The Judge/El Juez

Estoy enloqueciendo, estas semanas he pensado mucho en la muerte y Blurryface no me deja en paz.

— ¿Me llamaste?

— ¡Ya déjame en paz!—grito desde mi interior—, no lo soporto más. No soporto que me manipules.

— ¿¡Qué pasa, hijo!?—dice mi mamá desde la cocina, debió oírme.

— ¿Te vas a rendir?—Resuena Blurryface en mi cabeza de forma burlona— Esto fue fácil.

Ignoro a Blurryface y busco que responderle a mi madre antes de que baje al sótano.

— ¡Nada, mamá —grito hacia arriba —. No pasa nada!

A veces pienso en que lo hipócrita que puedo llegar a ser, siendo duro y frío en el exterior para que nadie me vea por dentro. Aunque todos sabemos que hay alguien que lo ve todo que sabe que hasta cuando el líder de los chicos malos cantó algo suave y mojado de dolor.

Él dice "Escuché el eco de su escondite secreto. Seguro olvidó cerrar su puerta, mientras tocaba esos melancólicos acordes".

Él debe carcajearse y llorar al mismo tiempo, le debe dar vergüenza y pena ajena ver que nos escondemos detrás de un poste delgado, creyendo que nadie nos ve sólo porque no nos queremos ver a nosotros mismos que nos encerramos en una habitación y cerramos todo, y sus cuatro paredes me declararon loco. A todos nos declaran locos.

Mi interior es como este sótano, tres luces encienden pero la cuarta está fuera, no enciende. Puedo ver todo pero se nota que no está bien, lo noto porque está más oscuro que la noche anterior.

Uno trata de olvidarlo, me olvidé de la falta de bombillas en esta casa, tratamos de hacer que todo está claro e iluminado con nosotros pero claramente hay un rincón oscuro.

Pero tratamos de corregirlo y reemplazar esa bombilla quemada por una que funcione, así que me dirijo a una ruta que creo que va al sur.

Pero no soy bueno con las direcciones. No salgo mucho y creo que estoy perdido, pero no pediré indicaciones y me oculto detrás de mi boca cerrada, fingiendo que tengo una idea de adónde voy. Soy bueno en eso, soy profesional con las imperfecciones y soy mejor amigo de mi duda.

Me siento loco ahora que lo pienso lentamente, ahora que mi mente se apoderó y lo escucho fuerte y claro dentro de mi cabeza.

Pienso "¡Wow! Probablemente debería haberme quedado dentro de mi casa."

Así que regreso a ese sótano lo más rápido que puedo.

Encontré mi camino, aunque no es el más noble ni en el lugar correcto. Creo que incluso es cobarde.

Tiempo correcto, lugar equivocado.

Mientras presento mi caso, a la vez tomo una vieja navaja y la pongo sobre mis venas, quiero dar fin a todo, sé que iré al infierno por lo que voy a hacer.

¡Eres el juez! ¡Oh no!

¡Dios!

¡Libérame!

Sé que mi alma se enfría, se prepara para lo que viene. Para quemarme, para castigarme.

Después de todo, el infierno es caliente por una razón. ¿No? Para castigar, pero estoy preparado.

Así que por favor, tómame y acaba con todo esto de una vez.

Veo a un lado las hojas de la canción en la que estoy trabajando.

No sé si esta canción es una rendición o un revel, no sé si esto se refiere a mí o al diablo.

De pronto la puerta empieza a sonar.