana e hizo que saliera de ellos

     —¿Qué ocurre Naiki? —me dijo Nico desde afuera, yo baje el vidrio

     —Nada—dije desanimada—todo está bien—hice una mueca

     —Sabes que a mí no me puedes mentir—sonrió

     —¡Agh!, ya lo sé, es que no puedo, estoy harta de esto, a veces pienso como sería mi vida si fuera de otra clase social o si es mejor estar muerta… —Nico me interrumpió

     —¡Tú no vas a morir! —dijo mi hermano enojado—¡Perdóname!, pero odio que pienses eso, eres hermosa—dijo mientras acariciaba mi mejilla—esto es lo de siempre, debes verlo como un reto más y recuerda que entre todos tú siempre resaltas, eres única y especial recuerda, be the light —sonreí

     —Be the light—mis papás se acercaron a nosotros, ya habían bajado mis maletas

     —¡Listo! —dijo mi mamá—¿Qué pasó mi amor?, ¿por qué no te has bajado?, ¿ya te arrepentiste? —preguntó mi mamá

     —No lo hizo, solo que yo le dije que aún no se bajara—dijo mi hermano y me guiño un ojo

     —A ver niña ya bájese, va a llegar tarde a sus clases y me están estorbando—dijo Ale la recepcionista de LIKE

     —¡Si, si, si, ya voy! —dije eso, guardé mis audífonos y me bajé

     —¡Tranquila! —me dijo mi hermano, me abrazó y besó mi frente

     —¡Todos me miran! —susurre

     —¡Niña, apúrate!, ¡a ver Jesús! —mientras le hablaba a un señor—¡las maletas de la niña, ayúdale por favor! —dijo Ale a Jesús, un señor que supongo que trabaja en LIKE

     —¡Bye papá! —lo abracé y besé

     —¡Cuídate mucha princesa, cualquier cosa no dudes en llamar! —asentí, él se separó del abrazo

     —¡Bye mamá! —la abracé, ella imitó mi acción y besó mi mejilla

     —¡Te amo Nicki! —besó mi frente

     —¡Yo también! — me separé de mi mamá

     —¡Ya niña date prisa! —me dijo Ale—¡Jesús! —gritó Ale—¡date prisa, la niña trae maletas! —dijo Ale molesta y aun gritando

     —No te preocupes Ale, yo llevaré las maletas de mi hermana—dijo Nico tomando mis maletas

     —¡Nico!, ¡qué bueno verte! —dijo Ale mientras sonreía—¡está bien pasa porque Jesús de verdad que no da una!

     —¡Gracias!, ¡Vamos Naiki! —dijo dándome el pase, yo solo veía que todos murmuraban y no dejaban de verme, se sentía extraño. Entramos a LIKE y me detuve a ver la pizarra de avisos ya que ahí estaban las listas con los nombres y habitaciones, vi que a mí me tocaba la habitación diecisiete, así que me dirigí a ella