Era como una mansión, más grande que una mansión tenía un estilo antiguo y misterioso, en la entrada habían bancas de mármol con distintos diseños ya sean las fases de la lunas o rosas y símbolos que no llegue a reconocer, había una fuente que iba en escala, en la parte de arriba había un círculo y del salía el agua, había flores y enredaderas en las paredes de la Academia todo era increíble las puertas principales tenían un mosaico de cristal que mostraba un paisaje hermoso y en el centro en la puerta izquierda estaba pintada la mitad de su insignia el primer cuadrado era negro y tenía dos manos unidas y alrededor de estas habían una especia de neblina verde, abajo tenía un bosque con sus árboles con sus hojas naranjas, verdes, amarillas era como un juego de colores; por otro lado la de la derecha reflejaba la luna en todo su esplendor y el ultimo recuadro era oscuro y tenía una daga de plata con diseños tallados en la parte del mango.
-Por ahí no- Nattiel me detuvo antes de que pudiera abrir la puerta asentí y los seguí caminamos hasta llegar a la parte de atrás había un jardín que no se comparaba al de la parte de al frente Luke abrió la puerta que nos llevaba a un pasillo oscuro todos entramos sin ningún problema caminamos con cautela hasta llegar a las escaleras subimos y antes de pasar Nattiel verifico que no hubiera nadie nos hizo una señal de que continuáramos.
-Nat a mi habitación es más cerca- Nattiel asintió y seguimos caminando había muchas puertas cada una con un numero diferente, pero igual letra como la primera puerta al inicio B15 supuse que se guiaban por el abecedario, aunque mi idea cambio al llegar a otro pasillo como si fuera un piso más, pero sin serlo me preguntaba como hacían que esta Academia fuera así de grande; nos paramos frente a una puerta y supuse que habíamos llegado a la habitación de Luke lo extraño era que en vez de ser C como en el abecedario era HL35 esta Academia era cada vez más rara si lo pensaba ya dentro de la habitación todos suspiraron como si acabaran de pasar una gran prueba.
-Alguien me quiere explicar qué demonios está pasando, porque créanme esto es muy raro incluyéndolos- me cruce de brazos frente a todos ellos, se miraron unos a otros y Nattiel paso al frente y me miro.
Pese a que nos hemos visto, nunca me dirigió la palabra, solo me observaba, era un tanto escalofriante por su mirada intensa.
-Mira- Nattiel se había detenido y no sabía porque miraba espectado a algo seguí su mirada y vi que estaba fijada en mi brazo que ahora gracias al rasguño de aquella cosa se había tornado amarillo tenía sangre chorreando de mi brazo -Ven, James ayúdala- tomo de mi muñeca e hizo que me sentara en el borde de la cama todos se colocaron a mi alrededor; James se puso de rodillas y miro mi brazo sin tocarlo.
-Si no saco el veneno...-sabia a lo que se refería al igual que todos -Pero, no te preocupes dame 15 minutos y estarás mejor- asentí un poco mejor - ¿No te duele? - negué la verdad es que ni siquiera lo había notado si no hubiera sido por Nattiel; James mordió su labio inferior tenía el entrecejo ligeramente fruncido como si algo anduviera mal, negó y salió de la habitación el lugar quedo en silencio y eso era un poco incómodo.
-Antes... bueno antes de lo de tu brazo te iba a explicar todo, no somos normales- asentí, me miro como si esperara que dijera algo, pero decidí que siguiera -imagino que te preguntas ¿Cómo es que no nos cansamos en los partidos? O ¿Cómo es que hicimos lo del bosque? Se que son muchas preguntas, y las responderé todas has escuchado de las brujas, vampiros, hombres lobo, zayas - un frio me recorrió todo el cuerpo una parte de mi tenía miedo de descubrir la verdad, pero la otra veía esperanza -bueno todo eso es real y nosotros somos la prueba, sé que es algo difícil de entender, pero no te asustes nos conoces y nunca te haríamos daño, la Academia fue creada para controlar nuestros poderes y controlarnos, para así poder mezclarnos entre los humanos sin ser un peligro. ¿Podrías decirme algo tu silencio me mata? – suspiré aquello era mucho para digerir hombres lobo, vampiros y ¿Qué era una zaya?, zaya sonaba a un plato mexicano, me estoy volviendo loca. Pensé un poco ellos podrían estar mintiéndome y si les digo quien soy en verdad, no sabía qué hacer, pero no podía dejar que lo notaran.
-Les creo, y no huiré- sonreí de media boca a todos se les plasmo una gran sonrisa James entro con la respiración agitada.
-Eso fue intenso, la profesora Jules casi me descubre- todos abrieron los ojos como platos, supuse que era alguien muy importante la directora o algo así, o simplemente un profesor importante al cual ellos les tenía miedo -Pero conseguí todo lo necesario- todos asintieron James se colocó en la posición que estaba antes y se colocó guantes como todo un doctor tomo mi brazo y lo examino tomo una especie de crema chocolate brillosa y la aplico en los bordes de los rasguños, luego tomo lo que creí que era agua aunque en realidad era un poco más espesa y era un azul más fuerte azul cielo y con un cuentagotas lo aplico dentro de la herida sentí un leve ardor, pero nada más vi como un líquido amarillo estaba siendo expulsado con una toallita comenzó a limpiar todo lo que salía al final limpio todo y mi brazo comenzó a cicatrizar vi como mi piel se iba uniendo poco a poco hasta que solo se volvió una pequeña cicatriz que ni se notaba.
- ¿Cómo? Sabes no preguntare ya que existen brujos y supongo que tú eres uno ¿cierto? O me equivoco- James asintió al principio sorprendió luego supongo que entendió de que me habían contado todo porque asintió y sonrió, estaba empezando a sentir frio y eso me provoco un estornudo -Creo que deberías cambiarte, la lluvia no te hará bien- antes de que pudiera decir algo los chicos se adelantaron.
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Editado: 23.09.2021