Habían pasado más de dos horas en las que Blake y Oscar se fueron, los demás veían películas en la sala, y yo esta muerta de miedo, angustiada y enojada en mi cuarto, soy una idiota, ¿por que no se los dije?, intente llamar a Blake pero no contesta mis llamadas, y Oscar dice que no sabe nada de el, mi celular comienza a sonar, contestó la llamada sin ver quien era.
– Blake por que no contestas mis llamadas. – hable enojada.
– Así que la luna de miel acabo. – esa voz.
– Tu, ¿cómo tienes mi número?
– Es fácil, solo tengo que sobornar a unos cuantos trabajadores de tu nueva escuela.
– ¿Qué quieres? – intente ir a la sala para avisarle a Alex y Jhon que el estaba hablando, no quería otra pelea con Blake, ni con mi hermano.
–Yo que tu no saldría de mi cuarto. – me quede quieta enfrente de la puerta. – se con quien, y donde estas princesa. – Chace fue quien me estuvo mandando los mensajes. – Se que estas en tu nuevo departamento sola, enfrente de tu puerta, que el travieso Alex esta con su nueva novia y tu cuñada Yessenia, que el huérfano Máx esta con su nuevo amigo Jhon, y que su hermana y también cuñada tuya esta ahí, ¿cómo se llama? A sí, Vanessa.
– ¿Cómo mierda sabes eso?
– Un mago jamás revela sus secretos mi princesa.
– No soy tu princesa Chace.
– Lo serás muy pronto, ahora escúchame bien y obedéceme, no quieres que les pase algo, como una bala, ¿cierto?
– ¿Qué quieres?
– Así me gusta. – y comenzó a explicarme el paso a paso que quería que hiciera.
Día siguiente...
Mis maletas estaban echas solo queda poner las cartas de despedida en lugares que no viera Chace, tengo miedo, mucho miedo.
– ¿Nat? – Blake entro por la puerta, mierda no, no el, no ahora. – ¿qué haces? – aún traía la chamarra que le regale, se fuerte Nat, se fuerte, es por su bien.
– ¿Qué no vez? me voy. – intente poner el mejor tono de desprecio, era difícil ya que iba ser la ultima vez que lo vería.
– ¿Irte?, No estás loca. – tomo una de mis maletas y la intento llevar de nuevo a mi cuarto, pero lo detuve.
– No Blake no puedes hacer esto, no puedes pedirme que me quede cuando tu te vas, sin darme una explicación. – sigue así Nat, no se va a dar cuenta.
– ¿Y cómo quieres que reaccione cuando tu no me cuentas cosas? – como ahora, pensé. –
– No Blake, ya estoy harta de esto. – por favor no me creas. – Yo siempre te tengo que aguantar todas tus idioteces, y yo ya no puedo más. – mis lágrimas comenzaron a salir, pero no era por lo que estaba diciendo, si no por que esta iba a ser la ultima vez que viera a Blake, mi Bestia.
– Nat. – dejo mi maleta y se acerco a mi tomando mi rostro entre sus manos, mierda como iba yo a vivir sin esto. – Perdón, perdóname, no se por que reaccione así, pero no te voy a dejar sola, Chace es el que te a estado mandando esos mensajes, atrapamos a Loui y. – ahí deje de escucharlo, todo eso yo ya lo sabía, Chace me lo había dicho, me quede viendo esos ojos negros profundo que amo, llenándose de preocupación, y tristeza, te amo Blake te amo tanto, por eso hago esto. – lo lograremos Nat, los meteremos a la cárcel. – volví a centrar mi atención en lo que decía Blake.
– No me interesa nada de ellos. – aguanta Nat.
– ¿Qué? – Blake se alejo de mi, no, no lo hagas ahora Blake, por favor. – Como dices eso.
– Ya te lo dije, me voy a ir, no quiero que tu, Chace, y nadie me encuentre.
– No, no digas eso. – lo estaba destrozando con mis palabras.
– Ya te lo dije ahora déjame ir. – por favor no te vayas Blake, es mentira, el tomo mi mano y la cubrió, puso su mano izquierda con la mía sobre su corazón.
– Nat...con la mano en el corazón te digo quédate, por que yo me voy. – se acerco a mi y me dio un beso en la frente, y ahí supe que era la última vez que lo vería, te amo Blake, el se fue, mi corazón se estaba rompiendo, te amo mi Bestia.
Trate de no voltear a verlo pero fue imposible, lo volteé a ver justo cuando el cerro, la puerta ahí fue cuando me derrumbe.
Fui a mi cuarto, para dejar todas las cartas que escribí a modo de despedida y aclarando todo debajo de una foto de nosotros en navidad, la carta que le deje a Blake estaba en dónde el guardaba sus cosas cuando se estuvo quedando aquí, esperó que cuando la lea me perdone, salí de mi cuarto con las lágrimas en mis ojos recordando la llamada.
"Mañana vas a dejar ese departamento, y vendrás conmigo, tu novio y hermano atraparon a Loui y ahora me están buscando, pero ya tengo como irme de aquí, claro no me iría sin ti princesa, si no quieres que todos tus amigos mueran vendrás conmigo y no puedes decirle a nadie, o ellos y tu morirán, si no me quieres creer ve a la ventana y fíjate en el señor que barre la calle y el botones del edificio de entre, ¿notas que traen un arma? Si intentas hacer algo todos morirán te esperó mañana a las 6 afuera de tu edificio, trae tus cosas princesa. "
Volteé mi vista hacia mi cuarto, el lugar donde viví tan buenos momento, pero todos y cada uno de ellos con Blake, con mi Bestia. Las lágrimas salieron de mis ojos sin permiso, jure no regresar con el, con el hombre que más daño me ha echo, pero si a costa de mi felicidad, Yess, Oscar, Vane, Alex, Jhon, Máx, y Blake mi Blake no sufrirían, lo haría, era capaz de hacer esto y más por ellos.
Salí de mi edificio y un auto negro estaba en la entrada, Chace salió de la puerta de los pasajeros para encontrarse conmigo.
– Hola princesa. – fue lo último que vi y escuche antes de que mi vista se nublara.
Me desperté inconsciente con un dolor horrible de cabeza.
De nuevo en este infierno, de nuevo con Chace, de nuevo amarrada de pies a cabeza