Blanco fácil

Capítulo 58

Las chicas y yo estábamos en el área secreta haciendo nuestra rutina de ejercicios como de costumbre, al momento de acabar fuimos a comer con normalidad y luego de eso Noor nos dijo algo.

—¡Arriba Señoritas! —se levantó de golpe de la mesa —vamos al área de belleza.

—Genial — Gery se anima —por fin podré probar esos nuevos labiales de color morado que acaban de llegar —corre hacia allá

—Vamos a enseñarle a nuestra pequeña las bondades del maquillaje —dice Noor

Las 4 nos dirigimos allí, ellas me sentaron en un lugar donde había chicas ayudando a maquillar a otras y que sabían que hacer por lo visto, Noor le habló algo al odio de una de ellas y rápidamente me acomodo el cabello con una banda para que no estorbara en mi cara, ella empezó a hidratar mi piel con varios productos, luego de eso procedió a ver qué tipo de base quedaría con mi piel pidiéndole opinión a mis amigas de todo, luego de un buen rato acabaron.

—¿Crees que le falto algo? —le pregunta la que me maquillo a Noor

—No creo, quedo bastante bien a mi parecer —la mira —esta vez te luciste —alza el pulgar

—No hay nada que no se arregle con maquillaje —saca un espejo y me lo da —aquí, mírate como quedaste —se va dejándome el espejo

Agarre el espejo y poco a poco lo puse frente a mí, viendo como quedé y no me reconocí, para mi sorpresa queda mucho mejor de lo que pensé, mi piel parecía de porcelana, mis pestañas estaban más largas haciendo ver mis ojos mas grandes, mis cejas habían sido peinadas y depiladas, la sombra de mis ojos era de un color rosa claro con brillos que no se veía mucho pero iluminaba mi mirada y ni hablar de mis labios, era la primera vez que no se veían tan pálidos ni resecos, en realidad era la primera vez que toda mi cara no se veía apagada, el maquillaje había logrado un efecto de luz en mi rostro y parecía como si estuviera viva. No pude evitar sonreír.

—¿Enserió esta soy yo? — dije con asombro y felicidad

—Por supuesto niña —Noor me responde —eres tu

—Me veo demasiado …. —me quedé pensando mientras veía mi rostro

—Bonita… , estas bonita, siempre lo fuiste solo que no sabias como sacar esa belleza y ahora hemos logrado resaltarla para ti

—¡Wao! Jajaja —sonrei ampliamente —quiero verme así siempre de ahora en adelante ¿Qué debo hacer para estar así?

—Y lo estarás niña — Noor pone su mano en mi hombro —aprenderás a hacer esto y más, ya verás como lo conseguirás

La miré, sonreí y puse mi mano sobre su mano, estaba tan agradecida con ella, con las chicas en sí por hacer todo esto por mí, están logrando que yo cambie la perspectiva sobre cómo me veía a mí misma y me vea de nuevo como en realidad soy, que me ame y sobre todo que empiece a quitar ese velo negro que tenía en mis ojos y nublaba mi vista. Estoy muy emocionada por mostrarles a los infelices esta nueva versión de mí, ya verán lo duro que estoy trabajando para volvernos a ver.

En la noche hice toda la rutina para la piel que Noor me había explicado, cuando me bañe me desenrede el cabello bajo el agua para no dañarlo y use el peine que me dio, luego de eso aplique crema en mi cara y sentí como mi piel estaba ardiendo, me estoy dando cuenta de lo maltratada que ha estado hasta ahora, pero ya no más, haré las cosas bien y me recuperaré, estaba muy concentrada en eso cuando de repente mi cabeza me empezó a doler entonces escuché unas voces que venían acompañadas junto con mareos, me estaban dando ganas de cortarme así que me pare y desesperadamente busque la navaja que tenía pero no la encontraba, Noor entró a la celda y asustada me dijo.

—Debe ser otro ataque y el encierro también te está empezando a pasar factura —me mira —pero lamento decirte que no te daré esa navaja, no quiero correr el riesgo de que se te pase la mano y te desangres, debes buscar otra forma de sobrellevarlo

—Con desespero y rascado mi piel vi que en su mano tenía una cajetilla de tabacos — entonces dame eso —señale la cajetilla —quiero uno, necesito deshacerme de este sentimiento extraño — rascaba mi cabeza con fuerza

—¿Quieres fumar? —me mira con asombro

—¡Sii! —le dije desesperada —rápido dame uno —le extendí la mano que en ese momento me estaba temblando mucho.

—Ella alzó los hombros y me dio uno —¿al menos sabes cómo hacerlo?

—No, pero no importa, ahora mismo necesito cualquier cosa para calmarme.

Me vio y solo sonrió negando con la cabeza, sacó uno y me dijo.

—Mira con atención —se lo puso en la boca —cuando lo tengas así, acerca la parte blanca al encendedor y da bocanadas de aire hasta que se encienda

Miraba con atención como lo hacía y una vez que ella soltó el humo de su boca agarre rápido el encendedor que dejó en la mesa y procedí a hacer lo que ella hizo, no me fije si lo hacía bien o mal solo lo hice con rapidez y en un momento sentí la primera bocanada de humo en mi boca; la contuve un tiempo y luego la solté quitando el cigarro de mi boca aunque tosi un poco por qué el humo se me fue a la nariz pero un alivio recorría mi cuerpo entero y mis ojos se cerraron, no sé qué efecto causó en mí, pero me empezaba a sentir mucho mejor.

—¡Vaya, vaya! —me dice Noor con sorpresa —¿Quién lo diría jaja? —aprendiste a fumar muy rápido niña.



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En el texto hay: drama adolecente

Editado: 08.12.2024

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